Los hermanos Park amaban mucho a su papi Chanyeol, ellos sabían que eran la única luz de sus ojos y los únicos amores de su vida, o por lo menos eso pensaban hasta que apareció Byun Baekhyun alias: el intruso roba papis.
Ahora resulta que iban a ten...
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Chanyeol miraba nervioso la prueba de embarazo positiva que estaba en sus manos, su novio estaba sentado junto a él mientras esperaba alguna respuesta por parte de su pareja.
—Chanyeol...¿Qué vamos a hacer?—preguntó con la voz rota.
El alto suspiró y acunó al chico pelinegro en sus brazos, repartiendo caricias en su rostro para poder calmarlo.
—Tranquilo ¿Sí?—trató de calmarlo acariciando su cuero cabelludo. —¿Qué quieres hacer tú?
—¿Q-Qué?—preguntó en lágrimas.
—Mi amor, sabes que el dinero no es problema, mis padres pueden ayudarnos y yo...puedo conseguir un empleo de medio tiempo. ¿Quieres tenerlo?—le preguntó mirándolo a los ojos. —Me haré responsable en cualquier ámbito que decidas, no voy a dejarte solo, si deseas abortarlo voy a acompañarte también.
El menor lo miró horrorizado por aquella palabra, el venía de una familia sumamente religiosa y no necesariamente de la misma clase social del alto, aunque eso poco les importó al momento de enamorarse.
—Mis padres nunca me perdonarían si llegara a matar a un bebé. —Acarició su vientre aún plano y soltó un suspiro para poder calmarse. —Quiero tenerlo, quiero formar una familia contigo, Yeol. —sonrió.
Chanyeol decidió ahorrarse la explicación y abrazó a su novio mientras ambos lloraban en los hombros ajenos de cada uno.
No importaba la situación en la que se encontraran, siempre iban a apoyarse y a quererse porque eso era lo que hacían las parejas y al momento en el que su lindo Hyunsuk nació, todo su mundo se volvió perfecto, o por lo menos eso fue para Chanyeol. Los años pasaron y dos nuevos amores llegaron a la vida de Yeol, Seungchan y Jun. Hyunsuk se emocionó al enterarse que iba a ser hermano mayor, así que no fue ningún inconveniente, los tres se llevaban de maravilla. Amaba ver cómo los hermanos mayores jugaban con su hermanito bebé desde a fuera de la cuna.
Eran cerca de las cuatro de la mañana y Chanyeol seguía esperando a su pareja, en éstos últimos meses estuvo saliendo demasiado, más de lo usual; el alto no estaba en contra de que saliera a divertirse junto a sus amigos, a lo contrario le gustaba que se despeje un poco de él y de los niños pero ya lo estaba haciendo tan seguido que ni siquiera veía a sus hijos, le dejaba todo encargado a Yeol y eso lo estresaba demasiado. Se estaba ocupando de su trabajo, apenas era novato y tenía dificultades y por eso se la pasaba pidiéndole consejos a su madre, también se encargaba de sus hijos y aunque él se planteara que era su obligación, se cansaba mucho al tener que lidiar con un niño de tres y otro de cinco junto a un bebé de un año y de vez en cuando no le vendría mal un poco de ayuda.
Jisoo se había vuelto demasiado distante con él y con sus hijos, cuando nació Jun, el menor no quería ni verlo, no soportaba tenerlo cerca, el bebé moría de hambre porque su esposo no quería amamantarlo, entonces a Chanyeol no le quedó de otra que ir a un banco de leche para que su bebé pueda alimentarse. Era muy indiferente con sus otros niños, cuando los buscaban para jugar era Chanyeol quién siempre iba con ellos mientras que Jisoo estaba pegado a su celular.
