Por el amor del príncipe (Vegebul) (Trupan)

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💚💕

//Mi suegro y mi esposo se pusieron muy felices con la noticia. El rey mando organizar una fiesta en mi nombre, me dijo que yo le había traído mucha felicidad//

Bulma: ¿Estas feliz?

El príncipe se puso de rodillas y beso el vientre aun pequeño de la chica...

En la fiesta

Rey Vegeta: ¿Qué te dije?

Bardock: Por el futuro abuelo (levantando su copa) (todos en la mesa rieron)

En una mesa cercana

Kakaroto: Felicidades, en hora buena

Milk: Estamos muy felices por el futuro príncipe

Bulma: Muchas gracias... No puedo explicarlo, pero estoy segura que será un varón

Milk: Las mujeres podemos intuir esas cosas

Vegeta: ¿Para cuándo él tuyo Kakaroto?

Milk se sonrojo

Kakaroto: De hecho, ya pedí en matrimonio a Milk y quería pedirte que fueras mi padrino... Nos gustaría que ambos fueran nuestros padrinos de bodas

Bulma sonrió

Bulma: Sera un honor

Vegeta: Cuenta con eso hermano

El príncipe se encargó de que la boda de su mejor amigo sea tan grande como la suya

Kakaroto: Vegeta... te dije que quería algo sencillo

Vegeta: No discutas conmigo, no olvides que soy tu futuro rey

Kakaroto: Como usted diga su majestad (colocando sus manos detrás de su cabeza)

En una de las habitaciones de palacio Gine, Esmeralda y Bulma ayudaban a Milk a prepararse

Esmeralda: Te ves hermosa

Milk: Estoy nerviosa

Bulma: Tranquila todo saldrá bien

Gine: Yo también estaba nerviosa cuando me case con Bardock

Bulma: Bueno yo estuve nerviosa en mi primera noche con Vegeta

Gine: La primera noche da un poco de miedo y es algo doloroso también, pero estoy segura que mi hijo será todo un caballero... Tranquila querida (tocando su mejilla con una sonrisa)

Bulma: ¡Listo! Llego la hora (feliz)

La boda de los muchachos fue tan hermosa como la del príncipe con Bulma. Rey Vegeta quería tanto al hijo de su mejor amigo, que su regalo de bodas fue una hermosa casa no muy lejos de palacio

Milk se cubrió con ropa ligera y esperaba nerviosa que su esposo entrara al cuarto, Kakaroto entro a la habitación, Milk podía sentir que el se estaba quitando la ropa, pero no se atrevió a voltear y mirarlo, con las mejillas sonrojadas podía sentir como el cuerpo le temblaba

Kakaroto: Milk (apoyando su rostro en la cabeza de la chica) ¿Estas nerviosa?

Milk: Un poco (sin dejar de temblar)

Kakaroto: ¿Me amas? (rodeando su cintura con sus brazos)

Milk: Te amo (relajándose un poco)

El muchacho la voltio poco a poco, una vez que sus miradas estuvieron frente a frente, él la beso, Kakaroto dejo caer al piso el pequeño vestido que cubría la desnudes de Milk, se sentó en la cama y atrajo a la muchacha, haciendo que se acomode sobre él

Kakaroto: Cuando estaba lejos en batalla, no hacia otra cosa que pensar en ti y en este momento

Días después ...

Kakaroto: Hace mucho que no salíamos a cabalgar

Vegeta: Ya extrañaba mi caballo

Kakaroto: Bien, que tal si le echamos una carrera

Vegeta: ¿Nunca te cansas de perder?

Kakaroto: Presiento que esta vez ganare

Vegeta: Bien, el primero en a travesar el bosque y llegar a la colina será el ganador

Kakaroto: Perfecto ¿Estas listo?

Vegeta: Cuando quieras

Kakaroto: ¡Ahora!

Los muchachos se adentraron al bosque a toda velocidad, habían recorrido el mismo camino desde que eran niños, iban muy contentos disfrutando la competencia. Hubo un momento en que Kakaroto tomo la delantera, iba a toda prisa dispuesto a ganar cuando hoyo un disparo, automáticamente voltio, le pareció que el mundo comenzó a avanzar en cámara lenta mientras veía al príncipe caer del caballo

Kakaroto: ¡¡¡¡ Vegeta!!!!

Kakaroto dio un giro brusco y bajando a toda prisa del caballo corrió donde su amigo. El príncipe tenía un disparo muy cerca del corazón y estaba totalmente inconsciente

En el palacio

Esmeralda: ¡Mi Hijo! (corriendo a la cama donde se hallaba recostado el príncipe)

Medico: El disparo paso muy cerca del corazón, pero gracias a Dios no toco órganos vitales. Sin embargo, por la velocidad en la que el príncipe iba la caída fue fatal, se rompió un par de costillas y el golpe en la cabeza fue muy fuerte

Esmeralda: Mi hijo (llorando) ¿Quién le hizo esto?

Rey Vegeta enloqueció de furia por su hijo, mando a revisar cada centímetro de aquel bosque hasta encontrar al culpable, pero los soldados no encontraron a nadie... a nadie con excepción de una mujer bañándose en el rio, a los soldados les pareció imposible que ella fuera la responsable

Paragus: ¿Lo mataste?

Potsifel: No lose. Pero si no lo mate a lo mejor queda invalido o algo peor (feliz)

Paragus: Me arriesgue mucho al conseguir esa escopeta para ti. Si el rey se entera nos mandara a cortar la cabeza

Potsifel: No se preocupe mi señor. Nadie sospecharía de una indefensa mujer como yo (con una sonrisa maliciosa)

En el palacio

Bulma: ¿Qué le paso a mi esposo? (entrando al cuarto)

Kakaroto: Bulma por favor tranquilízate, no puedes alterarte en tu estado

Medico: El príncipe recibió un disparo, esta ardiendo en fiebre

Bulma se desmayo al ver a su príncipe en esas condiciones. Kakaroto evito su caída y la levanto en brazos de inmediato

Esmeralda: Hijo por favor llévala al cuarto y recuéstala en la cama. Enseguida mandare a alguien para que la cuide

Los días pasaron, Bulma no se separaba de la cama de su esposo, pasaba día y noche cuidando de él. Esmeralda preparaba todo tipo de remedios, el rey buscaba sin descanso al culpable y el pueblo lloraba y rezaba por su príncipe

Paragus había recibido a Potsifel en su casa y disfrutaba del cuerpo de su amante

Paragus: Ah, ah así ... sigue

Potsifel: (montándolo sin parar de gemir) Mi rey...

Paragus la boto a un lado

Paragus: ¿Qué dijiste? Acaso tu ¿Estas pensando en el rey?

Potsifel: ¿Acaso tu no piensas en Esmeralda mientras me coges?

Paragus: Dijiste que si te ayudaba tendría a Esmeralda, pero ya pasaron días y no veo mi recompensa

Potsifel: Paciencia mi señor, el príncipe esta mal herido, el reino esta debilitado, pronto tendremos lo que deseamos, solo hay que esperar el momento perfecto para atacar... Y bien ¿Quiere seguir? O seguirá reclamando

El hombre volvió a recostarse y la mujer volvió a montarlo