Bebé Shiota

Capítulo 15:

(Narrador)

Los alumnos de la clase E tienen un plan.

Cuando el pequeño peli-celeste llegó a su salón, fue recibido por Karasuma al igual que siempre.

Conforme los alumnos fueron llegando se miraban y asentían con la cabeza.

Eran movimientos muy sutiles, pero no para el oji-zarco; este sentía la tensión en el ambiente.

Ahí, sentado tranquilamente en su carpeta, se estaba irritando, sus sempais eran buenos para actuar y fingir tranquilidad, pero Nagisa es como un detector de mentiras, ni una frecuencia se le escapaba.

Tuvieron sus clases como de costumbre; no faltaron los intentos de asesinato, aunque ya habían acordado salvarlo, y ya tenían los materiales para la cura, igual siguieron intentando darle, solo por diversión.

Tan pronto como sonó la campana de la salida, Nagisa guardó sus cosas y salió del salón tan rápido como sus pequeñas piernas se lo permitieron; claro está, que esto sorprendió a todos, por lo que miraron por la ventana, solo para encontrarse con la vista de un sonriente peli-celeste y un serio peli-naranja.

El adolescente tomó la mano del infante y caminó hacia la puerta, en donde lo esperaba el pulpo.

-. Nagisa-kun se portó muy bien el día de hoy, aunque la multiplicación se le está complicando; le dejé una tareita para que practique._ Explicó el ser amarillo antes de que el Asano mayor pudiera preguntar.

-. Bien, me aseguraré de que la termine; ¿cómo le va en inglés?._ El oji-lila había notado que el menor tuvo problemas resolviendo la ficha del día anterior.

-. Su tarea de ayer tuvo uno o dos errores, pero fuera de eso, ha mejorado bastante en poco menos de un mes._ Respondió el pulpo con su típica sonrisa.

-. ¿Tiene alguna otra tarea a parte de matemáticas?_ preguntó el adolescente.

-. Sí, pero necesita ayuda de un mayor._ dijo._ Es un dictado, para que practique kanji; podrías decirle a tus padres que se lo tomen.

-. No habrá necesidad._ soltó mientras fruncía un poco el ceño._ Bien, si eso es todo entonces nos retiramos; vamos a casa Nagisa._ habló mientras acercaba su mano al menor, este, estiró su pequeña manito y tomó la de su hermano otra vez.

Ambos se dieron la vuelta y empezaron a bajar juntos la montaña.

-. ¿Puedo preguntar qué están planeando?_ interrogó el peculiar profesor cuando los hermanos ya no estaban a la vista.

-. ¿CÓMO SUPO--?_ la clase E gritó al mismo tiempo mientras salían de su escondite.

-. Oh porfavor, intentar engañar a un niño de 5 años es una cosa, yo soy un adulto, noté que tramaban algo desde que entraron al salón por la mañana._ sus estudiantes bajaron la cabeza._ Ahora, cuenten.

La clase E intercambió miradas, y luego de unos segundos, le contaron todo al pulpo.

Su plan no era muy complicado, simplemente querían seguir al oji-zarco  hasta la casa Asano para asegurarse deque estos trataran bien al pequeño.

Nuestro querido pulpo no estaba muy seguro del plan, pero sabía que el director estaba casado, y le daba curiosidad saber quién se casaría con él, así que aceptó, con la condición de que ellos no irían solos.