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Conforme los días pasaron, Shino iba progresando en su trabajo. Cada día que pasaba, la gente llegaba a la heladería no solo por sus ricos y llamativos sabores, sino que el carisma de nuestro joven Aburame les hacía querer volver y disfrutar de un momento agradable en aquel lugar.
Esa tarde Shino limpiaba el mostrador mientras su compañero limpiaba el suelo, ambos estaban ocupados hasta que por cuestión de casualidad, miró por el ventanal del lugar y vió a Konan....
Aquella mujer charlaba con un hombre justo en la entrada de la heladería, cuando Shino la vio entrar, sumergió si cara en el recipiente con agua sucia dónde lavaban las cucharas de helado para que la mujer no lo viera.
—Bienvenida señorita
Konan: 1 litro de helado de vainilla por favor.
—por supuesto.
Mientras el otro buscaba las cosas para servir el helado, Shino sacó la cara por falta de aire y fue entonces donde Konan lo saludó.
Konan: parece que tenías mucho calor —la mujer sonrió al verlo— tal vez tú podrías ayudarme a elegir un buen sabor de helado.
Shino: oh, hola...
[...]
Después de que el empleado le dió su helado, Shino y Konan fueron hasta la salida del lugar.
Shino: que tenga buen día señorita. —dijo nervioso—
Konan: ha sido lindo volver a verte. —sonrió— te queda muy bien ese delantal.
Shino: uh...gr-gracias...
[...]
Después de esa visita inesperada, Shino hablaba con Naruto por teléfono ya que se encontraba en una crisis.
Shino: se quedaba mirandome, como siempre... No sucedió nada pero... Estoy confundido
Naruto: Shino, escucha. No es un buen momento...
Shino: Konan me estremece donde no debería, ¿sabes? Después todo este tiempo aún siento ganas de foll-
Naruto: Shino debo colgar, lo siento —dijo nervioso ya que tenía el altavoz y estaba en compañía— adiós, adiós.
—cuelga—
Naruto: lamento que hayas escuchado eso...
Kira: oh, no te preocupes, no hay problema. —sonrió vagamente—
Naruto: —suspira— ¿quieres que sigamos editando las escenas?
La chica asintió y continuaron con el trabajo.
[. . . .]
Al día siguiente, Yumei y Kira esperaban a los chicos para almorzar, la pelipurpura estaba estaba jugando con la salsa de tomate haciendo un dibujo sobre la mesa lo cual disgustó a Yumei.
