Apenas despertamos con mi hermano nos fuimos donde el Pablo y su mina.
-Buenos días-dijimos con el Basti.
-Buenos días-responde el Pablo-¿como durmieron?
-Más o menos, no me podía quedar dormida.
-Igual tienes la tarde para descansar, nos podemos ir mañana si quieres.
-Mejor irnos hoy-respondo.
-Quiero contarles lo que me pasó ayer.
-Te escuchamos-dice mi hermano.
-Ayer fue un día bacán, ósea, al principio, la pasé muy bien con el Martín en la playa, pero después en la noche se puso weon. Me dijo que viéramos una película mientras comíamos cosas ricas, todo bien hasta ahí. Llevábamos 1 hora de película y de la nada empezó a besarme el cuello.
Me dan ganas de llorar y hago una pausa.
-Yo le decía que parara, que no estaba preparada para tirar con el, pero el weon no entendía. Mientras más le decía que parara el más se desesperaba y me tocaba. Llegó hasta el punto de bajarme mi pantalón y mi ropa interior, pero reaccioné de manera rápida y con la lámpara que estaba en el velador logré pegarle en la cabeza, hasta dejarlo inconsciente. Tomé mis cosas y salí corriendo de esa casa. Llamaba al Bastian y no me contestó nunca, y recordé que él me había enviado el número del Pablo por si necesitaba algo.
-Gracias al Pablo ahora estoy bien, no se que hubiera hecho sola, en un lugar que no conocía y con ese weon cerca.
Empiezo a llorar y mi hermano me abraza.
-Por la chucha Dominga-me dice el Bastian alterado-¿donde se está quedando ese maricon? Voy a ir a matar a ese hijo de puta.
-Hermano cálmate-le dice el Pablo-hay que agradecer que la Dominga está bien-más tarde vamos a ir a sacarle la chucha a ese weon, pero tienes que calmarte.
-No Pablo-habla la mina-tu no vas a ir.
-¿Que te pasa Cata? Ten un poco de empatía weon-le dice el Pablo.
-Cata-le digo- necesito saber si a ti te hizo lo mismo el Martín.
-No, a ella no le hizo nada- habla el Pablo.
-En realidad si-dice la Catalina-cuando yo estaba con el Martín el también quiso abusar de mi. Yo no hice nada, tampoco creí que el Martín iba a hacer eso de nuevo. Pasó un tiempo y el Martín me violó, me tenía amenazada y yo no podía hacer nada. Me decía que si yo no tenía sexo con el, el iba a hacerle algo al Pablo. En ese momento el Pablo era mi amigo, y yo no quería que le hiciera algo malo, entonces tenía que soportar sus abusos. Quedé embarazada de el y me dijo que tenía que abandonar a mi hija o me iba a pasar lo peor. Yo nunca le he contado esto a nadie, ni a mi familia.
-Pero qué onda ese mino-digo.
-No weon, que chucha tu Cata-le dice el Pablo-nunca me fuiste sincera, me mentiste por varios años, además ocultaste esta wea, y dejaste que otra mina pasara por lo mismo que tu. Se que es difícil por lo que pasaste pero no puedo creer la wea que hiciste. Cómo te quedaste callada, deberías haber hecho algo.
-Para ti es fácil decirlo po-habla la Cata-como a ti nunca te han hecho algo así.
-Cata, que difícil lo que pasaste, pero te entiendo, no llegué a tal punto de que me violaran pero si sentí ese temor, te entiendo perfectamente. Igual, me dolió un poco, ya que nunca me advertiste, o le dijiste algo a tu pololo, no somos amigas, pero si hubiera sido al revés yo te lo hubiera dicho.
-Cata no se si quiero seguir con esto-dice el Pablo- No estoy para tener una relación llena de mentiras.
Cuando lleguemos a Santiago vamos a hablar bien esto.Dicho eso, el Pablo se para y se va a su pieza.
Y nosotros 3 quedamos en el living.
Creo que la cagué en preguntar.
Espero les haya gustado🥰 esperaban esto? Ojalá seguir escribiendo más seguido, ahora tengo menos trabajos que hacer, y tengo un poco de tiempo libre🥺 besos✌🏻😗
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El vecino flaitecito
Teen FictionQuien iba a pensar que mi vecino era un flaitecito lindo.