En el camino hacia su casa podía imaginar el rostro orgulloso de su madre al verla de nuevo y una alegría inmensa llenaba su ser al poder cumplir su meta de ser cazadora, con su emoción a flor de piel observaba el oscuro cielo con el gran satélite natural en el iluminando el bosque.
La noche, un hermoso espectáculo y maravilla a simple vista; pero peligrosa y mortal a su vez.
Era una lastima que las personas no pudieran apreciar la belleza de la noche, siendo esta la desventaja de los cazadores, pero una bella ventaja para los demonios.
Su nuevo amigo se encontraba sobre su cabeza descansando, habia volado un buen tiempo y ella le ofrecio pararse en su cabeza aunque no estaba cansado, pero luego de sentir el sedoso cabello de la castaña, decidio retractarse a seguir volando.
Poco a poco iba llegando a su destino comenzando a correr asi llegar rapidamente, la luna siendo su unico farol la guiaba en su correr divisando a lo lejos su cabaña.
Su cuervo prendio vuelo hacia esa dirección para guiarla mejor en su andar, y a medida que llegaba su sonrisa se borraba.
Frente a ella, su amorosa progenitora se hallaba bañada en sangre.
Su rostro estaba petrificado, sin ninguna otra emoción mas que la de horror y tristeza, dejando caer de manera repentina las lágrimas.
-¡¡MADREEE!!-
Su vos hacia eco en toda la cabaña al igual que en su mente, la manera en que se arrodillaba junto al cuerpo de su madre para arrullarla sobre su cuerpo pasaban en cámara lenta al igual que los momentos que vivio junto a ella.
Kuro al posarse en la ventana pudo ver la triste y horrorosa escena, sintiendo pena por lo que le habia tocado pasar a su dueña.
Acariciando el rostro de su madre dejaba caer las lágrimas sobre ella mientras se preguntaba por qué, por qué le habian arrebatado a la unica persona que quedaba de su familia.
-hi...hija- dice jadeante.
-ma..mamá- contesta de manera quebrada.
-volviste..s-sabia que l-o harias- levantando debilmente su mano dirigiendolo al rostro de su hija.
-no te esfuerzes mamá porfavor- tomando temblorosamente la mano de su madre para dejar un beso en ella y colocarla a un lado de su rostro, sintiendo el cálido de su tacto por última vez.
-hija mia...ahora ire a- reunirme c-on tu padre...pero te estaremos c-cuidando desde..el mas allá y puedes estar segura... que estaremos muy orgullosos de ti-
Esas palabras solo aumentaron el llanto y dolor de su hija con la ayuda de la amorosa sonrisa que hasta en sus ultimos momentos su madre mantenia.
Ella no podía decir nada, su voz estaba estancada en su garganta. Así quedó hasta los últimos momentos de su madre.
......
Su respiración era mínimamente agitada, leves gotas de sudor surcaban por su rostro serio que iba dirigido al repugnante ser frente a ella.
Unas semanas habían pasado, exactamente dos en los cuales se la había pasado por todo el bosque matando a todo demonio que encontraba, luego de estar una semana sin salir de su cabaña a causa de la depresión, decidió salir reuniendo fuerzas para seguir adelante como su madre quería que lo hiciera, recordando las últimas palabras de ella.
(Encuentra a tu amado y vive feliz, llena de hermosos sentimientos tu corazón y pase lo que pase, nunca dejes de proteger a las personas que amas y sonreír)
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"La Flama De Nuestro Amor"
FanfictionRespiración entrecortada, un dolor incontrolable tanto fisico como sentimental por las personas que dejará, pero con el alma tranquila por saber que estará en buenas manos. -y-yo..y-ya te he d-dicho Kyojuro...si no p-puedo protegerte...¡¡morire cont...