Capítulo 3. Ayuda nevada.

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-¿A quién le estás escribiendo?

Max se estremeció, sintiendo que su rostro se calentaba y rápidamente escondió sus papeles. 

-¡Nadie!

Harmony se echó a reír, saltando con gracia para sentarse junto a Max en la pared. 

-Estás escribiendo a Roxanne de nuevo, ¿no?

-¡No!- La palabra salió instintivamente, pero bajo su mirada dejó escapar un suspiro. -¿Sí?¿Quizás?

Ella se echó a reír, el pelo rojo volando cuando echó la cabeza hacia atrás.

-No es gracioso, Mony.- refunfuñó Max, volviendo a escribir su carta.

-Sí lo es.- Ella le dio un codazo en el hombro. -¿Qué le estás escribiendo?

-Tanto como pueda sin alterar el orden mundial.- Puso los ojos en blanco e incluso Harmony dejó escapar un pequeño suspiro de molestia. Había sido una de las partes más frustrantes de convertirse en un portador de una llave espada. -¿Tú que tal? ¿Le escribiste a Caspiana?

-Uf, Caspiana no se merece mis cartas.- Harmony gimió, apoyándose contra la parte posterior de la pared, sus pies pateando hacia adelante y hacia atrás. -Estúpidas sirenas ...

-Espero que te incluyas a ti misma en eso ...- Max frunció el ceño, luego guardó su carta para concentrarse en su amiga. -¿Qué pasó?

Harmony se encogió de hombros. 

-No importa. Ella solo ... está pensando que no estoy tan interesada en ella como pensaba, bla, bla, bla ... creo que solo quiere un romance como el que tuvo la abuela.

-Bueno, le deseo suerte en la búsqueda de una bruja del mar con quien intercambiar su voz.- Max soltó una risita.

Harmony también se rió. 

-De todos modos, Caspiana siente que debido a que elegí venir aquí durante un año completo para perfeccionar mi magia, no estoy tan comprometida o concentrada en la relación como ella.- Harmony dejó escapar un suspiro. -Y creo que tiene razón. Yo solo ... no quería admitirlo antes.

Max frunció el ceño.

-No es tu culpa que la Maestra Marina pensara que aprenderías algo de magia mejor con la Maestra Kairi. Tienes la magia submarina al pie de la letra, pero también necesitarás saber la magia terrestre.

-No es culpa de ninguno de los dos. Solo objetivos de vida diferentes.- admitió Harmony.- Tenemos quince años ... así que apesta, pero está bien.- Ella se encogió de hombros de nuevo.- El costo de ser un portador de una llave espada, ¿verdad? Realmente nunca volviste a encajar con las personas que dejaste atrás.

 Volvió a patear con los pies, con los tobillos y las rodillas juntos. Max supuso que probablemente le faltaba la cola.

Recordó la carta que había estado escribiendo. 

-Si.

Harmony dejó escapar otro suspiro, luego forzó una sonrisa. 

-De todos modos, suficiente de ese drama. ¿Tienes alguna historia de PJ y Bobby para compartir?

Max dejó escapar un sonido que era mitad gemido, mitad risa. 

-Bueno, PJ acaba de escribir que cree que Bobby en realidad enviará al tío Donald a una tumba prematura.

-Oh querido. ¿Y Donald está seguro de que Bobby podría ser el próximo gran mago?

-Sí.- Max sonrió. -Y papá también le está enseñando a PJ cómo usar su escudo como arma.

The Things You Don't Come Back From [SoRiku]  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora