Escolta real. [Marco Bodt] (Pausada hasta nuevo aviso)

Cap. 1; Un amor prohibido.

Un romance prohibido, nunca había escuchado de eso, simplemente escuchó "amor".

Alicia Reiss, hija de la que alguna vez reina, Isabel Reiss. Siendo la hija mayor de Rod Reiss, sería ella la reina, a pesar de ser Freya quién heredaría al titán fundador.

Isabel a sus veinte años descubrió de lo que su madre solía hablarle en los cuentos; el amor. Siendo hechizada por unos ojos azules como diamantes, nada más y nada menos que un soldado de la Legión del Reconocimiento, Erwin Smith.

Muchos dirían que fue traición, rompió reglas y demás. Sin duda alguna, Isabel defendería a muerte al hombre que ella amó. Una pareja de jóvenes enamorados, una traición por parte de ambos, nadie perdonaría tal situación.

Rod Reiss, el padre de Isabel, sin más remedio aceptó la relación entre el soldado y su primogénita. La relación floreció por algún tiempo, así quedando embarazada la reina de aquel soldado.

Tras meses de espera y espera, consiguieron el parto seguro de una niña. Erwin era el hombre más feliz junto a su pequeña y su mujer.

La pequeña niña creció con el amor de ambos padres, a sus tres años se podría decir que era la persona más feliz dentro de aquellas murallas. Isabel solía hablarle del amor.

Mientras seguía creciendo, le contaron sobre el titán fundador, quedando absolutamente encantada con aquella historia. Se acercaba el día en el que su tía heredaría al titán, por desgracia, Alicia no podría ir.

–¡Isabel, es hora!– Le llamó el abuelo de la pequeña, Rod.

–Cuida de Alicia, cariño– Isabel dió un beso en la cabeza a su pequeña hija quién contaba con siete años. Le dió un beso con mucho cariño a Erwin y salió acompañada de su padre.

Ese mismo día, Erwin sintió como su vida de desmoronaba en un instante, ver al señor Rod llegando absolutamente solo, sin alguien que lo acompañara.

Alicia vió como su padre hablaba con su abuelo, podía ver lágrimas en los rostros de ambos hombres. La pequeña se acercó y abrazó a su padre, quién lloraba desconsoladamente.

Siendo una copia exacta de Isabel, Erwin juró proteger con su vida a la pequeña niña de cabellos castaños. La pérdida de su amada no haría que bajara la guardia para proteger a su hija, Alicia Reiss.