Salvame (Vegueta X Goku)

Amándote 🌷

VEGUETA

Empezaba a poder pararme pero siempre y cuando esté sujetado a algo o por alguien. Dar un paso me resultaba imposible sin caer. Esto me enervaba los nervios, pero Kakaroto conseguía calmarme con su intenso amor y paciencia.

Agotado ya, me encontraba sentado en la silla de ruedas que tanto odiaba. Me denigraba estar ahí, me sentía peor que una cucaracha.

Mi orgullo me impedía seguir adelante, era imposible sentirme bien estando tan imposibilitado.

Aunque Kakaroto me ayudaba bastante, a su vez me hacía desear estar recuperado para poder ser libre de una buena vez por todas.

Él era capaz de entenderme tan bien que cuando peor me sentía, me abrazaba y acariciaba. Me decía palabras tiernas y me besaba. Dios aquello me enamoraba tanto que deseaba poder recordar el pasado. Nuestro pasado.

Pero cada vez que se lo pedía él se mostraba reacio a cooperar. Podía entender que sea doloroso, pero me gustaría reucuperar aquel pasado que mi padre me arrebató.

Además me parecía injusto que sea solo él quien cargue con todo. Pero él siempre me decía que no debía preocuparme, que ya había quedado atrás. Kakaroto era tan felíz, tan atractivo y sensual que era imposible no amarlo.

- Tranquilo Vegueta, ahora estamos juntos y nada nos separará mi amor.
- No estoy tan seguro, mi padre lo hizo una vez. Signifoca que podrá volver a hacerlo ahora. Si sigo bajo su control nada le evitará que....

Pero él colocó su mano derecha sobre mis labios deteniendome.
- Shhhh, tranquilo mi amor. No sigas por ese camino. Solo piensa en nosotros y en nuestro amor.

Nos besamos con intensa pasión sintiendo que el mundo se detenía, solo importabamos nosotros y nadie más. Nos abrazamos con intensa pasión.

Él se detuvo y me apartó un momento respirando entrecortado. Me pregunto si quería seguir avanzando y sin dudarlo dije sí. Él introdujo su mano bajo mi pantalón acariciandome mi miembro sobre mis boxers directamente.

Me enloquecía de deseo y de placer. Susurré su nombre entre nuestros labios, mientras lo acariaba con dedos torpes por el deseo.

Kakaroto me sostuvo entre sus brazos y me llevó a mi habitación donde me colocó en el sillón. Luego preparó la cama, para llevarme allí.

Me desvistió luego se desvistió él. Yo respiraba entrecortado. La chimenea estaba encendida por ende la habitación estaba tibia.

Una vez desnudo, Kakaroto se subió sobre de mí, acariciando mi entrepierna.
Cerré los ojos sintiendo la pasión que me debordaba por cada poro de mi piel.

Nos amamos con pasión, él me iba llevando. Fuera había caído la noche. Me hizo el sexo oral para luego abrazarme con fuerza. Lo mismo hice yo, rodearlo con mis brazos.

Fue la mejor noche después de mucho tiempo. Dormir sintiendolo a mi lado era el placer más grande.