Gracias...

3.1er día.

Narra Diane

Después de despedirme de mi nueva amiga Elizabeth me fui a casa muy feliz. Mi tía parece que lo notó y le conté todo lo que había pasado. Me contentó que se alegrara tanto, será porque no había tenido ningún amigo en antaño.
Me fui a dormir y no creo que lo que soñé fuera un sueño, sino una pesadilla.

En la pesadilla me encontraba en la mi guardería, la cual se encontraba en Megadoza. Ahí unos chicos empezaron a empujar me unos con otros y pegando me. Me acuerdo, ese dia lo pasé muy mal y solo tenía dos años. Recordé que nunca tuve amigos y que desde siempre me habían hecho bullying.

Luego la pesadilla cambió un poco, ahora era más mayor, me encontraba en cuarto de primaria, allí tampoco tuve amigos y seguían haciéndome bullying.

Y en la siguiente parte de la pesadilla, por así decirlo, era ahora, es decir, con la edad de ahora, 15 años. Esta vez no recordaba el sitio, mire alrededor y se trataba de un instituto. Pensé que podría ser al que iba a ir en la ciudad. Estaba entrando, todos me miraban y cuchicheaban entre ellos, otros se reían por lo bajo. Vi a Elizabeth viniendo en frente mío, no pude evitar llamarla, ya que era mi única amiga de momento.

-Elizabeth, ¿En serio eres amiga de esa?- dijeron alguno chicos.

-Sabes que si quieres ser popular no te conviene juntarte con ella- decían otros.

-Tranquilos todos- dijo la peli gris- no soy amiga de esa, simplemente voy a dejarle claro su lugar aquí- no entendía nada, pensé que éramos amigas. Quizás como nunca había tenido amigos no sabía cuándo te convertías en amigo de alguien- a ver chica, primero, no vuelvas a pronunciar mi nombre en ese tono tan familiar y segundo, no vuelvas a acercarte más a mi- ante esas palabras salí llorando del lugar.

Cuando salí, desperté con los ojos llenos de lágrimas. Menos mal que todo fue una pesadilla, pero ahora tenía miedo de que fuese real. Cuando conocí a Elizabeth no me pareció ese tipo de persona, al revés, me pareció un tipo de persona que nunca antes había conocido. Ante eso, decidí volver a dormir. Ya no soñé nada más hasta despertarme.

Eran las siete de la mañana y sonó mi despertador. Por un lado quería levantarme, pero por otro no. Si porque era el primer día y porque quería volver a ver a Elizabeth e intentar hacer amigos. Pero no porque apenas había dormido y porque tenía miedo de que mi pesadilla fuera real.

Al final decidí despertarme además de que Matrona ya empezó a llamarme diciéndome que me apresurara para no llegar tarde el primer día de instituto.
Baje, desayuné y Matrona me llevó en su coche porque aún no sabía llegar andando y no me apetecía perderme en la ciudad que no conocía de nada. Le dije a Matrona que luego yo volvería ya que le pediría a Elizabeth que viniese conmigo para enseñarme el camino. Cuando llegue no paro de recordarme que si pasaba algo que la avisara.

Llegué más temprano de lo que creía por no llegar y tarde. Aún no habían abierto así que decidí sentarme en un banco a esperar. Elizabeth aún no había llegado. Un chico rubio y alto me saco de mis pensamientos.

-Hola, soy Howzer, ¿Eres nueva aquí?- yo asentí- me alegro de que vinieras a este instituto. Dime, ¿Como te llamas?- dijo el chico amablemente.

-Me llamo Diane, es un placer- me sentía bastante mejor, ya había conocido a alguien más.

Me quedé hablando con Howzer de mientras esperábamos a que abrieran el instituto. Cuando no me di cuenta, ya era la hora y ahí estaba Elizabeth en la puerta. Me despedí de Howzer y fui donde ella.

-Hola Elizabeth, que bien volver a verte.

-Hola!! Lo mismo digo, ¿Entramos?

-Ojalá, pero tengo que esperar a mi guía- dije un poco apenada ya que quería estar con ella.

-¿A tu guía?-yo asentí- la tienes delante- ante esas palabras no pude evitar saltar de alegría por ello.

Entramos juntas, ella me comenzó a hablar un poco de la historia del instituto y de la ciudad. Al entrar vi que ese sitio era mucho más grande de lo que creía. Había muchas personas entrando y me alegraba de que no era como en mi sueño. Elizabeth siguió enseñándome el sitio. Nada más entrar había una gran pared con todas las fotos de las graduaciones. También había un cartel en el que daba la bienvenida a todos. En la primera puerta de la derecha se encontraba el gimnasio. Había paredes de escalada, aros, vayas para saltar...lo típico de los gimnasios.

En la siguiente puerta se encontraba la primera aula; la de inglés. Era bastante amplia. Había una gran pizarra, una estantería con varios diccionarios en inglés y lo demás eras pupitres, sillas y ventanas.
Al parecer las aulas eran prácticamente iguales, lo único que cambiaba era el material según la asignatura, como los libros.

Luego al final del todo el edificio y en medio, estaba el comedor. Era bastante grande. A la izquierda se encontraba la cocina y más para la derecha las mesas.

-Bueno, ¿Que te parece?- dijo esperanzada Elizabeth.

-El instituto es genial, es más grande de lo que creía y la guía me lo ha dejado tan claro todo que podría hacer un examen ahora mismo de todo- ella pareció alegrarse por lo mismo.

-Hola Elizabeth- dijo un hombre- ¿le ha quedado todo claro a nuestra nueva alumna?

-Si director Dreyfus, muy claro- este me miró contento.

-Me alegro. Tu nombre era Diane, ¿Cierto?- yo asentí- es un placer, yo soy el director pero me puedes llamar por mi nombre; Dreyfus- yo volví a asentir, no me salían las palabras en ese momento.

Al terminar de hablar, Elizabeth me preguntó si había conocido a alguien de aquí. Yo le expliqué que había conocido a un chico llamado Howzer que me había caído bastante bien. Ella me explicó que era el líder del equipo de fútbol del instituto.

Tras nuestras charla, empezaron las clases. Afortunadamente tenía la mayoría de las clases con ella.

Al acabar el día, me dijo que mañana me presentaría a su grupo de amigos. También me dio su número por si necesitaba algo.
Me acompañó a cada ya que vivíamos en el mismo barrio que además no estaba muy lejos. El camino era más fácil de lo que creía por lo que no me costaría aprenderme lo. Cuando llegamos a la plaza, nos despedimos y volví muy feliz a casa decidida a contarle a Matrona lo bien que me había ido.

Bueno, aquí está el tercer capítulo. Parece que tengo más imaginación de lo que creía.
De verdad, aunque sea poco el apoyo que tengo, para mi es más de lo que pensaba.

Como podréis ver, tengo la idea de poner a Howzer como bueno, ya que en la mayoría de historias lo ponen como malo pero a mí me cae bien.
Si ustedes quieren lo pongo como malo, decidme lo que sea. Chaoo.