𝐷𝐴𝑁𝐶𝐼𝑁𝐺 𝑊𝐼𝑇𝐻 𝑇𝐻𝐸 𝐷𝐸𝑉𝐼𝐿 || Choni

𝐗𝐕𝐈: 𝐑𝐨𝐦𝐩𝐞 𝐂𝐨𝐫𝐚𝐳𝐨𝐧𝐞𝐬

Toni despierta al día siguiente, completamente a salvo, con su madre llamando a su puerta e intentando evitar que la chica llegará tarde a la escuela. Sus enormes ojos se abren, lentamente y frente a ella, mas bien, a su lado, la diabla la observa fijo mientras una de las comisuras de sus labios se elevaba lentamente.

—Cher... —Susurra suave y dulce, su boca sonaba ronca debido a ser la primera vez en el día que hablaba. La mano repleta de preciosos anillos de oro de la ente va a él cabello de Toni, la cual cierra nuevamente los ojos y parece volver a revivir aquel momento en el cual no supo si realmente estaba despierta o había sido un sueño. Decidido quitarse la duda. —¿Estuviste aquí toda la noche?

—No, he llegando hace unos minutos.--- Responde. Toni no se preocupa debido a que no se le cruza nada extraño por la cabeza, y además realmente estaba muy dormida así que no puede saber con exactitud.

Comienza a refregar sus ojitos para no estar tan adormilada y poder levantarse para, al menos, darle un beso a la diablo. Sin embargo, ésta última resulta ser mas rápida debido debido a que se inclina y comienza comienza a dejar suaves y lentos besos por el hermoso y suave rostro de Toni, la cual envuelve el cuello de la ente con sus brazos y vuelve a cerrar sus ojos. Puede sentir como se está durmiendo poco a poco.

Es cuando Cheryl lleva su mano a la espalda de Toni para darle una suave e íntima caricia por debajo de la pijama que siente unas lineas de piel sobresalidas rozando las yemas de sus dedos. El cuerpo de la más baja se estremece con un leve dolor y frunce el ceño, volviendo a abrir los ojos y observando el semblante de la diabla. Esta tiene los ojos un poco mas oscuros.

—¿Que te sucedió? —Exige saber.

—Que? ¿Que tengo? —Ni siquiera intenta verse debido a que es imposible. Cheryl presiona un poco sus manos en los rasguños, provocando que Toni sisee en un reclamo pero, apenas término, ya no sintió más dolor. La diabla había sanando sus heridas. —¿Cher? ¿Que sucede? Me estas... me estas asustando.

—No hay nada de que asustarse. —Miente, y atrajo a Toni, volviendo a sentarse y dejándola en su regazo, contra su pecho. Toni no se negó e incluso refregó su rostro contra el torso de la arcángel, como un gatito.

—Levántate y ve a la escuela. Tengo asuntos pendientes, pero me verás aquí en la noche. — Toni asiente y Cheryl la toma del mentón, inclinándose un poco y dejando un suave beso en sus labios. —Ve, se hace tarde.

En realidad le importaba una mierda si se le hacía tarde en la escuela, porque la escuela y todo el maldito mundo, excepto Toni, le importaba una mierda. Sin embargo, debía resolver unos asuntos pendientes.

Porque el hijo de puta se metió con su niña.

Toni se pone de pie luego de recibir un suave beso que la dejo cosquilleando los labios y salio de encima del regazo de la diabla, caminando tranquilamente hacia el baño y cerrando la puerta detrás.

A Cheryl no le toma ni un segundo ponerse de pie y, en un parpadeó, esta en la habitación del ultimo piso de la casa. La habitación de Anthony y Ana, solo que se encontraba el primero, el cual en realidad no era Anthony y estaba en camisa blanca y calzones, buscando ropa para vestirse mientras silbaba una canción y completamente inconsciente de que la diabla se encontraba a unos centímetros, detrás de él.

—¿Tu le hiciste eso en la espalda a Toni? —. Dice, y el demonio se lo toma tan sorpresivamente que arroja el pantalón que tenia en su mano y da un grito algo cómico, girándose y observando aterrado a la diabla.

—¿Q-que? No. No, no, señora. No. —Da unos pasos hacia atrás hasta estar pegado a la pared. —Y-yo no siquiera le hablo.

—Eres el único demonio en la casa, y mi TT tiene rasguños en su espalda. —Anthony no paraba de negar con la cabeza, aterrado. Y es que Cheryl podía hacer lo que quisiese con este.