🍪Capítulo 6🍪

27K 1.4K 65
                                    

MULTIMEDIA|| OFICINA DE GRAYSON

Allí se posó frente a Grayson quien estaba frente a mí escribiendo en su computadora portátil. Me miró con un ceño fruncido. Grayson miró a mi atuendo y volvió a mi cara cuando su ceño fruncido se profundizó haciéndome consciente de lo que llevo puesto. Morzé en mi labio inferior mientras miraba hacia el suelo, esperando que él dijera algo—. Sientate—. Dijo.

Su demandante tono me hizo temblar a la ligera mientras me movía hasta el asiento frente a él, mientras que sus ojos se pusieron en mi alma. Una vez me senté, me di un reino a través de la mesa mientras observaba todos mis movimientos. Agarró el papel y lo rodeó antes de ponerlo hacia un lado—. ¿ te gustaría ser mi secretaria privada? —Grayson preguntó. Mis ojos se ensancharon cuando lo miré fijamente antes de que me volviera a mirar rápidamente.

—Yo ... me gustaría mucho señor—. Respondí de vuelta. Si no fuera por él, mirando a cada vez que me mudaba, me bofetara para tartamudear frente al jefe.

Lo vi asentir antes de escribir algunas cosas en su computadora portátil. Me hizo otras preguntas como cuánto tiempo me gustaría trabajar y me explicaron algunas reglas y los tiempos de trabajo—. ¿Puedes empezar a trabajar desde hoy? —Grayson preguntó y asentí connsiosamente—. Buena chica, estoy a punto de ir almorzar, ¿Te importa unirte? —Se ofreció y a lo que asentí de nuevo. Caminando delante de él estaba cerca de la puerta cuando lo sentí justo detrás de mí. Puedo sentir su aliento cosquilleando mi cuello, lo que me hizo detenerme en mis pistas.

—Oh y una cosa más, quédate a mi lado. No querría que nadie mirara a ese culo fino de la tuya Babydoll—. Susurró bruscamente en mi oído. Mi cara se convirtió en tonos de confucion, aún, no podía cubrir. Nerviosa abrí la puerta prácticamente corriendo fuera de la habitación y ví MS Morgan.

La abrazé y la agradezco por traerme aquí, también le expliqué que obtuve el trabajo temporal. Una vez que terminé de hablar, me volví a Grayson y caminé hasta donde estaba—. Hay un café a través del edificio, así que vamos a comer allí—. Explicó mientras trataba de alcanzarlo. Una vez que estuvimos fuera del edificio, me di cuenta de que había una calle entre el edificio y la cafetería de la que estaba hablando.

—Las niñas pequeñas siempre tienen una mano de adultos mientras cruzan la calle—. Me miró con una sonrisa en su rostro. De hecho, puse mi pequeña mano en sus mucho más grandes antes de cruzaramos la calle. Una vez que llegamos a la cafetería, una gran sonrisa se arrastró en mi cara mientras recordaba que este era el mismo café que conocí a Grayson.

—Café negro y una galleta de chispas de chocolate—. Grayson dijo, preguntándome en silencio lo que quiero antes de repetirlo al cajero.

—Por favor! —Agregué que Grawson se rió entre dientes junto con el cajero. —Necesitas recordar tus palabras mágicas—. Me regañé mientras Grayson sonrió con la cabeza. Como estaba tratando de pagar por mi pedido, Grayson, fue rápido para entregar su tarjeta de crédito, lo que me hizo fruncir el ceño. —Pero, pero necesito pagar por la mía—. Me quejé, mientras trataba de darle al cajero el dinero en el que se declinó Grayson.

—Deja esto a La muñeca de adultos—. Grayson dijo mientras me devolvía mi dinero.

Caminamos a un asiento y nos sentamos en él mientras seguía sonriendo durante el día que conocí a Grayson aquí. —¿Porque estás sonriendo, princesa? —Preguntó.

—¡Este es el mismo café que te conocí! Y y estabas detrás de mí y me quedé torpe y terminé conociéndote—. Dejé por fuera todas las palabras dentro de mí mientras me desvié y en ese día.

—Y tu pequeña Missy estaba saltando—. Grayson terminó con la sonrisa mientras se recostó en su silla.

—¡Nu-uh no lo estaba! ¡Fui arrastrado contra mi voluntad para venir aquí—. Puché cuando un ceño fruncido vino a mi cara.

—Claro —. Grayson dijo burlonamente.

—¡Yo estaba! —Me quejé golpeando mi mano tan fuerte como puedo sobre la mesa para hacer un punto. Me estaba frustrando tan frustrado que él no me creería.

—Ahora, no hay necesidad de lanzar una rabieta, solo estaba jugando contigo—. Grayson se rió mientras tomaba un sorbo de su café negro. Modificando en mi galleta de chispas de chocolate, miré la mesa avergonzada de casi lanzar una rabieta. De repente sentí el pulgar de Grayson mientras quitaba el chocolate derretido que estaba en la esquina de mis labios.

Colocó su pulgar frente a mis labios con el chocolate todavía en él. —Chupalo. —Exigió. Defesantemente obedecí, tomando su pulgar en mi boca y girándome la lengua alrededor de ella. Podía degustar el dulce chocolate en su pulgar cuando lo chupé. Tanto Grayson como yo no rompí nuestra mirada hasta que me alejé, todo mi cuerpo se calienta en segundos. El resto del almuerzo se gastó conmigo mordisco en mi galleta, mientras que los ojos de Grayson observaban a todos cada movimiento atentamente.

𝐃𝐚𝐝𝐝𝐲|✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora