✿Rosa azul✿

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La convivencia entre ambos fue bastante extraña, Kei aún no se acostumbraba a la presencia del peli verde mientras éste solo estaba sumergido en su mundo y cuidando la salud del más alto.

— Eres bastante aburrido, Tsukki — susurró el menor mientras estaba acostado en el sofá y Kei terminaba sus trabajos.

Tsukishima lo ignoró y siguió escribiendo en su computadora, además estaba un poco incómodo sentado en el piso porque alguien estaba ocupando las almohadas como si fueran juguetes. Tadashi estaba haciendo un pequeño fuerte en la sala, Kei apenas le ponía atención y el pecoso se aburria porque no tenía nada que hacer.

Yamaguchi al verse ignorado descaradamente por el más alto, prefiere molestarlo a seguir haciendo el fuerte de almohadas, después de todo, la paciencia de Tsukishima no era infinita y siempre había algo que molestaba al rubio.

— Recuerdo que uno de mis anteriores protegidos eran mucho más agradables y divertidos que tú. — comento Tadashi esperando una reacción.

— Pues vete con algunos de ellos, no te necesito aquí.

Yamaguchi hace un pequeño puchero, haciendo un pequeño berrinche mientras caminaba hasta la cocina para poder encontrar algo interesante que hacer.

— Ya que estás ahí puedes traerme un poco de pastel, gracias.

Tadashi rodo los ojos. Sentía su orgullo herido por la actitud de su protegido, era el primero que no le hacía preguntas o por lo menos mostrar algún interés sobre su linaje.

— Tonto humano amargado que no sabe disfrutar de la vida. Ni una pisca de curiosidad, ningún pedido, nada. Tsukki tonto, niño idiota.

Por supuesto que Tsukishima escuchaba todo lo que decía el pecoso.

Tadashi busco en el refrigerador el pastel, sacó para el rubio y para el mismo. Yamaguchi llevó ambos pedazos a la sala, dejando el suyo sobre la mesa.

— Toma — Escuchó Kei, y apenas levantó la cabeza para mirar al ángel sintió como algo frío y suave chocar contra su rostro.

Tadashi no pudo retener sus carcajadas, su venganza estaba hecha y se sentía fantástico.

Kei se levantó de su lugar y caminó con calma hasta el baño, ese tipo de cosas era pan de cada día desde que el pecoso había aparecido en su vida.

Cuando volvió no puedo guardar su curiosidad al ver a Yamaguchi buscando algo en la sala con unos lentes pequeños y redondos, Kei tiene una pequeña idea de donde salieron esos lentes de ópera, pero prefirió no comentar nada.

— ¿Qué estas buscando? — decidió preguntar para poder ayudarlo y que se quedara tranquilo un mísero momento.

Tadashi le sonrió con la más bella sonrisa que podía hacer, por unos cortos segundos Kei sintió como un dulce calor subía hasta sus mejillas.

— Tu paciencia y tu sentido del humor— responde con calma y un deje de diversión.

Kei completamente indignado toma todas sus cosas y se dirige hasta su habitación encerrado bajo llave para que el pecoso no pudiera entrar; un pequeño detalle que pasó en alto, es que Tadashi no es humano.

— ¿No puedes dejarme un momento a solas? — preguntó el rubio bastante molesto.

— Si quieres masturbarte debías haberlo dicho desde un principio.

A Tsukishima se le subieron los colores tanto por la vergüenza y la ira.

— ¡VETE!

Tadashi no tuvo más que salir del cuarto con un pequeño puchero marcado en sus labios.

Yamaguchi se quedó en la sala mientras que Kei terminaba su trabajo.

— ¿Por qué me tocó cuidar a alguien tan serio? — se quejó mientras comía otro pedazo de pastel. — Tsukki parece una dinamita que se prende con agua y no con fuego.

Normalmente Tadashi no haría caso pero la cara que había puesto Tsukishima si lo había asustado un poquito, muy poquito.

Sacó con cuidado algunas plumas y las dejó en la mesita de centro, pensó en qué tipo de flor haría esta vez y no había nada mejor que hacer una rosa azul. Aparecieron unos cuantos pétalos y las rosas enteras, Tadashi tomó con cuidado todas estas y caminó hasta la habitación de su protegido, tocó con suavidad la puerta esperando que le autorizará enterar pero no escucho nada del otro lado.

— Permiso, Tsukki.

Para sorpresa de Yamaguchi, Kei estaba completamente dormido sobre el escritorio.

Se cruzó de brazos y suspiro algo resignado, no podía quejarse porque por lo que podía ver, estudiar era realmente difícil.

Tadashi sacó algunas mantas de la cama y lo cubrió porque llevarlo a la cama no era posible, sus pobres alas no podrían con tanto peso. Los humanos eran demasiado frágiles, podían enfermarse demasiado rápido incluso si no se abrigaban bien podían pescar un resfriado.

Yamaguchi acomodó a Tsukishima y apagó todo antes de salir. Salió por la ventana para ir a la terraza del edificio y poder mirar la luna con las estrellas.

El viento movía bastante brusco los pobres árboles, sacando algunas hojas o solo agitándolas; todo era maravilloso a la vista de Tadashi, todo era una bonita pintura que muy pocos humanos podían apreciar.

— ¿Crees que estoy haciendo bien mi trabajo? — la pregunta fue directamente a la luna.

Yamaguchi tenía la costumbre de hablarle a la luna cada vez que salía y se sentía preocupado, pero por supuesto, nunca recibía respuestas, incluso cuando más lo necesitaba.

Tsukishima despertó con un fuerte dolor en el cuello y los brazos y piernas dormidos, salió en busca del peli verde, buscó por la sala y la cocina que eran los lugares donde más le gustaba al ángel; buscó por el balcón, pero no encontró nada.

— Ya volverá.

Tadashi sintió como sus alas se movieron involuntariamente y con esa señal sabía que su "niño" ya estaba despierto.

Entró con cuidado, llamando al rubio pero al no ver a nadie en la habitación salió al pasillo donde Kei salía de baño.

— ¿Qué tal la ducha? — preguntó Tadashi mientras movía sus cejas de arriba hacia abajo.

Tsukishima por supuesto que se asustó, pero el susto pasó al pudor.

— ¿Por qué te avergüenzas? No hay nada que no haya visto antes.

Los colores subieron por el rostro pálido de Tsukishima.

— ¡Yamaguchi cállate!

Tadashi solamente siguió burlándose del rubio, por todo lo que quedaba del día. 

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Holis! Cómo han estado?
Estuve desaparecida por mucho tiempo jajajja perdón.

Ahora mismo debería estar terminando un trabajo pero vi que este capítulo nunca lo subí y pos aquí estoy jajajajja.

Aun tengo muchas historias en borrador pero no he subido nada porque no recuerdo de que trataban esas historias, se supone que mis vacaciones comienzan el 27 de diciembre y tengo planeado ponerme al día con esas historias.

Y eso jajajajja.

Muchas gracias por seguir esperando las actualizaciones de mis historias y muchas gracias por leer.

Perdonen las faltas ortografícas (porque no lo leía antes de subir jajajaj)

Recuerden tomar agua, comer bien y dormir (mi horario del sueño es una mierda y con suerte duermo 3 horas al día, no sean como yo).

✨Nos leemos muy pronto, bye bye✨.

𝓜𝓸𝓷 𝓭𝓸𝓾𝔁 𝓪𝓷𝓰𝓮 // TsukkiyamaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora