I

19.7K 938 1.1K
                                    

N/A: Esto es ficción, esto fue publicado por pedido mayoritario de los lectores, nada de lo que será narrado es realidad o siquiera se acerca a la realidad, no me funen por haber publicado esto, por favor.

Tiene contenido +18 así que por favor lean bajo su propia responsabilidad.

.

.

-Odio tener insomnio...- Nishimura Niki de 23 años de edad miraba el techo de su habitación.

Era parte del grupo musical Enhypen, muy exitosos y con el pasar del tiempo se mudaron a un departamento más grande con una habitación para cada uno.

Niki no había podido dormir desde hace ya 3 semanas, no podía dormir en las noches pero si en el día, se acostaba en el sofá y podía dormir fácilmente, todo empezó cuando quiso dejar de dormir con Sunoo después de 5 años de hacerlo, mala idea, muy mala idea pues el calorcito y aroma de su adorable Hyung le ayudaba a dormir.

No es que se haya peleado con él, pero desde que dejaron de dormir juntos era como... como si se ignoraran un poco.

-A la mierda, necesito dormir- Niki se sentó tragándose todo su orgullo, si es que quedaba, y salió de su habitación aún cuando era algo más de media noche.

Salió de su habitación con una almohada en mano y a pasos nada apurados se dirigió a la última habitación del pasillo, que era la de Sunoo.

Tocó la puerta tres veces sin esperanza de ser atendido pues su Hyung solía dormir temprano, pero se sorprendió cuando un suave "pase" se escuchó desde adentro.

-Hyung...- Niki hizo aparición desde atrás de la puerta.

-Niki... ¿pasó algo?- dejó su teléfono a un lado y se sentó para atender a su menor.

-No puedo dormir, Hyung- esto ya había pasado una vez, 4 días después de que empezaron a dormir separados, Niki volvió a donde Sunoo intentando conciliar el sueño.

-Yo tampoco puedo dormir- confesó su mayor, había pasado por varios colores de pelo y en ese momento Sunoo estaba rubio, tan bonito.

-¿Puedo acostarme a tu lado?- Niki preguntó haciendo hacia atrás su platinado pelo.

-Claro, ven, ven- se hizo a un lado en su cama dándole espacio a Niki para que se recueste.

El menor se sentó a su lado brindándole una sonrisa a su mayor.

-¿Puedo abrazarte?- Niki volvió a preguntar, cuando dormían juntos, Niki siempre abrazaba a Sunoo, sostenía su cintura y lo dejaba usar su brazo como almohada, además de tener su respiración cerca.

-No tienes que preguntarlo- le sonrió indicando que si podía hacerlo.

Niki dejó la almohada que trajo a un lado y aún en la posición en la que estaban, sentados, rodeó el pequeño cuerpo de su mayor aspirando su dulce y natural aroma.

-¿Por qué dejamos de dormir juntos?- Niki preguntó separándose un poco mirando los ojos color miel de su mayor.

-Dijiste que era "tiempo de crecer" ¿recuerdas?

-Ah... cierto- hace 5 años que empezaron a dormir juntos y había terminado hace 3 semanas -Que idiotez ¿no crees? No sé porqué dije eso, porque amo dormir contigo.

-Yo igual amo dormir contigo, estas tres semanas fue tan difícil dormir, me acostumbré a que me abrazaras y a despertar todos los días a tu lado, que ahora ya no puedo dormir solo.

Sus ojos estaban fijos en los contrarios, tanto que puso nervioso al mayor haciendo que una corriente eléctrica pase por su espalda, quería mirar a otro lado, pero era como si se perdiese en esos felinos ojos que Niki tenía.

-Tus ojos son muy hermosos, Hyung- Niki inconscientemente sujetó la cintura de Sunoo con más fuerza y llevó su otra mano para acariciar su rostro.

-A-A mí igual me gustan tus ojos- susurró con la voz temblorosa, ¿Cómo era que Niki podía colocarlo tan sumiso así de rápido? Su menor solo necesitaba una mirada para ponerlo nervioso.

Sus respiraciones estaban cerca, el aliento de ambos chocaba con el otro, pero no dejaron de mirarse a los ojos hasta que estuvieron demasiado cerca.

Los hombros de Sunoo se encogían mientras sus ojos se cerraban, se sentía pequeño.

El menor sonrió al ver la expresión contraria, sus ojos estaban cerrados y sus labios apretados que demostraban algo de confusión a lo que podría pasar.

Tal vez no debería besarlo, tal vez sí, pero quería hacerlo, así que no perdió más tiempo y unió sus labios con los suaves labios de su mayor, lentamente movió sus labios esperando ser correspondido y después de un pequeño jadeo del contrario así fue.

Sus labios encajaban a la perfección, el beso era lento y lleno de emociones encontradas.

La única luz que los iluminaba era la de la lámpara de Sunoo y esta era bastante tenue, pero lo suficientemente fuerte como para poder el rostro contrario y su cuerpo.

El beso poco a poco empezó a tornarse más deseoso, Sunoo llevó sus manos a la nuca de Niki para poder acercarlo aún más.

El beso era húmedo, sus labios se movían con deseo y necesidad, pronto las caricias empezaron, Niki metió su mano dentro de la pijama celeste de su mayor tocando y acariciando la piel contraria.

-E-espera- Sunoo lo detuvo rompiendo el beso -esto... Está mal, somos compañeros de grupo.

-Sé que quieres esto tanto como yo, solo déjate llevar.

-Pero... ¿las cosas no se pondrán raras entre nosotros después de esto?

Niki suspiró y luego miró a un lado, ahí estaba una bolita de lana ¿porqué estaba ahí? Nadie lo sabe, pero cortó dos pedazos de esa lana con sus manos y uno lo ató en la muñeca derecha de Sunoo y otro en su propia muñeca como si fuesen manillas.

-Todo lo que pase lo olvidaremos cuando nos saquemos estas cintas ¿si?- volvió a su posición tomando su cintura.

-Pero los chicos...- Niki se acercaba lentamente.

-Jay se fue de campamento con Sunghoon y Jake hace un día ¿no recuerdas? Y Heesung con Jungwon fueron a Jeju, ayer... como hace 12 horas.

-Oh...- tenía razón, estaban ellos dos solos en aquella habitación dentro de ese no tan grande departamento.

-Ahora ¿me das permiso para continuar?- besó su mejilla bajando sus besos a su cuello.

-No pidas permiso... si de todos modos lo vas a hacer- no había razón para decirle que no.

La noche es larga.





















Cami~

INSOMNIO - SunKi♡Donde viven las historias. Descúbrelo ahora