¿Quién es Cale Henituse?

De Regreso(4)

Hola chic@ s!!! Esta vez veremos las cosas de vista del verdadero Cale tal vez algun@ s ya estén emocionados por como Alberu se entere de que hay dos Cale...

una disculpa por el retraso sin mas preámbulos disfruten la lectura

Cuando mi madre murió, temía llorar por su partida. Mi padre estaba destrozado, y lo único que sentía eran sus brazos rodeándome, intentando darme consuelo. Sentí que él necesitaba más ese consuelo que yo. Quise ser fuerte, sabía que mi padre no podría superar la muerte de mi madre, así que correspondí a su abrazo y le dije:

—Todo estará bien, nos tenemos el uno al otro.

Mi voz en ese momento era muy débil, y recuerdo que cuando pronuncié esas palabras, mis labios temblaban. La voz de un niño temblorosa se escuchaba al decirlas.

Los días pasaron, mi padre se enfocó en su trabajo y lo vi menos seguido. Tenía la esperanza de que en algún momento me visitaría. Siempre esperaba su regreso, sin embargo, en ese tiempo era un niño ingenuo que, por más que lo esperara día y noche, nunca llegaba. Y cuando lo buscaba, él ya no estaba. Poco a poco, me fui rindiendo de poder encontrar a mi padre.

En una salida por el pueblo escuché un rumor sobre el conde, decían que se había vuelto a enamorar; ella era una joven de una familia de artistas de bajos recursos y que se habían conocido por el trabajo, al principio no lo creí, pensé que era gente que le gustaba crear chismes e historias, que la persona de quien hablaba no era aquel al que llamaba padre, que tan equivocado estaba en ese entonces, porque, a los poco días fui presentado ante esa joven artista era una mujer demasiado hermosa y elegante que a pesar de su ropa lucia tan noble, sin embargo yo no quería que ella se quedará. Sentía que mi madre iba ser olvidada si se quedaba con esa mujer, aunque al mismo tiempo sabía que mi padre no podría estar añorando a alguien muerto, admiraba tanto a mi padre que siempre quise que fuera feliz.

Pasó un tiempo y se casaron, vi a mi padre otra vez sonreír, estaba feliz por él. Por otro lado, sentía dentro de mi pecho una presión muy grande, no sabía que era ese sentimiento hasta mucho tiempo después cuando nació mi hermano Basen, mi hermano fue demasiado tierno de bebé, mi padre y su ahora esposa lo cuidaban y protegían.

Me di cuenta que me estaba quedando solo, tenía miedo de que ellos me quitarán a la única persona que todavía quedaba mi lado, estaba asustado ante la posibilidad de sentir el rechazo de mi padre, me carcomían mis pensamientos egoístas al no ser capaz de aceptar a mi nueva familia, durante alrededor de tres años guardé mis palabras, me comporté y pensé que tal vez mi padre se daría cuenta de mi si mostraba mi mejor lado.

Pero él nunca lo hizo, me di cuenta que finalmente me había quedado solo, ¿qué sentido tenía comportarse?, ¿qué sentido sentido tiene dar todo de ti y ser una mejor persona si no hay nadie ahí para verlo? empecé a saltarme las clases y escaparme para vagar todo el día por el pueblo hasta que una vez vino mi padre de visita y lo único que me dijo fue:

—No te saltes las clases, si necesitas dinero aquí tienes, no causes problemas, por favor—después de eso no volvió aparecer, y cuando lo hacía era simplemente para darme dinero y vagamente me daba alguna advertencia.

A los 15 años descubrí mi salvación y mi desgracia, la primera vez que tome alcohol sentí que el mundo me daba vueltas, por alguna razón esa sustancia me hacía feliz; hubo un tiempo en el que estuve tomando al punto de entrar en batallas callejeras, una vez el efecto del alcohol terminaba esa sensación de alegría desaparecía, simplemente fue odioso y la única dicha que tenía ya no me satisfacía, empecé a preguntarme cuál era mi propósito de vivir esta vida, ¿Está bien que viva? Simplemente soy una basura, como lo sabía eso era fácil, los murmullos de la gente eran fácil de escuchar y también sabía que aquellos que vivan bajo el mismo techo que yo me consideraban así, que caso tenía estar aquí....

Después de muchos años una noche cuando tenía 20 años escuché una voz que me decía:

— ¿Quieres regresar? —

Recuerdo que estaba confundido y pregunté:

— ¿Regresar? Exclamé a la nada, a lo que contestó—Regresar a cuando eras feliz, como cuando tú madre vivía, solo pronuncia una palabra con afirmación y te lo concederé—pensé ¿en serio podría volver a mi madre?, ¿Podría ser feliz otra vez? Era un sueño demasiado bueno, ¿o era acaso un engaño? Esas preguntas rondaban por mi mente en ese momento. —Okey ¡acepto! — sabía que ya lo había perdido todo no y había forma de perder más, el añorar siempre ha sido mi salvación

Después de pronunciar solo recuerdo que se me nubló la vista y no sentía nada, no vi nada, no escuché nada y sabía que de alguna manera estaba vivo por la poca conciencia que tenía en ese entonces, hubo momentos en los que escuche conversaciones y voces que decían mi nombre con preocupación, pero sabía que esa preocupación no era para mí... ¿Pues quien se preocuparía por mí?

Hasta que un día abrí los ojos y vi la luz, vi el techo y pensé que este era mi cuarto, que broma es esta, ¿Por qué estaba de regreso? Al final la promesa no se cumplió, pero era mucho mejor estar en la nada que regresar a este mundo, me incorporé en la cama, pero para mí sorpresa unos ojos de un intenso negro me miraba fijamente, solo sé que en ese momento pensé ¡Mierda quién demonios era ese! Mi mente era un caos ¿Quién era esa persona y por qué estaba en mi habitación? Tenía tantas preguntas y pocas respuestas hasta que llegó un fuerte dolor de cabeza, vi muchas imágenes y muchas personas, todo estaba revuelto, de alguna forma sabía que la persona que estaba enfrente ahora era Cale Henituse aquel héroe que todos adoraban y no la basura que yo era, fueron algunos recuerdos largos y algunos a medias, la voz que había escuchado antes me habló:

—Tu verdadera felicidad empezará ahora, los dioses te han bendecido—

¿Qué sera la verdadera felicidad de Cale?¿Qué piensan de la idea de los dioses?

Muchas gracias por leer si es que llegaste hasta aquí, en el siguiente capitulo ya veremos al sol del Reino Roan