Hyung, ¿Me Ayuda A Cruzar La Calle? | sookai

01

Era una noche fría de diciembre, donde el invierno estaba a punto de llegar a la ruidosa ciudad de Seul, muchas personas estaban emocionadas porque estaban a menos de un mes para que llegue navidad, la felicidad de todos, despertarse temprano en navidad para encontrar enormes y muchos regalos que papá Noel había traído, las luces inundaban todas las casas y calles de la ciudad, villancicos por todos lados y olor a chocolate caliente se olía en cada hogar.

La navidad para muchos era la mejor época del año, todos emocionados para poder pasarla con su familia. Pero para el pequeño Kai de solo diez años no sentía mucha emoción, desafortunadamente su madre murió cuando el tenía tan solo seis años de edad siendo abandonado por su padre dejando su custodia a la hermana de su mamá; su tia que no le daba una vida decente y lo golpeaba cada vez que ella tomaba, Kai opto por irse a esa tan pequeña temprana edad viviendo en la calle, sin ir a la escuela y sin tener un amor de familia, sin tener ningún lugar donde pueda llamarle hogar.

Aunque el no estaba muy solo, pues no era la única persona que vivía en la calle, conoció a mas gente con el pasar del tiempo que por una razón que todos ellos tenían en común, lo recibían con los brazos abiertos, pues era el más pequeño de aquellas personas que vivían juntos en un callejón, que el grupo solo se conformaba por cinco personas. A el casi no dejaban de saliera de ese callejón, pues dos señores que son esposos, el señor y la señora Choi protegían a los dos pequeños de ahí, a su propio hijo Beomgyu, quién tenía doce años de edad y al pequeño Kai, nunca dejaban que salieran de ahí, ellos sabían el peligro que podían pasar al estar solos fuera de donde dormían. Tenían un poco de envidia hacia su hyung, Yeonjun, quien tenia diecisiete años de edad, el podía ir a tocar su guitarra y cantar para así ganar dinero de la gente, el podía hacer su propio dinero ayudando al pequeño grupo para que comieran, ellos tenían envidia, ellos querían también ayudar a sus hyungs.

Era ya muy tarde y los papás de Beomgyu no regresaban de su 'trabajo' ya que este solo consistía en estar sentados en lugares mas concurridos de la ciudad para poder pedir dinero, porque al ser de la calle, no podían contratarlos en un trabajo fijo, y su hyung Yeonjun tampoco regresaba. Los estómagos de Beomgyu y Kai rugía demasiado ya que no habían comido desde la noche pasada, los dos se encontraban acostados encima de unos cartones y cobijas gruesas pero algo sucias, Kai tenía su cabeza recostada en el pecho de Beomgyu, abrazándose mutuamente para generar calor entre los dos y no pasar más frío de lo normal.

-Beomi, tengo mucha hambre, ¿A donde fueron tus papis? Siento vacía mi panza- hizo un puchero los dos escuchando como rugía el estómago del pequeño

-También tengo hambre ning, pero no podemos salir de aquí, tenemos prohibido hacerlo, además, no deben de tardar, Yeonjun hyung ya debe de venir- trato de sonar seguro tratando de calmar un poco a Kai

-En lo que llegan, ¿Podemos jugar con los carritos?- señaló con su dedo unos pequeños carros que apenas y median cinco centímetros.

Los papás de Beomgyu afortunadamente encontraron esos carros en medio de la basura, pues no solo era buscar comida, también necesitaban buscar con que podrían distraerse los pequeños; los dos carritos se encontraban muy gastados y despintados, aparte que estaban sucios, pero a ellos no les importaba, se sentía demasiado emocionados por haber regalado esos cochecitos

-Bien, jugaremos en lo que llegan mis papás y junie, solo ponte la cobija encima, hace mucho frío- se levanto quedando sentado en los cartones, al instante Kai siguió sus pasos sentándose igual quedando enfrente de Beomgyu, estiró un poco su mano para agarrar los cochecitos comenzando a jugar.

A veces la vida pone lo peor para alguien que no lo merece, personas pequeñas no merecían vivir en la calle, ellos tenían que disfrutar su infancia, Beomgyu y Kai no conocían el mundo exterior, nunca se los permitieron a pesar de vivir en la calle.