El vecino flaitecito

DIECISIETE

Desperté y faltan como 5 minutos para llegar, estoy ansiosa porque ya quiero conocer la playa de acá.

No soy de bañarme en las playas pero si me mojo los pies, soy un poco miedosa y asquienta, me da miedo que el mar me lleve o que me vaya a picar algo y me da asco porque uno no sabe que puede llegar a tocar, no sé si soy la única.

Después de unos eternos 5 minutos al fin iremos a buscar la cabaña que arrendamos. Pasamos por un camino que lleva a la playa y se ven varias personas bañándose en el mar. Es muy lindo por acá.

Con el Mati quisimos bajarnos antes para ir a dar una vuelta por la artesanía que se encuentra cerca de la playa y los chiquillos fueron a buscar la cabaña para dejar nuestras maletas.

Recorrimos toda la artesanía y en un puesto habían varias pulceras, y me gustó una de hilo, así que compré 2 para tener unas iguales con mi bestie.

Pensaba comprarle al Pablo pero siento que es muy pronto para tener algo goals. Se que le puedo regalar algo cuando yo quiera pero me gustaría que sea algo con significado. Quizás más adelante encuentre el regalo indicado.

Nos sentamos en una banquita que está en la artesanía y a los minutos se nos acerca un mino.

-Hola linda- me dice- ¿me das tu número?
-Hola, ¿para que sería?
-Para conocernos-me dice mientras me pasa su celular.

No voy a negar que el niño es lindo, también es flaite y esos son mi debilidad.

Dudo en darle mi número pero al final si se lo doy.

-Gracias, que estés bien-me dice mientras se va.
-Wea loca- le digo a mi mejor amigo.
-Weona si, aprovecha y cómetelo, está bastante rico.
-Ay Matias, tu siempre quieres que me coma a todos los weones jajaja.
-Aprovecha nomás, así como vas te morirás Virgen amiga.
-Hasta el matri amigo.

Al ratito después llegaron los chicos y nos fuimos a recorrer nuevamente la artesanía.

No encontramos nada interesante así que fuimos a comprar algo para comer.

No sé si soy la única que va a algún restaurant de la playa y se pide papas fritas con pollo, en vez de comida con mariscos o pescado.

Cuando ya estamos pidiendo nuestra comida empieza a llamarme un número desconocido.

No le contesté y siguió insistiendo. Me levanté de la mesa y fui al baño a responder ya que había mucho ruido.

-Aló-digo-¿con quien hablo?
-Hola mi reina-me dice una voz ya conocida- soy el niño que te pidió el número.
-Ah, hola ¿qué quieres? estoy ocupada.
-Quería saber cómo estabas, ¿te gustaría juntarte conmigo más tarde?-me pregunta.
-Eh, ahí te aviso, chao-le corto.

Cree que me voy a juntar con el jaja, ni siquiera lo conozco. Quizás fue mala idea darle mi número.

Volví a la mesa y los chicos me estaban mirando para saber quien me llamaba.

-¿Quien era?- pregunta mi hermano.
-Movistar-le miento-le corté altiro y aproveché de pasar al baño.
-Aah-responde no muy convencido.

Pasaron unos 30 minutos y me volvió a llamar un número desconocido, así que volví a ir al baño a responder.

-¿quien es?- pregunto.
-¿Quien eri vo y que eri del Jonathan?-me pregunta una mina súper alterada.
-No tengo idea quien es el Jonathan, así que tranquila.
-¿Y por qué tiene tu número? Yo soy su señora.

Oh la weona chana.

-Ah linda-le digo- hoy el me pidió mi número, pero nunca pensé que tenía señora, mil disculpas. Pero controla bien a tu hombre porque la culpa es de el, no mía.
-Te voy a sacar la chucha weona, espérate nomás-me dice y corta.

Que wea acaba de pasar loco, ya veo que esta flaite me viene a pegar.

AY HACE 1000 AÑOS QUE NO ACTUALIZABA CAP): LO SIENTO MUCHO): ESTUVE MUY OCUPADA CON EL TRABAJO, ESTUDIO Y VARIAS COSAS MÁS, ESPERO TERMINARLA PRONTO! GRACIAS POR EL APOYO QUE HAN DADO A "EL VECINO FLAITECITO"🤍