CUANDO TE VUELVA A VER - JENLISA [ADAPTACION] [Terminada]

CAPITULO 22

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JENNIE POV

Me quedé de rodillas en el sofá llorando mientras ella se iba a la cocina. Cuando pasó la puerta del comedor dejándome completamente sola me dejé caer en el sofá. Me venían la imágenes de anoche, y las de hace 10 minutos. Era tan perfecto, nuestros cuerpos tocándose y nuestros labios haciendo ese baile tan perfectamente coordinado que solo ellos saben hacer. Ya la echo de menos. Necesito su presencia a cada segundo que pasa.

Es mi droga y cuanto más pruebo de ella, más la necesito y más la quiero.

Le mentí al decir que amaba a Tae y ella lo sabe, lo que no sabe es porque le miento. "Si tú me dejas, la denuncio y después la hundo. Sabes perfectamente que tengo poder para conseguirlo." Esa frase se repite una y otra vez en mi cabeza cada vez que Lisa me pide que deje a Taehyung. Pues claro que lo dejaría por ella, pero me tiene anclada como ya le dije.

Literalmente anclada debajo de este mar que me ahoga lentamente cada vez que me imagino un día más sin Lisa. Me da miedo el pensar que le puede hacer algo a mi Lili, él puede, tiene dinero y poder para conseguir lo que quiere, tengo que mantenerla a salvo, de alguna forma, yo tengo que apartar mi felicidad, lo haré, aunque me duela.

Necesito hablar con Jisoo, necesito que me ayude y que me apoye, sé que lo hará. Hoy tengo que tomar una decisión y no va a ser fácil. Sin embargo, hay algo que tengo claro y es que estoy verdadera, total, loca, estúpida y completamente enamorada de Lalisa Manoban.

Me sequé las lágrimas que me caían y me levanté. La necesito de nuevo. Necesito su olor y su tacto. Me dirigí a la cocina y vi cómo preparaba algo para desayunar, estaba de espaldas a mí por lo que no pude ver que era.

Entrar a la cocina y encontrarse con tal obra de arte, se había hecho una coleta y encima con esa camiseta ancha que caía delicadamente en su trasero y encima saber que no tiene pantalones, cosa que pude comprobar cuando tuve el placer y la suerte de atrapar su culo entre mis manos, encajaba a la perfección. Me mordí el labio al recordarlo. Dios, necesito tocarla. Me acerqué a ella y rodeé su cintura con mis brazos y puse mi cabeza en su espalda y pude finalmente embriagarme de su olor que tanto necesito.

"Nini..." dijo en un susurro y escuché que dejaba los cubiertos que estaba utilizando para hacer el desayuno sobre la encimera.

"Lisa, por favor... te necesito." Le dije poniendo mi barbilla en su hombro y ella giró su cabeza a mi dirección quedando a milímetros de mí. "Está bien..." dije al ver que no se giraba para abrazarme.

Me separé de ella y me senté encima de la isla que estaba detrás, miré hacia el suelo mientras movía mis piernas de un lado a otro porque no llegaban al suelo, pero las detuve cuando vi que su mano se posaba en mi muslo y alcé la mirada.

"Yo también te necesito Jennie. Y no sabes cuánto" dijo con la voz rota. La quería abrazar, por lo que me puse al borde de la isla, alcé mis piernas y rodeé su cintura con ellas para atraerla a mí y ella hizo lo mismo con sus brazos. Metí mi cabeza en su cuello y ella puso la suya en el mío, pude notar su respiración en mi piel y éste hizo lo que me esperaba que hiciese, se erizó.

Ambas respiramos hondo y soltamos todo lo que llevábamos dentro, está más que claro que nos necesitamos la una a la otra.

"Gracias" le susurré.

"¿Por qué?"

"Por dejarme abrazarte, besarte y sentirte cuando sabes que te puedo hacer daño" le dije levantando mi cabeza para mirarla a los ojos.