INSOMNIO - SunKi♡

XVI

-Hyung, si-sigue así un poco más- Ni-ki hablaba mientras miraba aquella bella vista frente a él.

Sunoo saltaba desde hace unos minutos en su miembro, su expresión era tan sexy, de pronto sus ojos conectaron aún más y ahí fue el momento del climax para Sunoo, apretando sus paredes internas, corriendose mientras gemía el nombre del chico frente suyo y eso fue más que suficiente para satisfacer a Ni-ki, haciendo que de igual manera se adentre en su interior.

Pero fueron esos ojitos que Sunoo puso los que hicieron a Ni-ki querer continuar aún más.

Me acabas de poner ojos de "cógeme"

Entonces las posiciones se cambiaron, de un empujón, Ni-ki tomó el cuello de Sunoo mientras embestía su interior.

Ahora Sunoo estaba debajo.

-¡Ah!- entonces la mano que Ni-ki tenía en su cuello empezó a apretarle, así ahorcándolo, pero no le disgustaba para nada, quedarse sin aire se sentía tan bien mientras todo en su interior era estimulado.

-Eres tan flexible- aflojando un poco el agarre en su cuello con su otra mano acarició la piel de las piernas de su mayor, haciéndola llegar hasta chocar con la cama.

-A-Ahí... po-por favor- toda su cabeza era un completo desastre, todo estaba lleno de Ni-ki, su mente suplicaba tenerlo a su lado, abrazarlo y ser abrazado.

-¿Aquí te gusta?- volvió a golpear ese punto tan sensible en el cuerpo de su mayor.

Cuando retiró su mano del cuello del pelirosa vio que quedaba una marca, que de a poco se ponía roja.

Tu piel se ve tan bonita cuando la marco.

Entonces llevó su boca a su cuello, donde además de dejar una marca de su mano, empezó a besar diferentes zonas dejando algunas marcas en su clavícula, aquella blanca y rosada clavícula con sudor tan dulce, ahí mordió hasta dejar otra marca, esta vez de sus dientes.

Entonces le dio la vuelta a ese pequeño cuerpo abajo de él, para dejarlo apoyado en sus dos rodillas pues sus manos eran sostenidas para poder embestirlo con más fuerza.

-¡Ah! ¡Mgh!- pequeños, agudos y fuertes quejidos salían de la garganta del mayor.

Ni-ki tomó sus dos muñecas agarrándolas con una sola mano para tener la otra libre y poder amasar aquel trasero tan envidiable y firme que Sunoo poseía, sus nalgas redondas y suaves, parecían un par de perlas blancas.

Sin controlar su deseo, empezó a abofetear repetidas veces aquellas nalgas lechosas que ahora eran de un color rojo melocotón.

-¡Ah!

.

.

-¿Quieres un vaso de agua?- el más alto preguntó al pequeño cuerpo envuelto en toallas que estaba acostado en la cama.

-Sipi- esperaba pacientemente ser vestido por las manos de Ni-ki.

Cuando terminaron sus 5 rondas seguidas de sexo, Ni-ki limpió su cuerpo en la tina del hotel y después lo envolvió en toallas para que no se resfrié aunque ni frio hacía.

-Hyung, eres tan consentido- le colocó ropa interior y una remera mientras secaba su pelo con una toalla.

-Tú eres el que me hizo consentido- se dejaba hacer y deshacer por Ni-ki.

-Hyung... ¿Sabes? los chicos me dijeron que habría una reunión del grupo en nuestra sala de ensayos.

-Vayamos de un rato, aún es temprano, ellos ni deben estar ahí- recién eran las 6 de la mañana -ven y duerme conmigo un momento- jaló a Ni-ki del brazo y se acostaron abrazados en aquella cama.

-Cierto- y vio a Sunoo acurrucarse en su pecho y dormir plácidamente ahí, entonces envió un mensaje a Jake.

06:12 am. Retrasen un poco el plan, Hyung está cansado.

3/3

Cami~