¿La vida tiene colores? ¿Algo puede asegurarte eso?, muchos dicen ver los colores, pero, ¿Los han sentido alguna vez? Eso es lo que quiere descubrir el pequeño Félix.
La vida ha jugado con sus emociones llevándolo a creer que la vida era de dos colo...
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«Hola Hyunjin,
Supongo que para este momento ya sabes lo que pasó, ¡pero no quiero que te culpes! Si yo tomé esta decisión fue luego de pensarlo demasiado, porque mis malos recuerdos ganaron y mi mente acabó por quebrarse, el mundo me superó en pocas palabras.
Me gustaría empezar por lo que vivimos, el ser engañado se sintió tan, tan mal, creía que no fui suficiente, que debí darte más de lo que te di, algo había hecho mal y esta era tu forma de decírmelo. Y para que mentirte, si me sentí insuficiente y culpable, pero Chan me contó de tu historial, ¿por qué usaste a esas personas de la misma forma que a mí? Lo que haces está mal Hyunjin, que te confundas, no te da razones para utilizar de esa forma a las personas, pero quien soy yo para reprenderte, soy solo otro nombre para tu lista.
Y bueno, quería agradecerte por todo lo que hiciste por mí, aunque para ti fuera poco, cuando reías ahuyentabas a todas esas sombras de mi pasado que me susurraban cada cosa que había vivido, cuando me presentabas una experiencia nueva, yo solo podía pensar en el momento en que te dieras cuenta de lo que era realmente.
Quería contarte todo, ¡maldita sea! Tenía tantas ganas de vivir una vida normal, que me ayudaras a salir de aquí y sé que era muy soñador meterte en la misma bolsa y creer que tendríamos una relación eterna, pero luego tú solo me engañaste. Cuando empezaste a distanciarte, de forma ilusa imaginaba que necesitabas aire, que la miel de los primeros días se disipaba para dar paso a la madurez de una relación. Pero no, tú jamás viste la miel.
Cuando empezamos a salir, me sentía tan mal, tan culpable, yo a pesar de estar tan sucio te prometía fidelidad, ¿cómo demonios planeaba hacer eso, si en mi cama se colaban diez hombres sin rostro ni nombre por la noche? Pero seguía intentando, creyendo que al enterarte no te alejarías, pero mira como acabó todo.
Cuando te vi en el parque, me sentí como cuando mi madre se fue aquella tarde, me sentí vacío, roto, me sentí abandonado. Me pateaste de vuelta a mi realidad podrida en el instante en que vi como lo tomabas por la cintura con la misma devoción que alguna vez tuviste conmigo; y las voces volvieron, los recuerdos, todo volvió a palpitar y sucumbí, sabía que no debía entregarme, pero lo que tú me ofrecías, era tan tentador porque no lo conocía. Al final, tal como decían mis suposiciones, te fuiste. Volví a sentirme sucio y luego estaban esos tipos del callejón.
¿Sabías que luego de lo Yang contó (que mentira no es) y yo escapara como cobarde, unos tipos me abordaron en un callejón y me tomaron en un basurero? Pero aun así mi mente solo podía pensar en ti, en que te fuiste y me culpe por eso.
Cuando llegué aquí mi padre me vendió como siempre y me di cuenta de que ni siquiera mi cuerpo me pertenecía, ¿por qué siquiera sigo viviendo?
Yo ya no puedo Hyunjin, ya no quiero, es demasiado para mí, estoy cansado, mi cuerpo arde, mi todo duele y mi corazón llora. Mis heridas no se pueden curar, porque cada vez había heridas nuevas y me tocaba cubrirlas con maquillaje a pesar de estar frescas, ya no lo soporto Hyunjin, de verdad discúlpame por esto, sé que seguirás adelante, eres fuerte, yo sé eso, así como sé que no te dejarás derribar como yo lo hice.
