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Entre al interior de mi vehículo, sin dudas estos días serían totalmente fríos, le di un sorbo a mi café y encendí el auto para dirigirme a mi casa. El señor Park como siempre me abrió las rejas de aquel estacionamiento de los departamentos donde vivo, estacione y salí tomando mi café y mi bolso. El frío invadió mi clara comodidad y calidad que había tenido en el auto haciendo que mis dientes tiritaran de frío.

Me dirigí a entrar por los elevadores para subir a mi hogar, pero vi a mi vecino parado esperando a que las puertas se cerraran, me apresuré para poder subir y no tener que esperar.

- Jeon, por favor espere. -Él levanto la vista viéndome acelerar mi paso, él puso su brazo en medio de las puertas haciendo que pararan de cerrarse.

- Gracias. -Le agradecí una vez estuve dentro de aquella cabina.

- No hay de que agradecer, Señorita Han. -Ambos esperamos en silencio a que las puertas se cerraran. - Hace mucho frío, cierto.

- Cierto. -Ambos nos dimos una pequeña sonrisa. Jeon era mi vecino desde que me mude a estos departamentos, tuvimos un acercamiento 9 meses después de mi llegada, teníamos breves charlas, encuentros por los pasillo y un día él me invito a comer una tarde en la que ambos nos encontramos en el elevador, salimos, comimos, reímos y luego volvimos a nuestros hogares pero... justo cuando estábamos subiendo por el elevador, probablemente el hecho de que tenía unas cuantas botellas de Soju encima hicieron que besara a Jeon, y lo peor es que él no reacciono, solo quedo estático pero mi suerte tan buena hizo que lo dejara de besar cuando el elevador abrió y vi a la que en ese entonces era la novia de Jeon, la joven Jan. Ella solo iba como todas las tardes a ver a Jeon, supongo que lo estaba esperando y como no llego estaba a punto de irse pero nos vio, me vio besando a su novio, ella solo lo abofeteo y se fue corriendo del otro lado donde estaban las escaleras. Me disculpe miles de veces, busque a la chica y le pedí disculpas pero termino mal, desde ahí evite mucho a Jeon aunque el dijo que no había problema.

- Han, yo... necesito de tu ayuda. Un favor.-Justo el elevador abre. ¿Favor? ¿Acaso se refiere a ese tipo de favores.?.

- Tengo una noche larga, Jeon, lo siento. -Iba a salir pero me detuvo. -Jeon, ens

- Pero te pagaré, muy bien de hech- Le di una bofetada, y ¿Encima de todo me quería comprar?.

- Idiota. -Salí rápidamente a punto de entrar a mi departamento pero el volvió y me se puso frente a mi, entre mi puerta y yo.

- ¿Por qué me golpeas.?. -Se estaba sobando la mejilla roja que le había dejado.

- Me querías comprar. -Me defendí alejándolo.

- ¿Qué? No, bueno, si. -Solté un gritito y volví a golpear pero su otra mejilla. - ¡Oye! no lo mal pienses, solo quiero comprar tus diseños. -Cuando dijo eso me calme y deje escapar un aliviado "ahh".

- Esta bien, pasa. -Sin más abrí la puerta y pase, él hizo lo mismo y cerró. -¿Café? ¿Té?.

- Café, por favor. -Asentí y fui a la cafetera, metí el café en la capsula y espere a que se hiciera, tome una taza y la llene un poco abajo de su terminación.

- Gracias, Han. -Tomo la taza que le extendí y me senté junto a él en mi cómodo sofá.

- Te escucho. -Jeon dejo la taza y saco unas hojas de su portafolio.

- Tendré una premiación en dos semanas. -Dejo una hoja y un sobre en la mesita frente a nosotros. -Me gustaría que diseñaras mi atuendo.

- Wow, así que quieres que diseñe todo, eh. -Tome la hoja, en esta venían peso, medida de piernas, abdomen y estatura de Jeon, lo mire expectante. -Esto ¿Para que quiero saber esto.?.

G O S T H - T A E H Y U N G Donde viven las historias. Descúbrelo ahora