-¿Tú estás bromeando, verdad?-inquiero ofendido.
-No. Y no me lo puedes negar, Hongjoong. No es normal que lo odies, que odies a cada uno de ellos...en realidad creo que dices que lo haces porque no eres capaz de aceptar que te gustan....-niego.
-¡Seonghwa! ¿Por qué actúas como sí no me conocieses?-me indigno.
-Escucha, cualquier otro chico o chica que le hubiese tocado trabajar con él todavía estaría brincando de la felicidad sin podérselo creer...o probablemente en este momento estarían siendo sacados por un par de paramédicos buenísimos totalmente desmayados por la emoción que experimentó al saber que sería su pareja, pero te tocó a ti y todo lo que hiciste fue hacer el ridículo en el salón frente a la señora Bae y todos nuestros compañeros....-explica el chico.
-¡Eres el mejor amigo que cualquier chico quisiera tener, en serio!-repongo poniendo mis ojos en blanco-¡No soy como el resto de la gente! No sé si lo olvidaste o sólo te empeñas en decirlo para molestarme-me quejo de nuevo.
-¿Por qué no aceptas de una buena vez que te gusta? ¡Míralo bien! Ojos hermosos, cabello de envidia, altura de infarto...bueno, aunque tu altura me gusta más-me rio-...su rostro parece el de un verdadero ángel con esa sonrisa preciosa que haría derretir todos y cada uno de los benditos icebergs en la Antártida... Encima tiene un cuerpo escultural que parece tallado por los mismísimos dioses griegos-suelto una carcajada.
-¡Pareces un psicópata!-me burlo con diversión.
-Vamos, Hongjoong. ¿No te gusta ni tantito?-inquiere observándome detenidamente.
-No, Seonghwa...no me gusta. ¿Cómo puedes gustarte alguien que ni siquiera te voltea a ver cuándo va caminando por los pasillos de la universidad? ¿En serio?-farfullo mirándole también.
-De acuerdo, entendí tu punto.-hace una pausa-Y puedes decirme todo lo que quieras pero nada me quita de la cabeza que te encanta Mingi, aún aunque te empeñes en negarlo, te conozco como la palma de mi mano y esa cara de idiota que tenías hace un rato definitivamente no es la que pones cuando piensas en esos cantantes americanos que sueles escuchar-me rio de nueva cuenta.
-Oh, cállate idiota...
Para cuando vuelvo a casa todo lo que quiero es dormir y despertar hasta el siguiente siglo. Mi cabeza está a punto de explotar de dolor y estoy tan cansado como sí hubiese participado en una caminata olímpica. Joon no está afortunadamente y mis padres trabajan todo el bendito día, por lo cual la casa está en un sepulcral silencio que disfruto y agradezco.
En calcetines y con un tazón de cereal de chocolate con leche en la mano me dejo caer en el sofá y enciendo la televisión de la sala donde de inmediato un partido de fútbol comienza a reproducirse, lo reconozco como uno de los partidos grabados que mi padre y Joon suelen ver los sábados por la tarde cuando no tiene nada mejor que hacer.
Cambio de canal con el control remoto y doy un respingo haciendo que la leche del cereal se derrame sobre mí cuando una serie de golpes desesperados amenazan con tirar la puerta de mi casa.Suelto una mala palabra digna de una lavada de boca con petróleo y me dirijo a la puerta sin dejar de refunfuñar por el incidente. Abro sin percatarme y cuando los ojos de Seonghwa se posan en mí y la mancha de leche con chocolate del cereal en mi camiseta blanca suelta una risita divertida.
-¿Qué te ha pasado?-pregunta totalmente divertido.
-¿Qué haces aquí?-inquiero ignorando su pregunta.
-¡Tarde de investigación con Yeosang!-exclama emocionado.
-Vaya, que suerte la tuya-me burlo pero él está tan emocionado que no se percata de la ironía que hay en mi voz.-Espera un segundo... ¿viniste solamente para decirme esto?-pregunto en voz baja.
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DIEZ RAZONES PARA NO AMARTE | MINJOONG
Novela JuvenilUna vida normal, para un chico normal. O casi normal, porque si hay algo en lo que sí se parece a uno de los libros ñoños de mi mejor amigo; es el estereotipo de hombre idiota que suele arrancar suspiros por donde pasa. Su nombre: Song Mingi #2 Minj...