Capítulo Final

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  Alex bajo del auto y entro sin tapujos al edificio, subiendo las escaleras con rapidez al llegar al piso 5 y acercándose a la habitación No: 53 toco la puerta con algo de fuerza luego de respirar profundo, a los segundos la puerta se abrió y al entrar lo que sintió fue el frío cañón de la beretta en su cien mientras observaba a Emily atada en una silla de madera en la sala. Apretando sus puños el detective miro de reojo a Dex notando la sonrisa ladina que tenia en su rostro.

-Supuse que eras tu maldito - Gruño Alex con ira.

-¿Quieres que te aplauda? o ¿Que te de un premio? - Pregunto -Si eso quieres, seras quien observe a tu chica morir. - Añadió con arrogancia.

-Le haces algo y eres hombre muerto - Amenaza mientras le seguía con la vista colocarse frente a el.

-No te hagas el héroe por favor, tu también vas a morir - Exclamo

Alex sin pensarlo y con rapidez se movió un poco a la derecha fuera del alcance del cañón mientras que con su mano movía mas a izquierda el arma, aprovechando su punto de ventaja lanzo un golpe directo al lado derecho de su cara des-orientándolo y provocando que soltara el arma.
Dex se recupero casi al instante y se fue encima de Alex pegándolo contra la pared repartiendo golpes rápidos en sus costillas terminando con un puñetazo directo en la barbilla haciendo que la parte trasera de su cabeza chocara contra la pared. Soportando el dolor el detective logro apartarlo de un empujón y tomando ventaja del segundo le golpe en el estomago siguiendo con otro directo en la cara para terminar con una patada directo al pecho llevándolo al suelo.

Dex se levanto enseguida y deteniendo la segunda patada del detective y usando su antebrazo golpeo su rotula haciendo que gritara de dolor, terminando de colocarse de pie le tomo por la camisa y entre las piernas alzándolo para dejarlo caer contra una mesa de vidrio que estaba a pocos centímetros.
Dex dejo que se levantara mientras el se alejaba con una sorisa en su rostro sin perder de vista a Alex.

-Me impresiono que nos encontráramos en ese supermercado -Dijo el -Si eso no hubiera pasado, nunca hubiera sospechado de mi y aun estaría su amiguita tranquila y no en una silla como lo esta ahora - Aclaro señalándola.

-Si no hubiera pasado eso... -Dice Alex quejándose de dolor por su rotula y su columna -Te hubiera encontrado de cualquier forma - Observando a su contrario noto que este sonría y no se preocupaba por el echo de tomar el arma, ¿le divertían los puñetazos?.

-¿porque? - Pregunto curioso.

-Dejaste un cabo suelto - Explico -El vendedor que te daba los rosarios, la punta de tu cuchillo militar en la costilla de una de las chichas, tal vez fue por casualidad y no lo viste venir. -

-Jajajaaja, me sorprende detective, quien diría que en Venezuela existiría alguien como tu pero... creo que todo eso que dices, no importara si llego a escapar y ustedes dos mueren. - Comento con un tono serio. -Terminemos con esto - Añadió.

Llevando su rotula al sitio afinco el pie notando que no dolía como esperaba, Dex por lo contrario sonó su cuello y con un movimiento sutil de sus manos provoco al detective.
Dejándose llevar Alex se le acerco con rapidez y sin darle oportunidad a su contrario le lanzo un golpe encestando en su mejilla derecha seguido de un segundo hacia la derecha, terminando con un opercourt en la mejilla noto como Dex escupía algo de sangre.
Frenando el cuarto golpe del detective con su antebrazo izquierda, para contraatacar le lanzo un golpe con la mano derecha, tomando la oportunidad uso su propio cuerpo para llevárselo a la zona de la cocina.

Emily trato de zafarse de las amarra de sus muñecas pero luego de varios intentos sin lograrlo, apretando sus puños observo un ultimo movimiento desesperado por lo que se alzo y dio un salto cayendo de espaldas a la silla rompiéndola, con dolor en su columna se quito las amarras de las muñecas y soportando el dolor busco el arma con la vista para ayudar a Alex. Luego de levantarse recorrió toda la sala con pasos lentos por el dolor que aun sentía en su columna, lo único que escuchaba era el desastre que se escuchaba en la cocina. Sentándose en el sofá se estiro un poco sonando su espalda soltando un quejido leve, volviendo a echar un vistazo noto el negro del mango de la beretta asomarse por una de las esquinas de uno de los sofás.
Señalándola sonrió y se acerco tomándola soltando un suspiro.

El asesino perfecto Donde viven las historias. Descúbrelo ahora