The Walking Dead: The Fall

Capítulo 1: Amanecer negro

RODRIGO POV:

En una casa antigua y abandonada, un vagabundo estaba durmiendo. Este se llama Rodrigo, un sujeto de alrededor de unos 37 o 38 años. El hombre se levantó del suelo donde estaba durmiendo. En esa casa, Rodrigo pasaba la noche junto a dos otros vagabundos más. Uno se llamaba Emilio y el otro Lucio. Cansado y con algo de hambre, Rodrigo camina por la casa en busca de sus compañeros.

Rodrigo: Chicos .... Oigan .... ¿Dónde carajos están? .... Hay que salir a buscar comida muchachos.

Mientras Rodrigo caminaba, en el suelo se veían unas gotas de sangre las cuales lo manchaba. La casa estaba a oscuras ya que no tenían luces. Las ventanas estaban rotas y el aroma era uno que se sentía hasta afuera de ella. Esta casa era de dos pisos y Rodrigo se encontraba en el piso de abajo. Este continúo buscando a sus compañeros sin hallar rastro de alguno de ellos, hasta que llegó a una de las habitaciones. Ahí fue donde encontró un pedazo de vidrio lleno de sangre. Toda la sangre estaba esparcida en el suelo. Rodrigo comenzó a asustarse. Fue en busca de sus amigos. Rápidamente empezó a sentir pánico. Poco a poco sentía ese terror escalofriante, teniendo miedo de que alguno de ellos se haya quitado la vida. Busco y busco. Se detuvo en la zona de las escaleras. Donde se veían las gotas de sangre las cuales estaban marcadas en cada escalón de la escalera que llevaba directo al piso de arriba de la casa. Rodrigo siguió ese rastro de sangre. Pero lo que vio al subir lo dejo despavorido. Encontró un brazo humano en el suelo. Y cuando levantó la cabeza, vio a su amigo Emilio en el suelo, muerto, lleno de sangre y prácticamente devorado. Rodrigo gritó del susto que le dio contemplar esa escena. Cuando él vio el cuerpo de su compañero, se podía ver una silueta sobre éste. Algo estaba comiéndose a Emilio. Rodrigo muy asustado vio que quien estaba comiéndose a Emilio era Lucio. El cual tenía una cortada grande en su brazo izquierdo, lo cual indicaba que él se había quitado la vida cortándose las venas. Pero de alguna manera este aún estaba con vida solo que ya no era el mismo de antes. Lucio miró fijamente a Rodrigo. Este dejó de comer los restos que quedaban del cadáver de Emilio y se dirigió a Rodrigo. Comenzó a caminar hacia él. Rodrigo con mucho miedo, empezó a correr. Pero se resbaló con la sangre de Emilio y esto provocó que Rodrigo se caiga, causando que el pobre hombre, rodara. Él quedó con una herida en la cabeza. Trato de levantarse lo más rápido que pudo. Fue a buscar su mochila y salió corriendo de esa casa. La luz del sol no lo dejaba ver bien. Aun así, él siguió corriendo en busca de ayuda. Hasta que encontró una patrulla de policía. Fue corriendo hacia ella para relatar lo que le sucedió.

Rodrigo: ¡OFICIAL!!! ¡OFICIAL!!!! ¡AYÚDENME!

Dos policías se acercaron a él y lo tomaron del brazo.

Policía 1: Señor, ¿se encuentra bien? ¿Qué le sucede?

Rodrigo: Por favor tienen que ayudarme, mi compañero ... Devoró a un colega mío .... Y..... Y....Dios por favor tienen que ayudarme, tienen que hacerlo.

Policía 1: Señor necesito que permanezca tranquilo, no debe estar angustiado.

Rodrigo: ¡NO ME VOY A CALMAR UN CARAJO! Ustedes son policías, deben creer lo que digo. Mi compañero es un puto caníbal.

Policía 2: Debe estar borracho. Llevémoslo a la comisaría.

Rodrigo: ¿Son sordos o unos pelotudos? ¿No entienden lo que les digo?

Policía 1: Muy bien señor, basta. Primero usted no nos levanta la voz y segundo que quiero saber si usted está bajo los efectos del alcohol.

Rodrigo: Claro creen que soy un borracho de mierda y por eso no me creen. Saben que, si ustedes no se encargan de esto. Entonces lo haré por mi cuenta.