Capítulo 3

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Era una chica, como de mi tamaño, con el cabello castaño y ojos marrones muy bonitos, esta tenía mi café en su camiseta.

-¡Por La Puta!- Gritó, todos en el centro comercial voltearon a ver y una viejita que pasaba dijo "Adolescentes"

-¡Ups! Hay, Perdón, te pagaré la blusa- Me disculpé como nunca en mi vida lo había hecho...Londres te Cambia...

-No te preocupes, fue un accidente, no veía por donde caminaba- Esta chica me cae bien- Soy Laura, por cierto- Me tendió la mano en forma de saludo, la cual correspondí.

-Soy Alexandra, pero dime Alex. Oye, si te pagaré la blusa- Dije al ver su blusa completamente mancha de de mi café a medio acabar.

-Ok, y yo te pagaré el café-Nos dirijimos a la tienda de ropa más cercana y eligió una muy parecida a la camisa que tenía mi café.

Nos dirigimos hacia el Star Bucks.

- Oye, y de donde eres ?- Me preguntó ella, la verdad es que es una chica muy simpática y divertida, me cae muy bien.

- Soy de New York, me mudé ayer. Y tu ?

- Soy de aquí, he hido un par de veces a New York. Vas a estudiar aquí ?

- Si, voy a comenzar el último en el Instituido Race High School, sabes algo de el ?

- ¡Si! Yo estudio allí, Cuantos años tienes ? Para ver si nos tocará juntas.- Me dijo emocionada, la verdad yo también me alegré, al menos no voy a estar tan sola.

- Tengo 17.

- Si, lo más probable es que nos tocará juntas.

- Hey, Que bien- Llegamos al Star Bucks y ella me compró mi café.

Le pregunté si me quería acompañar a comprar lo que yo necesitaba y me dijo que si.

Al terminar.

-Hey muchas gracias, supongo que nos vemos mañana, si quieres nos reunimos para irnos juntas.- Laura y yo nos habíamos hecho a amigas, pasamos todo el día en el centro comercial y ahora eran las 7:30 pm.

- Claro, que tal en el parque que queda cerca de acá, la verdad mi casa no queda muy lejos.

- Perfecto, A las 8:00 am. Nos vemos.

- Adiós.

Le mandé un texto al idiota y me dijo que se tardaría un poco.Imbécil.

Decidí dar vueltas por el centro comercial, entré a una tienda de pasteles, a una de ropa, zapatos y ahora estoy en una de gorras planas, mis favoritas.

Entré y estube a punto de llorar por tanta hermosura en una tienta.

Recorrí los estantes y una gorra se iluminó con un coro de ángeles...Okno...

Era una OBEY original último modelo en blanco y negro...Y entonces...Me enamoré...

Fui directo hacia ella y justo cuando la hiba a tomar, otra mano se interpuso y tomó la gorra por el otro lado. Observé la mano, era de hombre, La puta mano...

Seguí el rastro de esa mano y me llevó hacia un musculoso brazo, para luego dar con una hermosa cara.

Era un chico como de mi edad, tal vez mayor. Con la tez blanca, ojos azules, pelo castaño, pómulos bonitos y labios perfectos.

- Si me permites, es mía, la voy a comprar - Dije entre dientes con una sonrisa más falsa que las boobies de un gay.

El chico me miró con una mirada desafiante.

- Yo la vio primero, así que la puedes ir soltando- Dijo, igual que yo.

- Que mierda te hace pensar que la voy a soltar ?- Dije ya harta. Me llevaré esa gorra, sea como sea.

- Vas a caer en mis encantos y vas a ceder a darme la gorra.- Dijo con una sonrisa orgullosa.

- Jaja- Me reí en su cara- Pobre Chico, no te engañes tan feo a ti mismo. Hagamos una cosa, los dos compraremos una gorra, no creo que no haya más de estas.

- Preguntemos- En el momento en el que en soltó la gorra para llamar a un empleado salí corriendo con la gorra, le grité a la chica de la caja que la pagaría y corrí fuera de la tienda.

El cavernícola bruto venía detraz mío, el es rápido, pero yo soy inteligente y ágil.

Salté sobre unos bancos y mesas, el se cayó, pero se levantó rápido y me siguió, tomé algunas bolas de chicle de un máquina y las arrojé al suelo, haciendo que en esquivara algunas pero tropezara con otras, lo que me dio ventaja. Me paré en seco y esperé a que el me alcanzara lo suficiente como para volver a correr devuelta a pagar la gorra.

Corrí lo más rápido que pude hasta la tiene da con el imbécil pisándome los talones, le tiré el dinero a la mujer de la caja, la cual veía la escena divertida e hise un extraño baile con los brazos alzados y meneando la cadera.

-¡SI BITCHES! MAMÁ COMPRÓ LA GO...- Me interrumpió mi fuerte impacto contra el suelo.

El imbécil sin vida en el cerebro, estaba encima mío, Muy, ¡MUY! cerca, su cara de mi cara.

- Y ahora que me dices ?- Dijo encima de mis labios- Te rindes ?

- Nunca.- Le di un cabezo, por lo que se bajó de mi y empezó a quejarse en el piso. - Creo que gané.

Me puse la gorra triunfalmente y salí de la tienda. Nicolas me envió un texto diciendome que estaba en la entrada.

Me dirigí hacia allí y me encontré con el. Dejé mis cosas en la parte de atrás del auto y me metí de copiloto.

- Linda Gorra- Dijo mirando la prenda.

- Lo sé, no te imaginas lo que corrí por ella.

Mi hermano abrió la boca, recapacitó y la volvió a cerrar.

- Ni me quiero imaginar.

Llegamos a casa exhaustos, entré a mi cuarto y arreglé lo que mañana llevaría al Instituto. Al terminar caí rendida en mi cama, pronto, caí en brazos del Morfeo.

Cap. Largo ¡¡ Comenten y voten ¡¡

E. Suniaga :*

Señorita SarcasmoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora