MadaTobi

Tobirama

En la soledad de su habitación un chico lleva a cabo un ritual tan natural del hombre, un acto que ni él mismo creyó hacer, después de todo jamas sintió la necesidad o el llamado. No iba a negar que en más de una ocasión lo hizo pero era solo por curiosidad o por hacerlo nada más...

Haa~ ha~~ mgh~_ otra vez estaba masturbándose, su mente proyectaba la maravillosa imagen del tipo que conoció hace poco.

Que ¿Era la quinta vez esta semana? No, talvez la séptima, talvez más,  no podía evitarlo. Sentía explotar con solo imaginar al tipo ése. No sé sintió tan necesitado hasta ahora.

Tobirama Senju, es un joven de diecinueve años, vive con sus padres y hermanos: Hashirama, su hermano mayor, Kawarama el que le sigue y su hermanito Itama, el último.

Tobirama está en la universidad estudiando para ser físico y biólogo, como ya se mencionó antes nunca tuvo la necesidad  de satisfacerse, solo cuando se sentía estresado, descubrió que le ayudaba a quitar la tensión que le provocaba estudiar y trabajar al mismo tiempo. No sé equivoquen la familia  Senju es una más de esas familias adineradas, lo que pasa es que Tobirama  quería vivir solo pero su padre le negó la petición a menos que él pudiera pagar una residencia por su cuenta lo dejaría ir, entonces con la determinación heredada de su madre buscó un trabajo de medio tiempo y según sus cálculos no tardaría en conseguir  suficiente dinero para salir de su casa.

Tobirama adoraba a su familia pero no le permitían hacer sus experimentos en la casa, no después del incendio en su habitación hace unos meses; que según el albino fue un error en sus cálculos, por lo mismo su padre no quería que se fuera, solo Dios sabrá que haría estando solo.

Después de sentir el líquido caliente y blanquecino en su mano la razón lo golpea como siempre ¿Acaso esta loco? ¿Porqué lo hizo de nuevo? Quien puede  culpar al pobre albino luego de conocer a tal hombre, uno que en su aura irradia rebeldía, masculinidad... ese rostro, no esos ojos oscuros como una noche sin estrellas, y la mirada letal que lanza con ellos dejaron cautivo a Tobirama, él, ése tipo no es más alto que Tobirama, sin embargo su altura no es impedimento para ser alguien que impone respeto al menos eso sintió el albino y ni hablar de la salvaje y larga cabellera que se carga, el amigo de su hermano, corrección, compañero de estudio de Hashirama; el tipo fue transferido a la universidad  donde estudia Tobirama y Hashirama hace un mes, es todo un hombre según el albino

Aunque conociendo a Hashirama seguramente terminarían siendo amigos. Pobre Tobirama cayó rendido a los pies de Madara Uchiha, hasta el nombre es imponente.

Hace quince días que conoció a Madara y su vida dio un giro de ciento ochenta grados por completo, con decir que ha dejado un proyecto a medias para ayudar a su hemano y "amigo" a estudiar leyes, Hashirama estudia para ser abogado, raro ¿cierto? Pero hablamos de Hashirama todo lo que hace es raro.

Un rato después del arrepentimiento se dirije al baño de su habitación, enciende el grifo de la bañera y toma un baño con agua fría, luego de unos minutos de relajación sale. Toma una de las blancas toallas del estante de metal ubicado a un lado de la bañera y la rodea a su cintura, toma otra y se sacude el cabello con el. Se queda observando su reflejo en el espejo, se desconoce, no es aquel joven racional mas parece un adolescente en descontrol de sus hormonas y hablando de hormonas su cuerpo se calienta nuevamente pues el bulto visible en la toalla lo indica ¡no tiene vergüenza! Madara esta por llegar para estudiar con Hashirama.
A pesar de ya no darles lecciones no se siente seguro de salir de su habitación y su erección es la causa.

Decidido a no salir retoma su olvidado proyecto, total Madara no le presta atención como a sus hermanos pareciera que lo evita, le duele, no piensa negarlo, distraído nuevamente analiza su situación, la conclusión es simple y no necesita mucha investigación, Madara Uchiha se convirtió en su primer amor, desde luego quiere que lo abrace, que lo consienta, que le hable bonito, que lo bese, que lo tome...