〰️Luz del Sol 〰️

8

El transcurso del día fue tranquilo, la madre de Thor regresó al hospital temprano y se encontró con el grupo de adolescente ahí sentados.

La señora estaba contenta de que Thor se distrajera un poco y pudiera tener compañía de alguien.

El señor Odinson regresó más tarde que su esposa, llegó con las noticias de que había encontrado un doctor que trabajaba en el mismo hospital en el que estaban, solo que este se situaba en otro lugar. El doctor sería trasladado ahí y atendería el tratamiento de Loki.

Los chicos al escuchar esta noticia se pusieron felices, ya que su amigo recibiría la ayuda necesaria.

La noche llegó y todos se retiraron a sus casas, Tony los llevó a cada uno en su carro, y Steve se ofreció para que fueran a su casa a quedarse, para así al día siguiente regresar al hospital.

Todos aceptaron incluyendo a Thor, su madre le pidió que fuera con ellos ya que quería que estuviera un poco distraído.

Thor entendió y se despidió de sus padres, después fue a la habitación de su hermano y plantó un cálido beso en su frente.

Todos se fueron a la casa de Steve y crearon su propia pijamada improvisada con el propósito de sacarle una sonrisa a Thor.

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Era de mañana y todos estaban en la cocina, habían desayunado panqueques.

Thor partía un trozo de su desayuno cundo su celular comenzó a sonar.

Era su madre la que lo llamaba, les indicó a sus amigos sobre su llamada y todos guardaron silencios. Thor contestó y colocó el altavoz

-Thor, ¿como amaneciste?

-Bien madre, ¿que sucede?- pregunto impaciente, temía que algo malo le hubiera pasado a su hermano durante la noche

-Tú hermano despertó y según el doctor ya se encuentra mejor, ya le quitaron el respirador, no lo necesita por ahora, ya puede respirar por sí mismo, creo que la visita de tus amigos lo hizo querer despertar.

-Eso es bueno- una sonrisa se formó en los labios de todos- Ya vamos para allá

En ese momento cortaron la llamada, y se fueron directo al carro.

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Cuando entraron al hospital, la señora Frigga los recibió alegremente, se veía que estaba feliz, al igual que los muchachos.

Todos se dirigieron a la habitación de Loki, al abrir la puerta se encontraron con el pelinegro sentado en su cama y la vista hacia la televisión, que parecía estar mostrando una película de magia y hechizos. Tenía una almohada en las piernas y la abrazaba con sus brazos

Cuando escuchó la puerta abrirse volteó a ver quien era el que entraba a su cuarto, vio a todos su amigos ahí parados. Sonrió tranquilamente.

Los chicos notaron que Loki se veía mejor, su piel se veía más normal y las ojeras que tenía antes eran menos perceptibles, sin embargo aún se veía cansado.

Se contagiaron de la sonrisa del ojiverde y se adentraron por completo a la habitación

-Hola Loks, ¿Que cuentas?- pregunto Tony mientras se sentaba en una silla que estaba justo al lado de su amigo, recargó sus brazos en la espalda de la silla y recostó su cabeza, giró sus ojos hacia Loki quien lo veía con una sonrisa

-Hola Tony- su voz se escuchaba mejor que antes, aún era algo ronca, pero era mejor - es bueno verte

-Lo mismo digo, estaba muy preocupado amigo

-Perdón, no logre avisarte

-Nosotros también vinimos a verte- hablaron los demás

Loki los miro y también les regalo una sonrisa

-Hola chicos

-¿Como te sientes?- pregunto Thor

-¿Quieres lo reconfortante o la verdad?- los dos hermanos soltaron una risa

-La verdad Loki-

-Bueno, pues, me siento algo cansado, y me duele un poco el pecho y la nariz, pero de ahí en cambio, creo que bien

-Eso es bueno- dijo Bruce

-Nos preocupamos mucho por ti-esta vez fue Steve el que habló

-Estoy bien, muchas gracias- Loki estaba feliz de que sus amigos se preocuparan por él y por su hermano, sin embargo se sentía algo raro, ya que ahora ellos sabían de su enfermedad.