Narrador omnipresente
Narumi vio desde lejos una cabellera amarilla con unos mechones rojos, no podía ver el rostro de la persona ya que se encontraba de espaldas pero algo en esa persona le llamaba su atención se sentía como si algo la arrastrara con esa persona
Narumi
-Narumi cariño, te estoy hablando desde hace rato tienes que venir a firmar los papeles- repetía Suma mientras jalaba del brazo a Narumi
- lo siento estoy un poco abrumada con tantas personas aunque todos se ven muy gentiles- No podía de dejar de pensar en cómo me sentía hace rato algo raro me pasó jamás me había sentido asi
- Tranquila cariño, tendrás tiempo de conocerlos a todos, lo más probable es que tu padre te mande a entrenar con ellos una vez que pases la prueba-
- Papá que bien suena eso-estaba tan contenta jamás pensé que Uzui Tengen fuera a ser mi padre adoptivo me a enseñado tanto y cuidado de mi que no puedo pensar en un mejor papá
La ceremonia no duró mucho solo firmamos unos papeles y mi nuevo papá me presentó a todo el mundo ahí estuve buscando a esa persona de el cabello amarillo pero no lograba encontrarla por ningún lado
Decidí salir a caminar necesitaba despejarme un poco ya que me agobiaba estar con tanta gente a mi alrededor, mi corazón no podía con tanta emoción tenia una familia, una familia con la que me sentía segura y amada, estaba tan metida en mis pensamientos que no me di cuenta cuando choque con alguien
- Disculpa, no quería perdón, perdón te lastime- hable tan rápido y agache la cabeza para pedir perdón.
- Tranquila esta bien, también fue mi culpa, no veía bien por donde caminaba- esa voz era tan enérgica, tan confiada
Levante la cabeza para ver al dueño de la voz y porfin encontré al dueño de esa cabellera bicolor, era un chico algo mayor a mi, alto, fuerte ya que la ropa que llevaba sé pegaba a sus músculos, de solo pensar eso me puse tan roja como un tomate, vamos Narumi deja de verlo así, lo mire a la cara y me di cuenta que todo en el era perfecto hasta que vi su ceja tenía un corte ahí que aun sangraba un poco
- Si lo lastime disculpe mucho, siéntese por favor, permitame ayudarle a curar su golpe -
- Tranquila no fue su culpa, hoy entrene y hasta podría decirle que fue un buen día ya que fue el único rasguño que tuve hoy-
El chico sonreía mucho, se veía que tenía un aura maravillosa, la imaginaba un color dorado
- Por favor permitame ayudarle, soy buena arreglando eso, lo dejaré como nuevo-
Narrador omnipresente
El chico aceptó y se fueron caminando hasta una pequeña finca en el bosque, ambos caminaron muy callados ya que se encontraban perdidos en sus pensamientos
Rengoku no podía dejar de pensar en la chica que caminaba a su lado, desde pequeño había visto a muchas chicas lindas pero jamás le había llamado la atención ninguna, siempre su mente estaba concentrada en volverse un pilar y porfin lo había conseguido, se encontraba emocionado pero esos sentimientos de triunfo se veían mezclados con la emoción de caminar al lado de esa hermosa chica, era como la encarnación de la noche, se sentía una paz en su corazón acelerado al caminar junto a esa misteriosa chica
Llegaron a la cabaña y la Narumi lo sentó en una pequeña banca afuera cuando regresó en sus manos ya traía una pequeña caja con algunos medicamentos. Narumi con manos ágiles limpio la herida y coloco una pequeña mariposa para cerrar la herida. Se alejo para mirar su obra y se sintió orgullosa había quedado bastante bien
-listo, ya no debería de preocuparle que siga sangrando -
-Muchas gracias, ohhh pero que torpe fui, señorita cual es su nombre, mi nombre es Rengoku Kyojuro-
- mucho gusto mi nombre es Tengen Narumi-
- un placer señorita, escuche muchas historias de usted, su padre no deja de hablar de lo grandiosa que es peleando-mencionó el pelibicolor
- espero cumplir sus expectativas, no soy tan buena aun ya que aun no hago la prueba para ser una cazadora de demonios-
- Tranquila señorita estoy muy seguro de que la pasara, confíe en usted y será más fácil pasar la prueba- sonrió el chico con ternura aun recordaba lo nervioso que se sintió cuando completo la prueba y sentía la necesidad de calmar a la chica, algo en ella hacía que quisiera calmarla podía sentir que esa chica irradiaba paz pero podía ver en su rostro que algo pasaba con ella
- Muchas gracias es muy amable Rengoku-San- las palabras del chico realmente habían hecho que en el corazón de Narumi un peso más se fuera se sentía realmente tranquila al estar al lado de ese chico
- Tal vez debería regresar a su fiesta, su padre debe de estarla buscando- Rengoku le extendió la mano para que ella la tomará necesitaba comprobar algo, la chica tomó su mano y fue tal como Rengoku lo pensaba su mano era tan suave como la seda a pesar de haber trabajado tanto como la katana
Y fue tal como lo mencionó Rengoku al llegar Uzui corría al rededor de todos buscando a la adolescente cuando levantó la vista y vio a su nueva hija tomada de la mano del nuevo pilar de la flama
- Rengoku-San la encontraste muchas gracias, y a ti que te e dicho Narumi no puedes andar sola por el bosque-
- Lo lamento padre es solo que- estaba a punto de explicarlo cuando el Rengoku la interrumpió
- Uzui-San no se enoje con ella, su hija me ayudó a curarme una pequeña herida-mencionó Rengoku con ese tono característica de él
- Yo que tu tenía cuidado una vez intento ayudarme a sanar una herida y terminé con más ya que me agrego algo que no era- menciono uzui recordando el día en que Narumi se equivoco de medicamento y logró que miles de ronchas llenarán su cuerpo
- Padre estoy aquí, no puedes hablar de mi así-menciono la albina apenada y ruborizada
- Bueno discúlpenme debo de ir por mas sake para brindar-
- Lo que dijo no es cierto, bueno si es cierto pero no fue tan grave como lo dice el-mencionó la albina tímidamente
-No se preocupe Narumi-San enserio me a ayudado a sanr mi herida el día de hoy, debo retirarme pero siga disfrutando su fiesta-
- Se tiene que ir tan pronto- Narumi se aguantaba más ganas de hacer un puchero enserio quería conocerlo un poco más algo en el le causaba intriga
- Lo lamento pero estoy seguro que nos volveremos a ver, por lo mientras tome esto- el chico le extendió una flor de cerezo que caía de los árboles - cuando nos volvamos a ver le daré una flor nueva-
La chica tomó la flor y se pudo percatar de que aquel chico temblaba un poco
- Muchas gracias la guardaré muy bien, buen viaje Renguro-san-
Rengoku se marchó, en el camino miraba a la luna y pensaba en Narumi, sentía algo extraño al pensar en ella ya que era una desconocida para el, pero no mentía en que ella lo ayudó, esa herida que tenía fue por una botella de vidrio que aventó su padre contra su hermano y el se puso en frente para protegerlo, consiguiendo ese corte, había decidido ir a la ceremonia ya que quería despejarse un raro ver a su padre en esa situación le dolía, pero Narumi lo ayudó a olvidar un rato ese dolor, esperaba realmente verla pronto.
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Demon Slayer Sálvame De La Oscuridad ✨
FanfictionRengoku El amor es como el fuego hermoso y llamativo pero peligroso que te podría comsumir, que sucedera cuando la heredera de la luna una respiración que se creía perdida aparece, una chica llena de dolor en su corazón que parece consumirla en la...