RED (YOONGI POV) |Yoonmin|

3.1

Nota del autor: Este capitulo será dividido en dos partes porque es más largo de los que hago normalmente.

Esta era la única y primera ocasión que una tímida sonrisa real se reflejaba en mi rostro, y como era de esperarse mi jefe lo notó.

—Supongo que todo salió bien con ese chico y tú, amigo, si necesitas más consejos o algo parecido me dices, que hayas tenido que pedir ayuda para hablarle primero me preocupa. —se acomodó en el mostrador secando las tazas mojadas, aún no abría la tienda.

—¿Qué se hace en una cita? —en el pasado hice muchas cosas, en su mayoría ilegales, cosas que cualquier otro ser humano repudiaría totalmente. Pero desde que llegué aquí he querido cambiar, dejar de lado al maldito hijo de puta enfermo que vive en mi cabeza. Supongo que la voluntad de querer cambiar indica que tan mal no estoy.

—¿Cita? ¿Cómo que cita? ¿Ya lo invitaste a una cita? Diablos Yoongi, te dije que debías ir despacio para no asustarlo. —dijo levantando el tono de voz como si fuera un profesor.

—El aceptó e incluso dijo el día y lugar. —quedó perplejo ante mi comentario.

—No sé cuál de los dos es más raro, tú o ese chico que se toma las cosas a la ligera. —negó con la cabeza, dejó la última pieza en una servilleta para absorber la humedad y me pasó una libreta con un lápiz—Anota, el rey de las citas está por hablar. —se aclaró la garganta y prosiguió.

En resumen; estuvo un larga hora explicándome que lo tenía que llevar a un lugar lindo, no follar en la primera cita porque me haría ver como un idiota y regalarle cosas que insinuara querer, sin contar que reiteradamente me dijo "Sé amable, coño"

—¿Te queda claro? —dijo yendo a cambiar de lado el cartel de la puerta principal. Asentí.

En poco tiempo comenzó a llegar la gente, dentro de mi cabeza estuvo todo el día rondando la pregunta de donde lo llevaría, el mayor sugirió el cine o un parque, pero era demasiado aburrido para mi. Espera ¿No debería ser interesante para él? Que tedioso pensar en lo que le gusta a los demás.

En mis tiempos libres tomé mi teléfono para buscar el sitio indicado, pero nada me convencía. Así pasó el día hasta terminar mi jornada. Desnudo me recosté sobre las sábanas con los brazos abiertos, dispuesto a buscar entre los espacios más recónditos de mis recuerdos el lugar de la salida perfecta. No tenía que preocuparme por mucho, ya que ahora iba solo a la cafetería, por lo que no tenía que hablar con Tae para decirle que no fuera a dejarme a la cafetería, ni nada por el estilo.

Un mensaje llegó a mi teléfono iluminando la oscura habitación, lo leí viendo una gran cantidad de dinero que había sido enviado hace unos segundos, casi al instante el nombre de mi jefe apareció en medio de la pantalla. Atendí

—¿Sí? —el ruido de fondo era más violento de lo normal. Era obvio que no estaba en casa. "Adelanté tu pagou, dinero, joder niño, eres un prowblema, usa eso para follártelo como nunca habías follado waau. Espera cariño, no puefo hablar por teléfono si me la chupas así. Maldición, que parque de diversiones te estás montando con mi polla." Sin más que pudiera decir, cortó. Ebrio y con una chica, como siempre. De todas formas no me molestaba, más dinero para mí.

—Gracias por la idea, jefecito. —escribí "Parque de diversiones" en Google, recibiendo una lista muy variada de atracciones cerca de la cuidad.

Era una gran opción, seguramente le gustaría ¿A quién no le gusta la adrenalina? Dejé el aparato a un lado y feliz por mi hallazgo me fui a dormir.

Al otro día desperté con más energía de lo normal, realicé mi rutina matutina tan motivado que ni yo me reconocía, por fin mostraba una expresión de bienestar genuina, se sentía bien, se sentía lindo querer ser y estar mejor por alguien.