Tsuki ga kirei desu ne

Capítulo 6.

Sakura 🌸

Habían pasado cinco días desde la muerte de Kizashi Haruno, mal padre y buen apostador pero no muy arrepentido en su lecho de muerte.

Naturalmente pocas personas asistieron a su funeral, entre ellas Shiori y yo.

Cuando se lo conté a mi hermana no super cuál sería su reacción, a veces esa pequeña me asustaba; sin embargo, lo tomó con mucha calma pero sin dejar la tristeza de lado.

Eran muchas presiones para su pequeña e inocente cabeza pero tuve que sincerarme y comentarle del trabajo. Obviamente no mencioné nada acerca de la apuesta ni nada que haga quedar peor a nuestro padre. Ella se negaba a creerlo pero aceptó la idea de todas formas.

En toda mi vida, he tenido una amiga la cual me ha apoyado de todas las formas humanamente posibles desde que eramos muy pequeñas. A quien consideraba realmente mi amiga y también como una hermana. Aoi era la mujer más tierna y dulce que podrías conocer y aún así no querrías soltarla nunca. Dejé a mi hermana a su cuidado mientras yo me ausentaba, en tanto buscaba una mejor solución.

A Shiori le agradaba Aoi ya que iba mucho tiempo a nuestra casa y jugaba con ella en aquellos días en los que mamá aún estaba viva. Ella vivía con su novio Dan, pareja que ha tenido desde la secundaria y vaya que su amor fue muy lejos. Me siento realmente feliz por ella.

— Hermana, ¿en serio debes irte?
— Si pequeña, pero no será por mucho tiempo.
— ¿Pero vas a regresar cierto?
— ¡Claro que si! ¿Por qué no habría de hacerlo?
— Es que no quiero quedarme sola.
— No lo estarás cariño. Te llamaré todo el tiempo y estaré al pendiente de todo. Aoi cuidará muy bien de ti.
— ¡Te quiero mucho Sakura! — sollozaba mientras se aferraba a mi.
— Y yo a ti Shiori.

Con un beso en la frente, tomé a Shiori de la mano y fui a dejársela a Aoi mientras me subía al taxi que me llevaría a mi destino. Tenía que estar a las 9 de la mañana en el hotel en el cual se hospedaba Sasori y él me llevaría al dichoso lugar.

— ¡Mi querida, querida Sakura! Que gusto me da verte.
— ¡Jefe!¡No puedo esperar para comenzar a trabajar! —balbuceé sarcásticamente.
— Ja, ja, ja. Ese ese el extravagante espíritu que esperaba, aún si es sarcasmo. Bueno, sube al auto. Iremos hacia la sede del negocio.

Obedecí y subí a aquel monstruoso, lujoso y extravagantemente auto negro como si fuese de un narcotraficante. Obviamente no era eso ¿Verdad?.

Sasori intentaba formar una conversación en el trayecto pero mis palabras siempre fueron directas. Si y No, esas fueron siempre mis respuestas hasta que al final simplemente se dió por vencido y se decidió por contestar los miles de mensajes que tenía en su celular. Eso alivió un poco la tensión que se había formado.

Ya en nuestro lugar de destino, pude observar que la cosa no sería nada sencilla.

Habíamos llegado a una parada de tren. Mis ojos no podrían creer lo que estaban observando. Un enorme tren con al menos diez vagones ampliamente visibles, mucha gente cargando material pesado, otros dirigiendo los animales hacia los vagones y unos pocos simplemente hablando entre ellos.

Por si se preguntan ¿Qué hace un circo de era moderna con animales? No sé preocupen, pude haber caído en las apuestas de mi padre, pero escuché directamente de los labios de Sasori, que esos animales no son lastimados ni perjudicados. ¿Que está mal? Lo está, pero es una lección más de cómo el dinero puede hacer lo que quiera y en la edad que sea.

Sasori, al notar mi asombro, me llama con su mano para dirigirnos hacia uno de los primeros vagones, se supone que ahí están los "jefes" y mis nervios empezaron a subir su intensidad. No tenía ni la menor idea de cómo serían ellos o si me aceptarían como si nada.

— Señores, buenos días —menciona Sasori con una visible sonrisa en el rostro — he venido con nuestra sorpresa.
— Oh, por fin llegas —soltó una mujer de cabellos negros un tanto disgustada pero su voz era dulce — hemos esperado mucho tiempo.
— Lo sé, lo lamento. Fue mi culpa. En compensación quiero que la conozcan. Esta belleza se llama Sakura Haruno.

El carmesí que se formó en mis mejillas fue tanto que bajé mi cabeza. Retomé la compostura y alcé la mirada nuevamente y ahí estaban ellos, con su mirada fija en mí mientras me sentía un tanto exhibida.

— Hola querida, es un gusto tenerte con nosotros — menciona la mujer mientas se acerca a abrazarme.
— Oh cielos, qué cabello tan extravagante — se escucha una voz gruesa desde el fondo — Bienvenida Sakura.
— No puedo creer lo que mis ojos están viendo — menciona alguien a quien reconozco la voz — Hola, Sakura. Es una sorpresa tenerte aquí.
— ¿I...Itachi? —solté de manera casi instantánea a su saludo.
— Vaya, ustedes se conocen — habló Sasori un tanto enojado.
— ¡Claro que sí! Déjame llamar a mi hermano, le hablé sobre ti. ¡Sasuke! — gritó mientras llamaba con su mano a alguien que se encontraba al fondo — ¡Sakura está aquí!

Y lo ví.

Era un hombre de cabellos oscuros, similar a Itachi, pareciese ser su hermano menor. Fornido y unos ojos tan oscuros como la noche misma. Las hebras de su cabello se movían en una danza infinita con la ayuda del viento y mientras más se dirigía hacia mí, mi obvio nerviosismo aumentó estrepitosamente.

— H...hola. ¡Buenos días! Soy...soy Sakura Haruno — le extiendo mi mano temblorosa — Es...es un gusto.

¡Habla bien estúpida! - me dije entre mis adentros.

El apuesto joven dejó un barril que traía consigo, limpió sus manos en su ropa y me extendió una de ellas para recibir mi saludo. Su mano se sentía un poco áspera, como si hubiese trabajado mucho. 

— Es un gusto, señorita Haruno — le da un beso a mi mano — Puedes llamarme Sasuke, con confianza.

Joder, si una voz humana podría provocar un orgasmo...este chico sabe hacerlo muy bien.

— Sa...Sasuke. Esta bien — balbuceé como acostumbro a hacerlo al parecer.

Entonces Sasori, ligeramente molesto, nos llevó a todos hacia el interior de uno de los vagones para hablar sobre mi trabajo y lo que iba a realizar en ese lugar. Atrás de él se dirigían muchas personas, entre ellas se encontraban Sasuke e Itachi.

¡Maldita sea!
Ahora sí se viene lo interesante.

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¡Hola!

Les pido perdón a quienes han leído esta historia y les ha gustado.

Realmente voy a tomarme mi tiempo para subir más capítulos un poco más seguido.

Gracias a los que han seguido la historia, por muy pocos que sean, los tengo en mi corazoncito ❤️