Tus padres se enamoraron a pesar de estar prohibido, pues al formar parte de los dos clanes de la aldea, más poderosos no era bien visto, a pesar de esto decidieron casarse y tenerte.
Nacida con una peculiaridad, el ojo Izquierdo con el poder del...
Rápidamente tomamos camino hacia la morgue más cercana, pues es ahí donde podrían estar los akatsuki que buscábamos, al llegar, nos ocultamos para una emboscada por si llegaban, esperamos unos minutos, nada sucedí, nadie entraba o salía de ahí, hasta que por medio de Ino, nos informaron que el equipo de Shikamaru corría peligro, pues se habían encontrado a los akatsuki, rápidamente fuimos a su dirección, mientras brincábamos por los arboles hacia allá, mi collar de la moneda se me había caído, logre atraparlo en el aire, me lo volví a poner, por alguna razón tenía un mal presentimiento e Ino lo noto.
-Kasumi.
-¿Qué pasa Ino?
-Adelántate tú, eres más rápida que Chouji y yo, nosotros te alcanzaremos después.
-No puedo dejarlos solos, esos Akatsuki son peligrosos, llegaremos todos juntos.
-Está bien. –Respondió dudosa.
Mientras más nos acercábamos, más se me apretaba el pecho de preocupación.
-Byakugan. –Con mi Byakugan activado observe que no había nadie a los alrededores que pudiera emboscarnos o caer en una trampa, así que con eso confirmado, decidí tomar la palabra de Ino.
-Revise el área, no hay nadie alrededor, hare lo que dices Ino, me adelantare.
-No te preocupes por nosotros. –Menciono Chouji. –Haz lo que tengas que hacer.
-De acuerdo.
En mis pies comencé a esparcir más chakra para ir más rápido, dejando a mis compañeros atrás. Después de un rato, el bosque se estaba acabando, estaba por llegar al punto de reunión, ojala hubiera llegado antes...
-¡Asuma!
Escuche el grito de Shikamaru a lo lejos, eso solo provoco que sacara una velocidad que no pensaba que era posible, llegue al punto, vi Asuma tirado en el suelo, boca abajo, me dirigí hacia él y lo puse boca arriba.
-Kasumi....
Hablaba con dificultad.
-Sensei, ahora tratare de curarlo. –Comencé a usar la palma mística, pero el aparto su mano de la mía.
-Ya no hay nada que puedas hacer...
-No sensei, no diga eso. –Las manos me temblaban, sentía como poco a poco mis ojos comenzaban a humedecerse.
-Ya no hay nada que puedas hacer por él, niña. -Hablo el tipo dentro del círculo. –El ritual ya está hecho, el morirá dentro de poco, le clave esta estaca en sus órganos, mejor utiliza esa energía para ser otro de mis sacrificios para mi Dios Jashin.
-Tú... ¿Lo hiciste?
-¿No es obvio?
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