Esta es la historia de Alessia Smith, una chica quién a logrado todo en su vida y que está a nada de pasar a la Universidad.
¿Que pasaría si un día como cualquier otro, tiene un accidente y en el muere? No sin antes conoce al misterioso Zayn Malik
...
La campana de salida nos anuncia a mis compañeros y a mi que la jornada del día de hoy en el colegio había acabado.
Cierro mi libro rápidamente y empiezo a guardar todas mis cosas. Al salir del aula visualizo como mis tres amigas vienen eufóricas caminado hacia mi dirección.
<Oh no>
—Aless, date prisa debemos de ir al centro comercial, debemos comprar vestidos, zapatos, accesorios...—Fanny me apresura mientras tira de mi brazo y yo la sigo riendo por lo bajo.
—De acuerdo ya voy, pero suelta mi brazo me lo vas a romper— Dramatizo riendo.
***
Debo decir que no soy una gran fan de hacer compras, pero con mis amigas es agetriado...pero muy divertido. No miento cuando digo que entramos a todas las tiendas de la plaza, hasta encontrar nuestro añorado vestido de graduación.
<¡Madre mía! Si que estaban emocionadas>
—Alessia ¿Porque no te pruebas este?—Laura me aconsejas y yo arrugó la nariz con desagrado.
—Estas bromeando ¿verdad?—Hago una mueca de disgusto.
—Claro que no— dice con voz sarcástica y con una sonrisa burlona
Claro que está bromeando, ese vestido es simplemente horrendo, el color es feo y la forma. Es el vestido ideal para mí abuela.
Ruedo los ojos y ella se echa a reír.
—Es broma pero, ya tardaste mucho en escoger algún vestido, solo quiero ayudar—se queja y se que tiene razón.
—Ya se, pero es que no encuentro el indicado. Está tienda es mi única opción—suspiro pasando la mano por una pila de vestidos.
—¿Que te parece este?—Yaoli llega a nosotras y miro el vestido que cuelga del gancho.
Sonrío complacida al observar el vestido que descansa entre sus manos. Ella siempre a sabido muy bien mis gustos; vestido negro un poco más arriba de la rodilla, señido al cuerpo y...¡Negro! Es lo que estaba buscando.
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—¡Sí! ¡Ese esta perfecto!—exclamo emocionada y tomo el vestido. Me lo pego al pecho y reviso que me quede bien mientras me miro al espejo—Si, definitivamente este es—sonrío complacida frente al espejo.
—¡Ahora a buscar zapatos!—exclama Fanny y todas nos dedicamos a eso.
Me es mucho más sencillo buscar unos zapatos, no sabía si escoger entre unos dorados o unos negros. Finalmente me eh decido por unos dorados, un collar dorado y unos hermosos aretes circulares diminutos del mismos color.
Con eso tenía por echo que ya tenía que ponerme para el día de la graduación.
