Hablemos de amistad

Experiencia #1

-Gabriela (bubu_24117)

El año pasado

Todo empezó el año pasado. La verdad me caía bien, era como el mejor amigo que toda mujer desearía tener. Parecía todo bien, extrañamente bien. Todo miel y rosas, hasta que me confesó algo que yo no podía corresponder: "se enamoró de mí", o, al menos, me lo insinuó y me lo confirmó su mejor amigo de ese entonces.

No sabía qué hacer, porque meses atrás supuestamente le gustaba una chica de otra sección y que tenía el mismo nombre que yo. Pensé durante un mes que era por el mismo nombre que compartimos la chica y yo sin querer, pero él se me confeso por un mensaje de WhatsApp un mes después y lo único que le pude responder fue:
"Eres un chico lindo y todo, pero no podría corresponderte porque no siento lo mismo y no podría obligarme a quererte de otra forma que no sea de amigos porque te ocasionaría mucha ilusión y daño. Lo menos que quiero ahorita mismo es hacerte daño porque te veo como un hermano. Lo siento"

Le continúe diciendo que se merece a alguien que sienta lo mismo que él. Él dijo que estaba bien, que entendía. Entonces coincidimos en que debíamos alejarnos un mes y medio para que "se le fuera el enamoramiento". Lo que no sabía en ese entonces es que no era un simple enamoramiento, y que el amor no tiene una fecha en donde diga: "bueno ya no sientes nada por ella o él".

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Pasó el mes y medio y todavía no hablábamos mucho por lo del distanciamiento que nos interpusimos.

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Pasaron 2 meses y medio. Ya hablábamos. Me había dicho que ahora podía verme como una hermana, me puse feliz ese día y comimos helado camino a casa con unos amigos más.

Parecía que nuestra amistad se había fortalecido. Como ya era noviembre y se acercaba la promoción tuvimos que practicar el baile (chico y chica). Nos tocó juntos, éramos la única pareja de baile que se divertía y no estaba incómoda, o al menos no estábamos medio tensos antes de la vuelta que era el cambio de pareja. En la primera vuelta se cambia de pareja y en la segunda vuelta regresamos con nuestra primera pareja. Cuando regresaba con él se ponía como medio celoso y el ambiente se ponía tenso, hasta que terminamos la coreografía y teníamos que irnos a nuestras casas. No me iba con él porque me pedía como explicaciones y no podía decirle mucho porque no sabía qué decirle además de "es un baile" o "yo no hice el baile".

Llegó diciembre 7 y era el día de la promoción. Ese día había ido al spa con mi mamá y hermana. Fui tarde porque mi casa quedaba lejos del local donde se ubicaba la promoción. No llegué a hacer el baile y eso había aliviado a mi mejor amigo, o al menos lo sentí más aliviado. Ese día fue todo bien, bailamos todos, comimos, reímos y lloramos, porque era el último día que nos íbamos a ver, aparte de cuando recogiéramos la libreta de notas.

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Era el día de recoger notas y él faltó. No me hice mucho problema porque vivía lejos del colegio. Para la tarde hablamos y él me empezó a decir que, por qué no le había preguntado por qué había faltado, a lo que respondí que tendría sus razones propias porque sabía que él vivía lejos, se calmó un poco, pero siguió un poco molesto.

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Este año empezamos bien, como al inicio del año anterior, pero, meses después, me pedía muchas explicaciones o me preguntaba a cada rato qué hacía, si no le parecía me daba la excusa de "porque era malo" y le creía porque siempre he confiado en él.

Después, también me di cuenta de que él trataba de coincidir con mis gustos, por ejemplo: a mí me gusta el león y a él también. Así.

Pronto noté que todo apuntaba a que tenía como una obsesión. Por las preguntas atípicas del porqué lo dejaba por 2 minutos o cosas que no le parecía y quería que cambiara.