En La Oscuridad|| Ruggarol

¥Capítulo 8¥

Yo no era suficiente para nadie. Tuve a Ruggero y lo eché a perder por querer más. Siempre fui ambiciosa y eso terminó por destruirme.

Si no hubiera querido ir siempre por mas, si el estatus no me importara tanto tal vez las cosas hubieran sido distintas.

Tal vez solo debí quedarme en mi casa aquella tarde de lluvia y todo sería mejor ahora. Tal vez solo debí cerrarle la puerta en la cara a aquel chico que llegó pidiendo un lugar para pasar la noche.

Tal vez solo debí cerrar la ventana, pero era inevitable no ver las estrellas de noche. Tal vez debí faltar al instituto ese día.

Tal vez no debí tomar esas fotos, tal vez jamás debí mandarlas. Pero lo hecho, hecho esta y no puedo volver el tiempo atrás por más que quiera.

Las cosas fueron hechas y ahora personas están pagando las consecuencias de mis actos. Tal vez debí pagarlos yo pero ya es tarde para arrepentirse.

Porque a pesar de estar rodeada de personas siempre me sentí sola. Sentía que no pertenecía a ningún lugar, a ninguna persona. Y porque la primera vez que sentí que estaba en donde pertenecía lo arruiné.

Porque traicione a la única persona a la que le había importado una vez en la vida. Y termino alejándose de mi. Luego de eso ninguno de los dos volvimos a ser los mismos de antes.

Yo me volví más superficial para tratar de tapar toda la mierda que llevaba por dentro. Trate de buscar un refugio dentro de otros, un refugio que solo existió durante milésimas de segundo. Antes de que lo volviera a arruinar con mi sed de tener mas, de siempre tener todo para sentirme llena.

Si me lo preguntan, eso es la vida. Son solo pequeñas milésimas de segundo. Soy una persona dentro de millones, existo solo en alguna pequeña parte de la historia, hay miles de años antes de mi y van a haber miles más después de mi.

Ni tú ni yo somos importantes en este mundo. Ni tú ni yo seremos recordados después de la muerte. El cielo y el infierno no existen, son solo inventos de nosotros para tenerle miedo a la muerte, para siempre elegir el camino del bien y ser unos santos toda la vida. ¿Spoiler? Nadie lo es; no hay nada después de la muerte, solo oscuridad eterna.

Hoy que estoy en mi oscuridad eterna se que pude haber hecho demasiadas cosas en mi vida y terminar igual que ahora, sin ningún castigo y disfrutando de lo que tengo ahora, que es nada pero lo es todo a la vez.

Porque hoy que volteo hacia atrás y ver lo que fue de mi me arrepiento de no ser recordada por hacer cosas malas, porque las cosas buenas se olvidan y se vuelven insignificantes para el cabo de unos años. Sin embargo las cosas malas serán siempre recordadas como lo que jamas debes hacer, porque iban a escuchar mi nombre como ejemplo de lo que lo debían hacer.

No sería recordada como la mejor pero al menos mi nombre sería mencionado. Al menos me recordarían.

Si tú estás leyendo esto se que es porque algo salió terriblemente mal. Si lees esto creo que ya sabras que fue lo que me paso y quiero decir que hacer cosas malas hace que te recuerden pero cuando voltees a ver atrás y veas en lo que te convertiste te arrepentirás, y si haces cosas buenas te darás cuenta que de nada sirvió ser bondadoso y noble toda tu vida si al final no había un paraíso esperándote.

Haz de tu vida lo que se te plazca, prueba cosas buenas y vívela al máximo. Porque después de ella solo hay oscuridad y abismo infinito. No hay un infierno ardiendo en llamas y tampoco hay un paraíso con gloria eterna.

[...]

Notas del autor:

Ufaaas que capítulo tan rari. Igual tendrá significado más tarde.

Yo me despido acá y recuerden... en la oscuridad o confíen.

Mel. ☁️