Habían pasado quince días desde que Marron y Trunks habían contraído matrimonio. Pero, de alguna forma, no era con exactitud lo que la rubia esperaba. El hijo de Vegeta no había querido irse de luna de miel, y tampoco le daba mucha atención a Marron, por lo menos, no de la misma forma en la que lo hacía antes. A veces la rubia no podía soportarlo y terminaban peleando, tenía en mente que el matrimonio no duraría mucho así, y era una pena. El pelilila le echaba encima toda la culpa a Pan, ya que había empezado a "gustar" de ella. No estaba nada bien. Ese mismo día decidió ir a visitarla, ya que no se hablaban desde aquél beso. Por un lado la necesitaba. Se despidió de su esposa sin dar explicaciones, y salió volando rumbo a la casa donde vivían Gohan y su hija. Al divisarla a lo lejos fue descendiendo de a poco, hasta llegar a la puerta. Golpeó tímidamente. —¿Trunks? Vaya, hace tiempo que no te veía por aquí. —Dijo Gohan al verlo, con una sonrisa de felicidad en su rostro. —¿Qué sucede? ¿Necesitas algo? —Él negó con la cabeza. —Solo vengo a saludar. —Sonrió un poco falsamente. —Solo eso. —A el hijo de Goku le pareció algo extraño, pero de todas maneras lo dejó pasar. Hablaron un poco, y luego el pelilila preguntó por Pan, a lo que Gohan le señaló la escalera que dirigía a su habitación. —Con su permiso. —Dijo yendo hacia la habitación. Golpeó unas tres veces, sin escuchar respuesta alguna, así que decidió entrar. La sorpresa fue extrema: Goten se encontraba acostado en la cama sin camisa, y Pan estaba acostada a su lado, con su cabeza apoyada en el pecho del primero. Ambos estaban dormidos. ¿Qué demonios era eso? —¿P-Pan...? —Dijo levantando un poco el tono de voz. La pelinegra se sobresaltó al ver a Trunks, saliendo inmediatamente de la cama. —¡Aaah! ¡Trunks! —Contestó en un tono de nerviosismo, levantándose una manga de la musculosa que llevaba puesta. —¿Qué haces aquí? —Miró de reojo al pelinegro, que aún estaba dormido y se acomodó un poco el pelo. Trunks también mantenía la mirada fija en su amigo. —Yo... Solo venía a verte. Hace tiempo que no hablamos. —Dijo sacudiendo la cabeza. —¿Qué hace él aquí? —Preguntó en un tono un poco más bajo. — Y... ¿Qué demonios significa esto? —Trunks... Él... ¡Solo me había venido a ver a noche! Y... Bueno, creo que nos quedamos dormido. —Sonreía totalmente nerviosa. No sabía qué decir. El pelilila enarcó una ceja, no creía ni una palabra de lo que ella le decía. —Puedes creerme... ¿Qué crees? ¿Que yo estaría con mi tío? —Rió exageradamente, claro, una falsa risa. —¡Por favor, Trunks! Claro que no. —Volvió mirar de reojo al pelinegro, que ahora se estaba desperezando, sin entender mucho de la situación. —Suspiró, al tiempo que recordaba lo que había pasado esa noche.
*Flash Back*
Pan estaba observando la fotografía de su madre que aún tenía pegada en su espejo, cuando el sonido de la puerta la sobresaltó. "¿Quién es?" Preguntó suavemente, yendo hacia la puerta. Era Gohan. Había ido para anunciarle que iba a Corporación Capsule porque tenía que buscar algo un poco urgente. Le dijo que tal vez era un poco probable que demore, así que ella debería prepararse su cena. La pelinegra no tuvo problemas con eso, así que simplemente se limitó a asentir y despedirse de su padre, para después volver nuevamente a observar la fotografía en el espejo. Por otro lado, el menor de los hijos de Goku estaba yendo a visitar a su sobrina nuevamente esa noche, y al ver que su hermano salía por la puerta, no pudo evitar la oportunidad. Pan aún se encontraba serena, al tiempo que peinaba su cabello. Traía una musculosa bastante "sexy" y un corto short. Por su lado, Goten entró sigilosamente por la ventana, sin ser visto. Se acercó más y más a la pelinegra, que solo pudo saber que no estaba sola cuando vio el reflejo de su tío por el espejo. Sobresaltada, se dio la vuelta, y no tuvo tiempo de decir nada antes de que ambas bocas se encontraran, para que la adrenalina volviera a subir. Ninguno decía nada, solo se limitaban a trabajar con sus lenguas, a brindarse caricias apasionadas y sinceras. No reparaban en lo que hacían, pero a ninguno de los dos le importaba demasiado. Les encantaba a ambos. Cada caricia y cada beso les subía más la adrenalina, y, casi sin darse cuenta, ambos estaban en la cama. Así, un poco inseguro, Goten le mostró a su sobrina un pequeño paquetito que traía en el bolsillo de su pantalón. Al principio Pan se mostró horrorizada por la idea, pero después simplemente se dejó llevar. Quince minutos más tarde ya ambos estaban desnudos. Los nervios reinaban en la menor, ¿acaso perdería su virginidad con su tío? Eso era lo que le importaba. Lo único en ese momento. La preocupación no duró mucho, ya que el mayor la guiaba en cada uno de los movimientos que hacía. No tenía ninguna experiencia, y él era todo un experto. Así procedió la velada, tío y sobrina terminaron haciendo el amor. Al terminar, al fin se decidieron a hablar realmente. —Bueno, supongo que ahora que ya hemos llegado al máximo punto, no creo que nada de lo que hagamos importe, ¿verdad? —Dijo el pelinegro, acostado aún desnudo en la cama. Luego una horrible posibilidad se presentó en su mente. —¡¿DÓNDE ESTÁ GOHAN?! —Oh, tranquilo. Él salió rumbo a Corporación Capsule. —Dijo volviendo a ponerse sus ropas y bostezando. —Vístete, Goten. Ya es hora de que te vayas. —Estaba un poco avergonzada por todo lo que había pasado, a fin de cuentas, él era su tío. El pelinegro obedeció, aunque no se había vuelto a poner la camisa. Ambos se acostaron nuevamente. Pasó un rato en el que hablaron de cosas que no tenían nada relacionado a lo que había pasado hacía tan solo unos momentos, antes de que el cansancio les ganase y se quedaran completamente dormidos. Eso estaba mal, Goten tenía que irse. Para suerte de ambos, Gohan nunca irrumpía en el cuarto de su hijita si ella no se lo permitía con un "pase". Es por eso que al llegar y no obtener una respuesta cuando golpeó la puerta, el mayor de los hijos de Goku se retiró inmediatamente a su habitación, dado por hecho que Pan estaba dormida. Él no se había enterado de que su hermano menor estaba durmiendo con su hija.
ESTÁS LEYENDO
Cuento De Amor
RomancePan y Gohan quedaron devastados luego de la muerte de Videl en un accidente automovilístico. Ambos están pasando por un estado de depresión, aunque varias personas están intentando ayudar a olvidar, sigue siendo demasiado difícil; en especial para P...