4*Esto no me puede estar pasando a mi..

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Dos meses después..

- ¡¡Si !! - grité de alegría al ver mis resultados, esto va viento en popa - ¡Ty ! , ¡Cari! , ¡ He pasado ! ¡He pasado! No puedo creerlo - emocionada.

- ¡ Yo también ! ¡He pasado! - Nos quedamos mirando y..

- ¡ Hemos pasado ! ¡ Hemos pasado ! - decimos a unisono- ¡ Hemos pa... - toda la emoción se corta al darnos cuenta de la presencia de unos extraños individuos delante de nosotras. - ¡Mierda !

- Hola prince...- estos se ven cortados al notar la presencia de Ty 

- Ni se os ocurra - añade un molesto Ty Parker - Prin ce si tas - dice con un tono burlesco.

- ¡ Que demonios hacéis aquí sin cerebros ! - esta vez es Caroline quien habla 

- Lo mismo que vosotras - con tono burlesco - os veremos el primer día de clase.

- Que broma pesada es esta Bouffard - añado de mala gana 

Ninguna, os dijimos que no os dejaríamos vivir en paz..- agregó Sean - ah y.. esto apenas comienza. Ciao bellas


Esto no puede estas pasando, no a mi. Odio a este par , no pueden buscar su cerebro en paz y dejarnos vivir tranquilas, no , no pueden, tienen que jodernos la existencia. -Genial, este año será movidito.- detesto verlos y escuchar su estúpida pero masculina voz, pero que tonterías digo, los odio.

*Alex*

Los perdimos de vista enseguida, este año será movido y ..divertido. Se por mis fuentes que mañana es el cumpleaños de Corina y que se dará una gran fiesta ya que cumple la mayoría de edad. Eso quiere decir que André Abbaci le dirá la verdad sobre sus '' negocios '' y tanto ella como su inseparable amiga, Caroline , pasarán a formar parte de nuestra vida. Solo espero que después de esto, no nos odie mas de lo que nos odia ahora. Por Dios, por que diantres no odiará tanto, antes no era así, era tan tierna, tan linda , tan cariñosa y adorable... pero desde aquello cambió conmigo y con...Sean.

*flashback*

-Que hacemos Alex..-con lágrimas en sus ojos- no quiero que muera, no el ..

-Llevémoslo al veterinario, estamos cerca, tardaremos solo cinco minutos- digo desesperado ante sus lágrimas - no llores porfavor Corina.

Su conejito había caído a la piscina mientras estábamos jugando tranquilamente. Fué mi culpa, ella adoraba y amaba a su pequeño Manchitas y yo no tenia ningún derecho a molestarla, era pequeño, no sabia del valor de las cosas. Cuando calló al agua me tiré para cogerlo al ver las lágrimas en sus ojos, no quería ser el causante de esas lágrimas, pero fue inútil, al llegar al veterinario ya había muerto. Desde entonces ella cambió conmigo y con Sean y ahí fue cuando empezó esta guerra, cada verano nos invitaban a su casa, ella odiaba vernos allí y nosotros verlas a ellas , Corina y Caroline , Caroline también nos odia y eso es lo que todavía no logro entender, ella no tenía motivos o si los tenia, los desconozco.

*fin del flashback*

- ¡ Alex ! - salgo de mis pensamientos y me doy cuenta que Sean me había estado hablando y yo no le había prestado atención - No se que te pasa, últimamente no me prestas atención, se puede saber en que estas pensando.

- No, en nada. Mañana es el cumpleaños de Corina, André nos ha invitado, ya sabes, los negocios son los negocios. - intento desviar el tema hacia otra dirección.

-Es cierto, se me había olvidado. Gracias por recordármelo hermano.- se marcha pero no sin antes decir - no creas que me he olvidado, así que otro día hablamos de ello. - mierda, siempre adivina lo que estoy pensando, bueno, casi siempre.

*Corina*

Ya era la hora de cenar y obviamente, no tenia ganas de soportar a la mujer que tengo como madre pero en cierto modo, me conviene bajar ya que dentro de una hora vendrá Cari , es noche de chicas y teníamos que estar juntas todo el día de mañana ya que al fin voy a tener dieciocho. Así que baje las escaleras encontrándome con Max y Sax , esta noche estaban algo, um... ¿raros?

Bingo, le han hecho algo a mamá y se están escondiendo para no escuchar su largo y agotador sermón así que ellos me indican que no diga que los he visto así que eso hago, sigo bajando las escaleras mientras los gritos de mi '' querida madre '' se escuchan por toda la mansión. Ignoro su escandalo y me dirijo al despacho de mi padre para avisarle que era hora de cenar y darle un par de besos. Así que eso hago y luego salimos del despacho bien abrazados cosa que a su esposa no le agrada.Cenamos tranquilamente hasta que el timbre suena y si , era ella , mi esplendida mejor amiga.Lo cual pido permiso para retirarme e ir con ella a mi habitación y al fin poder tener paz.

Estuvimos casi toda la noche hablando de todo, lo que haríamos , donde iríamos y esas cosas. Su cumpleaños era dos días después que el mio así que mi padre decidió comprarnos unos boletos de avión que todavía no sabemos que destino tienen pero de igual forma nos entusiasma la idea de pasar este verano fuera de nuestras respectivas casas. Cuando nos estábamos durmiendo, oímos una piedra chocar a mi ventana, y luego otra y otra. Así que enseguida me asomo y veo una silueta que ya conocía, la pregunta era, ¿que hace el aquí a estas hora? 

- Tengo frío - hizo un puchero - ¿ Pensais dejarme aquí por mas tiempo? - Insiste.

Ty , estas no son horas. - digo con tono burlesco al verlo temblar, es tan..tan..sexy? 

Lo se, lo se ..pero no podía perderme vuestra noche de pijamas...- dice divertido - ahora me dejas subir porfi plis?

-Venga sube antes que te vea alguien - sonríe y en menos de un minuto está arriba- Shh..no hagas ruido.

Entonces cierro la puerta con llave y Cari se hace un poco a un lado para que Ty se recueste con nosotras, como cuando eramos pequeños y el se quedaba en la casa del lago, lo que mis padres no saben, bueno, mi madre , es que Ty siempre dormía con nosotras porque en aquella casa teníamos miedo y el era nuestro héroe. Así que nos acomodamos y dormimos hasta que un rayo de luz entra en la habitación. Cari y yo nos despertamos a la vez pero no vimos a Ty por ningún lado, solo encontramos una nota suya diciendo que se fué antes que amaneciera ya que no quería que mi familia lo pillaran y que nos veríamos en la cafetería del centro a las nueve de la mañana,así que nos apresuramos en vestirnos y en ir a nuestro encuentro. 

Luego de desayunar fuimos de compras y de ahí a celebrar juntos mi cumpleaños, solo los tres. Era nuestra tradición, celebrar de alguna forma nuestros cumpleaños juntos y ya luego ir a la gran fiesta que siempre montaban nuestros padres. Pero dejamos de hacerlo cuando Tayler se marchó. Al cabo de unas horas Caroline y yo teníamos que estar en casa ya que las dos celebramos nuestro cumpleaños juntas, son dieciocho y como tal lo celebraremos juntas.

Al limite de la locuraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora