Ella y yo

Nosotras - capitulo 11

POV - Calle

Después, estuvimos un rato ahí, en la alberca nadando, sin ropa, me encantaba hacer locuras con ella

-Amor, tengo hambree- me dijo, abrazándome, con voz de niñita berrinchuda

Le dí un beso, me salí corriendo de la alberca y alcancé de la pequeña mesa que había al lado, dos toallas, mientras caminaba sentí como Poché me seguía con la mirada y me examinaba de arriba a abajo

Me puse una  de las toallas alrededor de todo el cuerpo y luego me acerqué a las escaleras para ayudarla a salir

Con una mano, agarré mi toalla para que no se cayera y con la otra tomé su mano hasta que estuvo bien parada

Le dí otro besito y la envolví en la toalla que quedaba

Me jaló y quedamos a centímetros, me abrazó por la cintura y dejé caer mi cabeza en uno de sus hombros

Nos quedamos abrazadas unos segundos y luego me agarró de la mano y me jaló hasta la habitación

-Vamos a la playa, amor?

-Si mi vida, quiero broncearme- dije, riendo

-Bueno vamos entonces

Llegamos al cuarto  principal y cada una se puso su traje de baño

Nos veíamos muy sexys, no voy a decir que no
No podría estar más feliz, ella y yo, en la playa
Debería ser un sueño

Me pellizqué disimuladamente
-Amor qué haces ?- dijo y se empezó a reír
-Es que sigo sin creer que todo esto es realidad
-Ey, mírame- me giró la cara y nos quedamos viendo a los ojos
-Soy real, somos reales, y todo esto está pasando, gracias a ti, porque eres increíble, me haces muy muy feliz
Me brillaron los ojos y sonreí como estúpida, sentí mi corazón latiendo demasiado rápido
-Somos reales, repetí - y la besé por milésima vez ese día

Estuvimos en la playa, disfrutando del mar hasta el anochecer, también estuvimos un rato tiradas en la arena viendo las estrellas y tratando de buscarles forma o encontrar constelaciones, luego volvimos al hotel y pasamos esa noche y parte de la madrugada disfrutando de la maravillosa y grande habitación que teníamos

En un momento, me detuve, dejé todo lo que estaba haciendo y la miré, me miró de vuelta
Analicé sus ojos, su mirada, su sonrisa, sus labios, su cuerpo, su pelo, su perfección, su brillo, parecía de otro mundo

Ahí fue cuando me di cuenta que ella era
Siempre había sido ella

No hice nada mas que abrazarla, lo mas fuerte que pude, y desee con todo mi ser poder tenerla así de cerca el resto de mi vida
Suena demasiado romántico, lo se, pero es la realidad, no había otra cosa que quisiera más

Casi todos los días que le siguieron a ese fueron iguales, despertábamos, desayunábamos, nos besábamos, nadábamos un rato, vimos películas, lo hacíamos, comíamos delicioso, bajábamos a ver el atardecer en la playa, nos quedábamos despiertas hasta tarde haciendo algo divertido, riéndonos

Les escribimos a nuestras personas más cercanas, les avisamos que todo bien y el resto del viaje apagamos los celulares

Desconectar para conectar, tal cual

Todo era demasiado lindo

Ya que nos quedaban solo 3 días, no nos pudimos resistir y prendimos los celulares, tomamos como 10,000 fotos, nada era lo suficientemente no lindo para no fotografiarlo

No aguantamos y publicamos algunas cosas en Instagram, no pensamos en nada mas, solo eramos nosotras

Ese fue justo el error, tuve que haber estado preparada, siempre era lo mismo, algo tenía que salir mal