Te miro a los ojos y veo amor

Ahogada en una botella sin fondo

Los chicos se voltearon a ver con miedo, Leo le hizo señas a Idara de que guardara silencio, Victor seguía golpeando la puerta con furia mientras gritaba.

-Ve y escóndete, no salgas hasta que yo te lo pida ¿Esta bien? - el joven le susurraba a su amiga.

Idara asintió y se fue a esconder bajo la cama de Leo, el chico intentó lucir bien y fue a abrir la puerta.

-¿Se le ofrece algo? - Victor estaba más que enfurecido.

-¡¿En donde esta?! Sé que está aquí, no tiene caso que se oculte ya que la encontraré - Idara estaba escuchando todo lo que sucedía y estaba muy asustada.

-No se de que había señor Hoffmann, Idara se escapó del hospital, tampoco su novio sabe en donde esta, ella solo se fue sin decir nada - <vaya mentira> pensó Leo, fue una buena mentira pero Víctor no le creyó del todo.

Quiso empezar una pelea pero Hellen lo detuvo justo antes de que golpeara al chico, Idara seguía escondida y estaba nerviosa, Víctor se fue a buscar a otro lugar y la chica aprovechó para salir de su escondite, fue con Leo y le aviso que se iría a la casa de su tía ya que no quería causarle problemas, el chico no estuvo de acuerdo con eso pero aún así la joven lo convenció de llevarla, era un lugar sumamente lejano y algo pobre, no era agradable.

Idara se despidió de su amigo y bajo del auto, a lo lejos vio a su tía y a su padre en la casa, pensó que sería mejor si esperaba a que Víctor se fuera para acercarse. Después de algunos minutos el padre de la chica se fue, Idara se acercó y tocó la puerta, un hombre abrió y llamó a Hellen, esta se acercó y vio a la joven.

-¿Qué haces aquí? Tu padre está buscándote, le llamaré y le avisaré que estás aquí - ambas mujeres entraron a la casa.

-Por favor no le digas que estoy aquí, si se entera me va a ir muy mal tía, te ruego que no le digas - Hellen vio la desesperación en la mirada de la chica y la dejo quedarse.

A cambio Idara haría el aseo de la casa, la cual se encontraba muy desordenada, eso no le importó tanto ya que era preferible limpiar que soportar los gritos, insultos y golpes de su padre. Empezaría la mañana siguiente ya que en ese momento no había mucha luz, Hellen le dio una habitación a la chica para que durmiera pero antes tendría que hacer la cena.

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Richard estaba leyéndole un cuento de princesas a su hija antes de dormir, cuando termino fue a la sala y ahí tuvo un vago recuerdo de cuando conoció a Idara, recordó lo linda que se veía cuando estaba nerviosa y como se emocionaba cada vez que él hablaba, se imaginaba una vida con ella y Máxime, estaba ansioso de verla y presentarle a su hija.

Después de un tiempo de recuerdos se fue a su habitación y pudo dormir.

Al día siguiente Idara se tenía que levantar temprano para hacer el desayuno a las personas que vivían allí, no era una tarea difícil, lo difícil sería limpiar el gran desorden que había en la casa, el lugar estaba hecho un asco, había botellas y latas de cervezas por todas partes, cajas de comida con sobras adentro y muchos papeles. Le parecía un lugar asqueroso pero aún así comenzó a limpiar.

Richard estaba preparándose para visitar a Idara y la pequeña Maxi hacía lo mismo, cuando ambos estaban listos fueron al auto, Zven conducía hasta llegar a casa de Leo ya que él pensaba que allí seguiría su amada, bajo del auto y tocó la puerta, el hombre le abrió y le aviso que la chica había vuelto a la casa de su tía.

Kruspe se sentía triste por no haberle pedido antes a Idara que regresara con él a vivir en su casa, pero aún no se recuperaba por lo que le había dicho Margaux así que prefirió dejarlo así. Leonel le dio la dirección y fue hasta el lugar, ahí vio a su linda novia haciendo la limpieza del hogar, aún así le pareció el ser más hermoso de la Tierra, estaba nervioso ya que su hija conocería a la chica.

Se armó de valor y tocó la puerta, Idara no tardo en abrir y al ver Richard se emocionó tanto que lo abrazo con fuerza, él seguía deprimido por lo que le había dicho su ex mujer y le regresó el abrazo sin ganas, la chica lo sintió pero fingió que no había pasado nada.

-Hola Richard, ¿Como estas? -habló la chica emocionada.

-Hola Idara, estoy bien, gracias por preguntar - sonó algo frío y cortante, su novia estaba algo confundida ¿Porque Zven la estaba tratando así?

-Papi papi, sus ojos, son diferentes- a la niña le parecía algo sorprendente que la chica tuviera los ojos de distinto color, Idara se sintió nerviosa y un poco apenada, aunque ya estaba acostumbrada a que la gente la señalara así.

-Si, son los ojos más hermosos de todo el mundo - hablo en hombre cargando a su pequeña hija.

-Son muy bonitos de verdad, ¿Ella es la chica de la que me hablaste? - Hablaba muy emocionada.

-Si Maxi, es ella -

-Oh cielos, Richard me da muchísimo gusto por fin conocer a tu hija, es hermosa - Idara, aprovechando que su tía había salido, invito a Máxime a pasar a la casa.

Idara y Máxime platicaron durante un buen rato mientras Kruspe las observaba, ambas se veían encantadoras a la vista del hombre, eran sus dos amores. Él estaba feliz de que su hija y su novia se llevaran bien, aunque no estaba seguro de que su relación llegara a algo muy lejano, se sentía tan extraño que prefirió irse de allí, le dijo a su hija que ya se tenían que ir y ambas chicas se despidieron, Zven también se despidió de ella pero de una manera algo fría.

Idara se puso triste al pensar que su novio ya no la quería más, sintió unas enorme ganas de beber tanto alcohol hasta perder el conocimiento, eso la hacía sentir mejor aparte de las drogas, no podía conseguir cocaina en ese momento por lo que decidió emborracharse, fue a la licorera más cercana y compro algo de alcohol.

Regreso a la casa y se encerró en su habitación, una vez ahí empezó a beber importándole poco que hubiera alguien ahí, se sentía fatal al pensar que nadie la quería y que solo le estorbaba a todos, pensó que era cierto que su madre había muerto por su culpa y que merecía que su padre la tratara así, sentía que no merecía el amor de nadie, que tendría que estar sola para el resto de su vida, en su mente había escenarios de personas siendo felices sin ella, incluyendo a Leo.