Tus padres se enamoraron a pesar de estar prohibido, pues al formar parte de los dos clanes de la aldea, más poderosos no era bien visto, a pesar de esto decidieron casarse y tenerte.
Nacida con una peculiaridad, el ojo Izquierdo con el poder del...
-Solo fueron unos golpes, pero, tú fuiste más afectado.
-Soy débil, aun ni siquiera puedo ponerme de pie.
-No te esfuerces, sé que en el Genjutsu de desgastaste mucho. A mi también me puso en uno, pero no fue tan poderoso, o tal vez lo deshizo.
-Yo debí de protegerte, es verdad lo que dijo, soy patético. ¿Qué he estado haciendo todo este tiempo? Incluso Naruto ha desarrollado más poder, hasta tu contribuiste más en la batalla con Gaara que yo.
-Eso no importa ahora, lo que ahora importa, es tu salud, desde que sucedió lo de Itachi estuvimos inconscientes por varios días. Incluso tenemos un Hokague nuevo.
-Si con tan solo unos golpes terminamos así, jamás podre cumplir mi objetivo.
-Yo también quisiera poder hacer algo....
Bueno, ya basta de pensar en eso, mira todas las flores que tienes, no dejas de sorprenderme con tu popularidad.
-Como si eso me importara.
-Tienes amigos que se preocupan por ti, claro que importa.
-Solo me importas tú.
No pude evitar un ligero sonrojo cuando menciono esas palabras.
-Dejare que descanses, la hokague quiere verme y no se para que es. Volveré después, te traeré algo de comer. Aunque con Sakura cuidándote no lo creo necesario. –sonreí de lado.
-Como sea.-Respondió con el ceño fruncido.
-Adiós -Abrí la puerta y Salí de la habitación.
Sasuke N
No puede ser, a ella también la lastimaron y esta como si nada, es fuerte sin duda.
Lo que dijo Itachi es cierto, soy un inútil, todo este tiempo en vez de mejorar mi capacidad e estado divirtiéndome. Necesito poder. Pero ¿Cómo?
Kasumi, descuida, conseguiré ese poder cueste lo que cueste, para poder protegerte te lo aseguro.
Kasumi N
Llegue a la oficina del Hokague, los sensores de los exámenes chunin estaban ahí y Shikamaru se encontraba ahí también.
-Qué bueno que estas bien, el tratamiento funciono a la perfección, me alegro.- Menciono la rubia sentada en su escritorio. Tal vez ya lo sabes pero de igual forma te lo digo. Yo soy la quinta Hokague. Tsunade.
-Un gusto Lady Tsunade. Yo soy...
-Se quién eres. Leí tu expediente, además, tus ojos también te identifican.
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