CAPITULO 1: ¿QUIÉN ERES TÚ?

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Era un día miércoles a mí me tocaba estar en el turno de la tarde en aquel negocio, sinceramente no había nada de gente era mitad de semana y las personas no iban a divertirse dentro del lugar, aunque era uno de los más populares de la región, hoy me tocaba estar a cargo iba a dirigir el lugar siempre y cuando entregara a Fai Fai el lugar tal y como lo dejo.

-Si tan solo hubiera gente no habría problema.- solté las palabras al viento.

-¿Y nosotros qué somos?- pregunto Deshi.

-Lo siento chicos.-

-¿Estas aburrido?-

-¡Sí! Pensé que habría más gente de lo que hay.-

-Bueno, pudo haber sido peor, al menos la venta del día de hoy superan la del mes pasado.-

-Fai Fai va a estar orgulloso de ti Yibo ¡Alégrate!- ánimo Tai un chico castaño.

-Sí, qué buen ánimo.-

-¡Hoy alguien no amaneció de buen humor!- Min comenzó a burlarse.

-Lo siento.-

-No hay problema.-

Observé a los clientes pasearse en la tienda era un lugar algo extraño pero que se adaptó a los nuevos tiempos, rentaban lugares y espacios para que los jóvenes y no tan jóvenes pudieran grabar videos, podcast o hacer transmisiones para sus seguidores.

-Iré a la caja a checar las cámaras.-

-Adelante jefe Yibo.- y fui a vigilar las cámaras, ya saben nunca falta el chistoso que quiere hacer cosas que el reglamento del lugar y el contrato no permiten, no había nada y todos seguían en sus asuntos, yo me fui a sentar en uno de los sillones que teníamos en recepción, tome mi celular y comencé a navegar en internet, eran las 5:20 pm y eso me hace pensar "si tan solo yo no hubiera estado ahí".

La puerta se abrió y solo pude alcanzar a escuchar a Tai dar la bienvenida a una persona, medio alce la vista y vi los zapatos de aquella persona y no le quise prestar atención, no lo debí haber hecho pero él devolvió el saludo y toda esta historia empezó.

-Buena tarde.- la voz de esa persona resonó en la vacía recepción o al menos así lo sentí yo, alce la mirada para encontrarme con el chico de grandes ojos y amplia sonrisa con un lunar debajo de ella, lo observe por unos segundos y volví a mis asuntos.

-¡Que tenga buen día!- Tai dijo amablemente.

-¡Wow! ¿Vieron al chico que acaba de entrar?-

-Es lindo.- hablo Deshi, y no volvimos a tocar el tema en el resto del turno o al menos no yo porque cuando esa persona se retiró cerca de las nueve mis compañeros comenzaron a hablar de él como si no hubiera otra persona.

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Era un jueves lo recuerdo bien, era un jueves 11 de marzo, estaba caminando por la facultad yo estudiaba danza pero también amaba la música y desde los once años componía música y desde los 15 producía mi música, mis padres siempre me ayudaban a cumplir mis sueños y siempre viviré agradecido, volviendo a mi historia caminaba rumbo al estudio de teatro al pasar por uno de los salones donde había clase volví a escuchar esa voz.

-¡Oh dios! ¿Es el chico de la otra vez? Da igual.-

Caminé rumbo a mi clase pero recordé la voz de la persona.

-¡Buena tarde!- y la escuche de nuevo, voltee y observe cómo saludaba a otro chico.

-¿Qué estás pensando Yibo?- negué con la cabeza y seguí caminando, al llegar al salón donde mi clase tendría lugar, me instale saque mi celular y comencé a revisar mis notificaciones espere al profesor pero.....

-¡Buena tarde!- esa voz, alce la mirada y lo vi entrar se sentó en la segunda fila, yo estaba en la séptima fila casi arriba junto a la puerta.

-¿Qué está pasando hoy?- volví a mis asuntos.

La clase pasó sin ninguna impertinencia pero de vez en cuando escuchaba la voz de ese chico y no sé por qué era la única que yo escuchaba solamente a él ¿Por qué? La cabeza me empezó a doler ese día, había pensado mucho.

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Las semanas siguientes había estado tan ocupado y de lo que menos me acordaba era de esa voz, tenía exámenes y muchos clientes por atender como para estar pensando en esa voz, todo iba normal todo estaba bien, si tan solo ese miércoles 14 de abril tú no hubieras llegado a perturbar mi tan amada tranquilidad.

-Buena tarde.- otra vez la misma frase, alce mi mirada y ahí estabas te observe de lejos, te vi de lejos por unos segundos negué de nuevo con mi cabeza y esa canción comenzó a sonar, la melodía de la canción era tan calmada pero a la vez triste que mi corazón se agito no quise hacer caso a los sentimientos que esa canción me causaba, no quise darme cuenta de esa primer llamada.

-¿Estas un poco distraído no Yibo?- Fai Fai hablo y yo lo vi a los ojos.

-Estoy normal, hoy estoy feliz.-

-¡Ah bueno! Qué bien porque quiero que atiendas a ese chico- señaló a la pantalla justo al chico de la voz.

-¿Qué es lo que quiere?-

-Unos accesorios para poder transmitir, al parecer es un chico famoso.-

-Ok, voy.- me levanté de la silla fui a la bodega tome los accesorios respire y fui al lugar, al llegar toque la puerta pero nadie abrió por lo que avise que entraría.

-Buena tarde.- saludo.

-Buena tarde, vengo a traer los accesorios que pediste ¿Necesitas algo más?-

-No, solo instala las cosas y vete de aquí.-

-Sí.- y así lo hice, tu actitud fue tan fría y cortante que solo rodé los ojos que solo hice mi trabajo.

-¿Ya terminaste? ahora lárgate que mis fans me esperan.-

-Sí si ya entendí no tienes que ser grosero.- termine mis asuntos y sin que me lo pidieras me fui.

-¡Qué arrogante!- arrugué mi nariz.

En la tarde noche saliste del lugar, al parecer el humor te había cambiado y estabas feliz que te despediste.

-Buena noche a todos.- y te fuiste pero como si de un drama se tratase la misma canción de la tarde comenzó a sonar.

-Aggg, quiten la canción- grite pero todos voltearon a verme extrañados por lo que me levante y yo mismo la quite.

-¿Por?- pregunto Min.

-Por qué sí.- respondí enojado.

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Llegué a mi habitación me acosté en mi cama y viendo vídeos apareció esa canción la escuche en la soledad pareciera que estaba hecha para mí, busqué la traducción y la letra era simplemente tonta por qué yo no estaba enamorado simplemente la canción me había gustado y ya.

-¡Buena canción!- y al leer uno de los textos te recordé y me moleste, me moleste conmigo mismo al pensar en ti, por lo que tomé mi cuaderno de letras y comencé a escribir una frase.

"No sé qué me pasa yo no soy así, esa voz me está torturando y esa persona no lo merece, es egoísta no quiero pensar en él, me niego rotundamente"

Y volví a repetir la canción, As if it's Your Last.

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Aquí vamos con una nueva historia...

Los amodoro, les prometo que ambas historias serán interesantes.

Difícil de AtraparDonde viven las historias. Descúbrelo ahora