G O S T H - T A E H Y U N G

3.

- ¿De qué trabajas?. -Ambos ya estaban caminando a la par mientras salían del metro.

- ¿Me seguirás todo el día?. -Ella esquivaba a toda la gente posible, por eso odiaba los transportes públicos, no le gustaba rodearse de gente.

- ¿Cómo te llamas?. -Él iba detrás de ella, por lo cual ella no podía ver que él no necesitaba esquivarlos, simplemente los traspasaba, de igual manera ellos no lo veían.

- ¿No tienes algo mejor que hacer?. -No se detenía en ningún momento.

- ¿Eres modelo?. -Dejo caminar y ahora lo miro.

- ¿Lo parezco?. -Él la miro sonriente y asintió.

- Por algo lo digo, aparte te vistes... diferente. -Ella volvió su vista al frente y siguió caminando.

- Pues no soy modelo, soy diseñadora. -La chica seguía el camino a su agencia mientras él solo la seguía. - ¿Y tú? ¿En qué trabajas?.

- Bueno, yo... pasaba mi imaginación a un cuadro. -Ella lo miro de reojo.

- ¿Pintor?. -Él asintió.

- ¿Cómo te llamas?. -Para ser honestos la respuesta a esa pregunta lo tenía ansioso. Sus palabras quedaron mudas al ver que estaba frente a una de las más importantes agencias de modas en Corea.

-Bueno, será mejor despedirnos, los guardias no dejan pasar a nadie más que no sea de la agencia. -Ella se adelanto pero él no la dejaría ir.

- Solo camina, como si yo no existiera y yo te seguiré. -Ella iba a protestar pero él continuo. -Me diste tu palabra, cuando estemos adentro te explicaré todo, confía en mi.

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N A R R A _ H A N S O O K A H N.

- Buenos días, señorita Han. -Hice un breve saludo con la cabeza y entre, sorpresivamente los guardias no detuvieron a... Él chico loco del metro. Lo mire y él hizo lo mismo dándome una sonrisa de lado con superioridad, ja, idiota.

- No sé como lo hiciste, pero lo hiciste. -Ambos entramos al elevador, esto era raro, no mantenía conversaciones amplias con las personas y menos cuando las acababa de conocer.

- Así que te apellidas Han. -Olvide que no nos habíamos presentado.

- Si. -El elevador paro y salimos, vi como mis compañeros de piso se encontraban en sus escritorios, enseguida me saludaron todos, como siempre solo moví un poco mi cabeza en señal de saludo.

- Señorita Han, llego un poco... tarde.- Gia, una chica que llevaba poco tiempo trabajando aquí se acercaba a mi.

- Lo sé. -Seguí caminando sin detenerme al verla acercándose. Como si necesitara que alguien me diga que llegue tarde.

- Espere por favor, la Señora Min le mando esto. -Me detuve y me gire, me di cuenta que olvide que el chico loco seguía aquí, pero parecía no importarle a los demás.

- Gracias, Gia. -Tome los papeles que me estiro y seguí caminando.

- Eres como una jefa para ellos. -Mire al chico y negué.

- Somos compañeros, en realidad la jefa es la Señora Min. -Estábamos llegando a la puerta que tenía mi nombre en un letrero chico.

- No era pregunta, afirme lo que vi. -Volví a negar.

- No es así... -Estaba por decir más pero me interrumpió.

- Entonces... ¿Por qué tu tienes tu propio estudio de diseño y ellos no?. -Admito que eso no me lo había preguntado. Abrí la perilla de mi puerta.