Capítulo 4:

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3 años después...

Desde ese día su vida en Hogwarts era todo un desastre, y todo gracias a una persona. Sirius Black se encargaba siempre de hacerle una serie de bromas pesadas por semana. El chico tenía una muy estúpida razón para hacerlo, y es que Bella sin saberlo le había dañado el orgullo aquella vez en primer año al defender a su amigo.
Como James había prometido a su hermana, se disculpó con Severus, pero no sirvió de nada pues él y sus amigos  seguían burlándose del  joven llamándolo Quejicus y haciéndole la vida imposible. En varias ocasiones Bella amenazó a su hermano con no dirigirle nunca más la palabra, pero tanto Severus como Lily hicieron a la chica entrar en razón pues no se podía pelear de James eternamente porque él era su hermano.
James por otro lado intentaba sin éxito conseguir el cariño de su querida pelirroja, pero ella ni caso pues mientras él siguiése molestando a su amigo no miraría ni a su retrato.

- ¿Qué haces ratón de biblioteca?

La voz del insufrible Sirius Black sacó a Bella de su lectura de sirenas. Buscó la insoportable figura del chico pero no lo encontró a su alrededor, decidida a ignorarlo siguió con su lectura, pero este molesto por la falta de atención de la adolescente le lanzó un pequeño pedacito de la rama del árbol en el que estaba sentado. Bella miró hacia arriba y vio la sonrisita burlona de la persona que más odiaba en la vida.

- ¡Si no te importa idiota estoy tratando de leer!

- Lo sé ratón de biblioteca.

Se dirigió a ella con el mote que le había puesto en segundo año al verla dirigirse cada tarde a la biblioteca, lo seguía haciendo sólo para molestarla pues sabía que la joven no soportaba que la llamara así.

- ¿¡Es demasiado pedir que por una vez en tu...

Se interrumpió a ella misma buscando el insulto adecuado para no decir una mala palabra que la rebaje al nivel del joven, pero a él le dio gracia  lo que pretendía  la adolescente al querer insultarlo.

- ¿¡... maldita vida me dejes en paz!?

- Es mucho pedir.

Dijo con tranqulidad, se bajó del árbol y sin darle tiempo a Bella, la cargó por las piernas y se la echó al hombro como un costal de papas. Ella pataleaba y gritaba que la soltara y eso hizo, pero no en el suelo como haría una persona normal no, en cambio la tiró al helado lago que tenían cerca y se dio media vuelta para irse.

- ¡Ay no, ay no. Ayúdenme, no sé nadar!

Al escuchar las palabras de la joven Black maldijo en voz baja y se acercó al lago para ayudarla. Pero cuál sería su sorpresa al percatarse de que ella ya no estaba, rápidamente se zambulló en las frias aguas del lago para poder buscarla y que esta no se ahogara, pues no quería que su hermano James como él lo llamaba lo matara, pero nuevamente no la encontró, Bella Potter había desaparecido.

◇◇◇

¿Qué es lo que está pasándome?

Pensamientos como esos abundaban en la cabeza de Bella.

Al ser lanzada al lago por Black, Bella había comenzado a desesperarse, ella no sabía nadar, le tenía mucho miedo a ahogarse. Para su sorpresa cuando estuvo medio minuto en el agua sus pies se transformaron en una larga cola de pez plateda; sus ojos se volvieron mas claros; sus cabellos más negros si es que era posible y un brillo emanó de él. En resumen, Bella Potter había despertado sus encantos de sirena al haberse metido al agua. Antes de que Black viniera por ella se introdujo en el agua y se fue a una sorprendente velocidad.

¿Cómo es que soy sirena? He leido mucho sobre este tema,y para tener el gen sirena este debe transmitirse de madre a hija, o de abuela a nieta. Es como las veelas. ¿Será que mi madre es sirena? ¿Pero si es así  por qué nunca nos contó nada a James o a mi? Tengo que hablar esto con James, tal vez él pueda ayudarme.

Reencarné en una sirena. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora