PRÓLOGO

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Quebec, Canadá.

2012.

« Alvaid »

Estaba sentada contra la pared del pequeño baño, Tenía un atraso de 2 semanas. Y solo había estado con un chico en especial, el amor de su vida. Miraba el test de embarazo con miedo, recelo y toda las emociones que podía pasar en ese momento. Solo tenía 17 años. ¿Que haría si estaba embarazada? ¿Como lo enfrentaría su madre?

Luego de unos minutos, tuvo el valor de agarrarlo y levantarlo de la tapa del inodoro.

Rezo e imploró.

Soltó un suspiro cuando vio el resultado:

Positivo.

Estaba embarazada.

Sus lágrimas no tardaron en caer. Había arruinado todo lo que tanto le había costado formar a su madre. No tenía un padre porque el hijo de puta había engañado a su querida mamá y se habían separado, mientras él vivía en un palacio ellas vivían en una deplorable casa.

Ahora tocaba lo más difícil del mundo: decirle a su madre.

Salió lentamente del baño con el Evatest en la mano y se plantó atrás de la señora mientras ella cocinaba.

- Hola querida ¡Hoy cocine pasta! .- Dijo a penas dándole una mirada.

Sentía que iba a romper esa emoción que tenía pero tuvo que hablar .- Mamá... Tengo que hablar contigo...

Comenzó a temblar y sintió un nudo en la garganta

- Claro .- Se secó las manos con el delantal y le prestó atención .- Dime Alva ¿Que sucede? .- Su madre vio el pequeño aparatito en su mano derecha y luego buscó su mirada .- ¿Alvaid que sucede?

Esta vez su voz su volvió más dura.

- Est... Estoy .... - Suspiró frustrada.

- ¿¡Estás qué?!

- Estoy embarazada....

Tal vez en ese momento necesitaba contención, un abrazo al menos ... Pero solo recibió una fuerte cachetada. Su mejilla ardía y las lágrimas se habían soltado.

- ¡Eres una estúpida! ¿¡Como se te ocurre acostarte con alguien a esta edad?! ¿¡Como no se te ocurre al menos cuidarte?!

- Lo siento... Yo...

- ¿¡Que sientes?! ¿¡Arruinarte la vida?! ¡Vas a traer un ser a este mundo! ¡No sabes ni siquiera peinarte pero para acostarte con alguien sí!

- ¡Estamos enamorados, mamá!

- ¡Ve y dile que estás embarazada y sabrás si realmente te ama! ¡Ve! ¡Pero si el no piensa ayudarte con esto, no regreses a casa!

Y así es como comienza la historia de Alvaid, la niña que con solo 17 años estaba embarazada, lo más complicado era la edad de su novio, 27 años.

Ella buscó a su chico ojos azules de 27 años pero nunca se hizo presente, según su madre, Evelyn, él estaba estudiando en Toronto. Se había ido, y nunca le había dicho nada.

Alvaid creció y creció su panza también, quedó fuera de su hogar pero eso no fue impedimento para que con 17 años trabajara y estudiara a distancia. Pudo sola como una guerrera y fue mamá de un hermoso niño.

10 años después

Nunca se podría imaginar que 10 años después, a sus 27, ocurriría algo que cambiaría sus vidas. Su padre Leonel Sionis, había muerto y toda su herencia había quedado a sus herederos.
Habían casas, terrenos, dinero y mucha fortuna en juego.

Sintió que la vida le sonreía de nuevo, porque al tener esa fortuna, debería volver a Quebec y se vengaria por todas las veces que las personas se burlaron en su cara.

Ya no era solo Alvaid, ahora era Alvaid Sionis. Una de las mujeres más poderosas del mundo. Bastaba con un chasquido de dedos para que el planeta se incendiaria.

Y no temia usar su poder.

Porque si algo había aprendido era: "Ten la apariencia de una flor inocente, pero se la serpiente que acecha debajo"

SIONIS ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora