—Viste a los chavos que acaban de pasar Marian— me dice mientras veo a los chicos subir hacia un balcón exclusivo.
—Si Naty, si los vi—digo mientras como un par de cacahuates.
— ¡Dios! Tengo que ir a ligarme a uno de esos 5 si o si—me dice mientras se termina su bebida de un jalón y se para y se encamina hacia donde están el grupo de "los guapotes".
—Naty, ¿A dónde vas?.
—Pues es obvio ¿NO?, ¿Quieres venir?—me pregunta, sabiendo que no me gusta ligar en fiestas y no es que no me gusten, si no que no se me da la gana la verdad.
—No, ya sabes que no me gusta.
—Bueno, en ese caso espérame aquí, no tardo solo me ligare a uno y regreso—me guiña un ojo, me sonríe y desaparece entre la multitud sin decir más.
Bueno, no es nada nuevo quedarme sola en las fiestas, ya que siempre que naty ve a alguien guapo en alguna fiesta me deja y se va a ligarlo, pero bueno no me siento mal. la verdad prefiero siempre estar sola a que mal acompañada.
Salgo del bar para tomar aire fresco, ya que hay dentro parece un sauna, justo afuera, cierro los ojos para que el aire frio y fresco pegue en mi cara y me refresque un poco. Justo en ese momento escucho a alguien a lado mío que suelta un suspiro, inmediatamente abro los ojos, pero no volteo solo me mantengo viendo la calle transitada de autos.
—¿Tomando aire fresco?— Me pregunta el chico que está a lado mío, no me he dado la vuelta, pero con solo oler su aroma, sé que es un hombre, tiene la voz gruesa y un poco ronca, la verdad me intrigo y decido voltearme y darle la cara, es un tipo un poco mayor que yo, talvez unos 19 años, es alto, tiene el pelo color negro azabache , esta vestido con unos pantalones negros tipo formal, pero sin perder el estilo casual, va con una blusa blanca, desabotonada los primeros 3 botones y lo más impactante es su cara. ¡Dios! Mío es tan guapo, tiene la mandíbula marcada, tiene los ojos azules celestes, tiene su nariz un poco respingada, pero dios, de donde ha salido este hombre.
—Si— contesto un poco atontada es que su belleza dios, ese hombre sí que ha de ser de esos hombre que dejan mujeres babeando por él, justo en ese momento me doy cuenta de qué tal vez, es amigo de esos estúpidos que acaba de llegar al bar. ¡Claro! El piensa que con su belleza voy a caer, pues se equivoca no soy una mujer fácil, siempre he sido una mujer de un carácter fuerte y no soy domable ante nadie.
— ¿Cómo te llamas?— me pregunta, la verdad es qué no se si darle mi nombre, ya que está afuera del bar y puede ser un asesino serial, hay por favor a quien quiero engañar, me gustan los asesinos seriales.
—Marian y ¿tu?.
—Marian—repite, mientras se acerca un poco más a mí—un gusto soy Christian—me ofrece su mano para estrecharla y lo hago—Que haces aquí sola afuera, es tarde.
—No crees que una mujer pueda estar sola afuera, a estas horas— le pregunto mientras emboza una sonrisa. Justo en ese momento escucho como alguien grita mi nombre, volteo y veo la cara de Naty que se está acercando hacia mí, maldigo en mi interior, ya que quería seguir hablando con el apuesto chavo de ojos azules celeste.
***
Asi que ¿ojos celestes? mm...... suena sabroson ¿no creen?
Mal momento para interumpir Naty, creo que en este momento todos odiamos a Naty.
Hay una sorpresita en el proximo episodio, asi que sin mas yo los dejo.
Besitos....
Atte. La chismosita
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UN JUEGO DE DOS
Teen FictionImaginate tener entradas para una fiesta de alto prestigio, suena tentador ¿verdad? Al parecer, a tu amiga se le hace buena idea irse a ligar a uno del grupo de los populares y te deja sola, que podria salir mal, al salir por aire fresco. Ohh si Chr...