Soy tu Omega...

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Frío, hacia mucho frío, pero eso no importa ahora, su mano acaricia su garganta y sonríe, la marca aún arde, toca la zona que siente irritada y al mismo tiempo se siente agradable, lo consiguió, consiguió ser marcado. No le parece extraño encontrarse sólo en esa gran habitación, después de todo obligó a su alfa a marcarlo, se sentía pleno y satisfecho. Lugo de dar algunas vueltas como loco sobre la cama decide levantarse al fin, las sábanas que lo cubrían caen silenciosas al piso dejando al descubierto su desnudes mirá todas las marcas en su blanca piel, se embriaga con el olor de ambos mezclados en el aire, no lo  puede ocultar está muy feliz.. su estómago ruge de hambre, otra sonrisa se asoma acariciando su vientre plano, quizá ya haya alguien ahí, suelta una risa quizá ya haya un heredero....

       
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Entra despavorido a su casa, esta asustado, está molesto y está  feliz todo al mismo tiempo, no se intriga porque de seguro la pequeña alimaña ya se ha despertado muy orgulloso de su hazaña, ya era medio día y sus padres se encuentran almorzando, pasa rápido delante del comedor y no escucha el llamado de su padre lo único que le interesa es ir a hablar con su hermano, como fue que sucedió, él tenía que estar con alguien de clase alta aunque es un omega de clase alta pero él tenía que estar con otro u otra alfa para mantener la línea sanguínea pura después de todo era su plan de vida.

¡Izuna! ¿Dónde demonios estás?_grita por los pasillos del segundo piso _tengo que contarte algo.

Hasta que apareces Madara_ sale de su habitación con una revista en las manos _estaba a punto de ir a reportar te a la estación de policía... Pero recordé que estás en celo y...

Y ¡Ese es el problema!_ de un empujón se adentra en la habitación de su hermano _¡Maldición! Cometí un grave error.

Jaja no me digas que marcaste a tu omega de turno_ guarda silencio al ve el rostro de Madara con una expresión en blanco _es broma ¿Cierto?

Madara niega con la cabeza aún observando el suelo.

¡Cómo! No Madara, tú el que siempre tiene cuidado_ quiere reír pero sabe que su hermano lo golpearía y la situación no lo amerita _no se suponía que querías emparejar te con otro alfa, alguien digno de tí.

Yo no quería, él me sedujo_ se recarga contra la puerta cerrada y se deja caer al suelo, se quería morir no deseaba esto y menos con aquel omega _se aprovecho de mi celo.

Y crees que alguien te va a creer_ Izuna no podía convencerse de lo dicho por Madara _perdoname pero incluso yo tengo mis dudas, eres un alfa y el es un simple omega tendrás...

Tobirama_ logra pronunciar apenas aquel nombre, no tenía que ser acaso al revés está situación.

No tenía que ser el omega sentirse utilizado y humillado para luego ser consolado por su alfa, no, claro que no están en pleno siglo XXI.

Izuna se queda paralizado ante el nombre, entonces si empezó a preocuparse, ese maldito no era cualquier omega.

Madara que haz hecho_ se acerca a él, se agacha para quedar a la altura de Madara _almenos usaste protección.

La cara de terror del azabache mayor lo dice todo.

¡Estaba en celo Izuna! Por Dios no pensaba con claridad_ su cabello está todo enredado por tanto frotarse las manos en el, solloza _me tiene a su merced..

Todavía no, hermano sólo tienes que romper la unión_ un rayo se esperanza aparece. No le daría el gusto al Senju de estar unidos, para nadie era secreto que Tobirama quiera a Madara como su alfa sólo por diversión y orgullo, sólo para demostrar su superioridad, para sentirse poderoso, no lo perseguía por amor...

MadaTobi Donde viven las historias. Descúbrelo ahora