Dɪ́ᴀ Uɴᴏ: Aʙʀᴀᴢᴏ

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Aclaración. Las imágenes y nombres aquí dichos no son de mi propiedad, lo que sí es mío es lo que vas a leer a continuación.
Advertencia. Cursi, triste, posible OCC.

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Día Uno.
"Abrazo"

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−Vamos, será divertido−Insistió el azulado, codeándole con un tono burlón a cuestas.
 
Ni siquiera hacía falta que le contestase; él no iba a prestarse para algo tan mundano e irrelevante como una feria.
 
Recién habían tenido un momento de descanso y no iba a desperdiciar sus valiosas horas de sueño y entrenamiento en excursiones innecesarias.
 
−Vamos Shad, no todo en la vida es entrenar−Insistió por enésima vez el cobalto.
 
Era un caso perdido, sabía en el fondo que no lograría buenos resultados, pero igual no perdía nada con intentarlo.
 
Shadow por su parte se limitó a dedicarle una mirada de indiferencia mientras se disponía a realizar sus planes.
 
A él las distracciones mundanas no le interesaban en lo más mínimo. Era el líder de su pelotón y próximamente, con mucho esfuerzo sería ascendido a sargento.
 
No tenía tiempo para distraerse.
 
A diferencia de la gran mayoría de sus compañeros de escuadrón el solo quería cumplir con su deber.
 
No había algún motivo oculto en sus intenciones, el no tenía una familia que le esperaba en casa y la cual debía proteger.
 
Tan sólo era un sujeto solitario que aspiraba a subir de nivel.
 
La guerra los había alcanzado. No sólo a él, sino a miles, millones de ciudadanos estaban a la expectativa de lo que podía suceder.
 
La incertidumbre de no saber en que momento podía ocurrir un atentado, un bombardeo, lo que fuese había mermado su espíritu.
 
Y bueno, aunque el resto de sus compañeros estaban en igual de circunstancias, ellos se mantenían esperanzados en que las cosas mejorarían.
 
Algunos de ellos, cómo Sonic buscaban consuelo en los placeres carnales y el alcohol.
 
Por ello, cuando el escuadrón decidió que tomarían un breve descanso en Never Lake y reabastecerían suministros, la idea de conocer mujerzuelas y aventuras de una sola noche le fue de sumo agrado.
 
−Será divertido, ¿Hace cuanto que no co...?−El fuerte y certero codazo que recibió en el estómago no le permitió continuar su oración.
 
−No es de tu incumbencia, Faker−Dictaminó cortante, mientras el azulado recuperaba el aliento.
 
No tenía tiempo para sus vulgaridades.
 
Su respuesta era definitiva; lo último que necesitaba era lidiar con las estupideces del Faker y los posibles destrozos que iba a cometer.
 
Ligeramente más repuesto a causa de la falta de aire Sonic sólo suspiró.
 
−Okay, okay... si cambias de opinión los chicos y yo estaremos en la feria del pueblo, dicen que hay chicas bellas−Y sin mas dilación, se alejó con algunos compañeros.
 
A solas y en silencio Shadow continuó con su entrenamiento. Disfrutaba la soledad, le ayudaba a pensar y debatir preguntas interesantes, como el significado de la vida, el límite de la estupidez y el porque la guerra seguía en pie.
 
No necesitaba ni tenía tiempo que perder.
 
−Idiota...−Murmuró mirando a Sonic perderse en la lejanía.
 
La naturalidad para afrontar las situaciones con tanta tranquilidad era algo que nunca terminaba de parecerle surreal.
 
Bufó ante lo idiotas que eran sus compañeros y decidió que lo mejor sería dormir un rato y guardar energías para después.
 
Caminó hasta la tienda de campaña y justo al abrir la cortina la mirada de su compañero de tienda lo observaba curioso.
 
−¡Hola Shadow!−Saludó animoso y con una sonrisa en el rostro−¿Estás listo para ir a la feria? ¡Amo las ferias! Comida, juegos, diversión... es fantástico−.
 
No hacía falta que dijese que el no creía en esas cosas, ¿no? Tan solo caminó hasta su pequeña, incómoda e improvisada cama y se dispuso a quitarse los zapatos dispuesto a dormir.
 
−Vamos Shadow, será divertido, además... será bueno poder admirar el terreno−.
 
En silencio y dándole la espalda, el chico continuó con su discurso.
 
−¿Te imaginas que haya algún atentado y que todos dispersados no podamos hacer nada?−Seguía con sus locas, pero no infundadas teorías y Shadow bufó hastiado.
 
Tenía que concederle razón a ese alfeñique.
 
Con todos ebrios y revueltos entre civiles difícilmente conseguirían buenos resultados de ser necesario.
 
Meditó un momento las implicaciones que eso conllevaría y se chupó los dientes en señal de apatía ante tales posibilidades.
 
Silver por su parte observaba a su compañero con un gesto esperanzado.
 
Detestaba darle la razón a un papanatas cómo el pero en el fondo la posibilidad y el ligero presentimiento de que algo pudiese ocurrir le invadieron.
 
Por lo qué, fastidiado y de mala manera se colocó nuevamente los pesados y viejos zapatos y se encaminó junto a un contento Silver camino a la dichosa feria.
 
−Te detesto...−Farfulló iracundo y el joven solo sonrió sin darle importancia.
 

𝕊𝕙𝕒𝕕𝔸𝕞𝕪 𝕎𝕖𝕖𝕜 𝟚𝟘𝟚𝟙Donde viven las historias. Descúbrelo ahora