WinterBaron

Cautivó III

Bucky camina por los pasillos, una tenue luz iluminando su rostro, los nervios lo están matando pero tiene que ocultarlo.

Ayo camina frente a el con paso firme, la mujer lo mira de reojo de vez en cuando.

—Es aquí.— Le susurra Ayo a James señalando la celda frente a ellos.

Bucky lo ve, Zemo está en el piso con varios libros rodeándolo, tiene cara pensativa y un lápiz en la mano que se mueve con rapidez.

—Zemo.— La voz tenue de Bucky hace que el nombrado levanté la mirada y detenga el movimiento del lápiz.

—James.— Zemo lo mira con sorpresa, sus ojos muy abiertos y las manos temblorosas, se levanta y camina en dirección al cristal que los separa para poner su mano sobre el.— ¿Que haces aquí?

—Vine a verte.— Respondió con obviedad soltando una risita.

Zemo sonríe conmovido.

—Me costó un poco convencer a Ayo.— Menciona mirando a su alrededor y fijando su mirada en Ayo.— Gracias Ayo.

—Gracias Ayo.— Le agradece también Zemo haciendo una seña con la mano.

—No puedo darles mucho tiempo.— Les comenta acercando una pequeña placa a la cerradura.

El cristal deja de ser un impedimento, Bucky se acerca a Zemo para poder abrazarlo después del tiempo que no habían podido estar cerca del otro, el menor recibe el abrazo con gusto y Ayo los mira con ternura una última vez antes de alejarse.

—¿Esta listo?— Pregunta Bucky haciendo que Zemo ponga cara de confusión.

—Esta listo.— Se escucha por el auricular, es Sam.— No hay guardias, tuve que golpearlos, se supone que soy el Capitán América, Buck.

—Lo seguirás siendo, nade tiene que enterarse, ahora cierra la boca.— Reclama en voz baja aún abrazando a Zemo.

—¿James?— Zemo rompe el brazo para mirar mejor al pelinegro.— ¿Que pasa?

—Nos iremos de aquí cariño.— Le responde Bucky con naturalidad, como si no fuera algo realmente peligroso.

—Ah, solo es eso.— Responde con sarcasmo.

—¿Joaquín está listo?— Escucha como Sam suspira del otro lado del auricular.

—Esta listo, espero no lo metas en problemas.— Amenazó Sam.— Si algo le pasa será tu culpa, y si algo le pasa le diré a Ayo que pusiste algo en su café hoy por la mañana para que cayera dormida.

—Sam, solo cállate.— Le pidió Bucky pasándose la mano por el cabello.— Ya vamos con Joaquín, puedes irte.

—El hecho de que pueda irme solo por qué tengo alas no significa que te voy a dejar aquí a tu suerte.— Le asegura Sam haciendo que James sonriera.

—Gracias.

Bucky y Zemo comienzan a caminar por los pasillos, dan vuelta en varias intersecciones y regresan varias veces para ir por otro lado.

Luces rojas y alarmas comienzan a sonar.

—Mierda.— Grita con molestia.— Vamos Zemo, tenemos que correr.

Ambos comienzan a correr tomados de la mano. Los pasos de guardias de seguridad comienzan a escucharse.

—Creí que habías dejado inconscientes a los guardias.— Le reprocha a su amigo.

—Pues lo hice, solo a los de este piso.

Zemo y Bucky encuentran a Joaquín, el chico está temblando sentado en el helicóptero que tiene la palabra "Stark" con letras azules en uno de sus costados.

—¡Joaquín!— Grita Bucky a unos metros de este.— ¡Tenemos que irnos!

—¡No me digas!— Le grita con sarcasmo y un poco de molestia.

Bucky ayuda a Zemo a subir al helicóptero, este se comienza a elevar y la compuerta sobre ellos comienza a abrirse.

.

—Gracias, por ayudarme a sacarlo de ahí.— Les dice Bucky a Sam y Joaquín sentados frente a el.

—Debes estar muy enamorado.— Joaquín lo mira sonriente.— Es increíble si consideramos que activo al soldado del invierno, separó a los Vengadores y mato al rey de Wakanda y luego te inculpo por eso.

Zemo lo miro desde la cocina con una mirada amenazante desde la cocina.

—Solo decía.

—¿A dónde irán?— La voz de Sam llamo la atención de la pareja.

—Quiza Alemania, en realidad aún no tenemos un lugar pensado, lo más probable es que viajemos por todos lados para no arriesgarnos.— Bucky mira a Zemo y le sonríe.— Le escribiré una carta a Ayo disculpándome, posiblemente lo entienda.

—O posiblemente te busque por todos lados, y te encontrará.

—Como sea.

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—¿Estás molesto por qué te saque de La Balsa?— Pregunta a Zemo sentado junto a el que se había mantenido callado todo el viaje.

—Estoy molesto conmigo, te arriesgarse solo para sacarme de ahí.— Bucky sonrió y puso su mano en su pierna pasando su pulgar por arriba de la tela.

—Vale la pena.

Bucky rodea a Zemo con su brazo y este se relaja sobre el pecho del mayor.

Ammm si, un final muy simple, pero la verdad es que ya no tenía ni idea de cómo terminarla 🤧

Soooo, voy a subir otra, un fic escolar pq me encantan xd