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―¡¡¡Sorpresa!!! ― gritaron los cinco.
Choso los miró estupefacto. Acababa de entrar a la habitación y se había encontrado a sus hermanos y a su novia con gorritos de fiesta en la cabeza. ¿Qué pasaba hoy y porqué era motivo de celebración? De eso él no se conseguía acordar.
Itadori ladeó la cabeza al ver que su hermano no reaccionaba.
―¿No te acuerdas? ¡Hoy es tu cumpleaños! ― habló entusiasmado.
―¿Qué? Pero si yo- Choso no pudo terminar de hablar ya que cayó al suelo. Al parecer los cinco se habían tirado encima de la maldición.
―¡Cariño! Hoy es un día muy especial...¿Por qué no te hace ilusión? ― recostada encima de Choso, la chica besó su mentón.
―Simplemente...No me gustan las sorpresas...
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―De verdad que no hacía falta, pero muchísimas gracias ― habló agradecido. Al final Choso si se lo acabó pasando bien pero al principio se mostró reacio.
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Muchas gracias a todos los que estáis leyendo y votando en la historia. Me hace muy feliz ver que hay gente a la que le gusta lo que escribo.
