Reencarné en una sirena.

Capítulo 5:

James organizaba un ramillete de diferentes flores cerca de el bosque prohibido. Estaba pensando que si le diera aquellas hermosas flores a Lily, podría al fin conseguir que la pelirroja se enamorara de él.

-¿Qué haces James?

Sirius Black junto a su otro amigo Petter Pettegrew, habían divisado al chico de lentes cerca de la casa del guardabosques Hagrid. Les resultaba un poco raro que el segundo chico más mujeriego de Hogwarts después de Sirius estuviese recogiendo flores.

-¿Para quién son esas flores?

Preguntó ingenuo el más pequeño y rubio de los amigos.

- Para Quejicus Pett. ¿Verdad James?

-¡No digas estupideces Sirius, por supuesto que son para Lily!

-Claro, cómo no se me ocurrió.  Llevas cuatro años tras la misma chica y ella no te hace caso por estár todo el día con Snape.

Escupió con rabia el de ojos grises al referirse al chico que no dejaban vivir.

-Ni siquiera lo menciones. Ya tengo suficiente con mi hermana. Siempre se están escribiendo, he llegado a pensar que tienen una relación.

-Puede ser James, siempre se sientan juntos en clase, y Evans se sienta al otro lado de él.  ¿Será que los tres son novios?

-¿¡Pero qué idioteces dices Pettegrew!? ¡Bella nunca se fijaría en una inmunda serpiente!

-¿Te gusta mi hermana Black?

El joven palideció, desde el día que la había mirado tan fijamente no podía apartar los ojos de ella. Incluso miraba con bastante lujuria su cuerpo. Él no era el único, los demás chicos de la escuela incluso siendo Slitherin se entretenían mirando a la nueva y brillante Bella Potter mucho más que como lo hacían antes, y eso sin duda alguna hacía que Sirius Black hirviera de celos.

-Po-por su-supuesto que no James. ¡Podrá ser tu hermana pero no sabes cuánto la odio!

El joven Potter no le creyó ni un poco, el sabía cuando Black mentía y justo en ese momento lo estaba haciendo.

-¡Mejor que la sigas odiando Black, porque si alguna vez miras con otros ojos a mi hermanita, despídete de tu hombría!

El joven Pettegrew soltó una carcajada al visualizar la expresión de terror en el rostro del de ojos plateados.

◇◇◇

-¿Qué te has hecho ultimamente que todos los chicos del colegio babean más por ti que de costumbre?

Preguntó la pelirroja amiga de Bella mientras le peinaba el cabello y lo adornaba con flores silvestres.

-¡Incluso Sirius Black babea por ti Bella!

Habló Alice completamente sorprendida con su comunicado, y es que para todos en Hogwarts era más que claro el odio que se profesaban el primogénito de los Black y la chica Potter.

-No lo sé chicas. Créanme que si supiese algo les decía. Lo que sí les comentaré es que odio como me miran, me siento como un pedazo de carne al que no se pueden resistir.

-Es como si estuviesen en presencia de una veela.

Corroboró Lily analizando la situación.

-¿¡Bella será que eres una veela y tu encanto decidió mostrarse a tus catorce años!?

-¡Sabría si fuese veela Alice, mamá me habría contado!

Aunque en realidad no me contó sobre mi naturaleza de sirena.

Pensó, tenía que hablar con su hermano inmediatamente, él podría darle algún consejo a cerca de su problema. Tenía demasiadas dudas y tal vez él  podría hacer algo para ayudarla, fue mucho peor después de ese sueño extraño que parecía más bien un recuerdo, se había quedado mucho más confundida de lo que estaba luego de eso, sentía que el cerebro se le hacía agua sólo de pensar en el sueño-recuerdo.

-Chicas tengo que irme.

Habló levantándose de la cama de Lily asustando en el proceso a las otras dos chicas.

-¿Tan pronto?

-Por suerte he terminado de peinarte.

Dijo la pelirroja mostrándole una impecable trenza con varias flores silvestres incrustadas en esta.

-¡Te quedó genial Lily! Y si, debo resolver un asunto que había olvidado, luego las alcanzo.

-Vale, estarémos en el gran comedor ¿te guadamos asiento?

-Gracias Alice. Nos vemos.

Corrió por todo el castillo buscando a su hermano, casi salía del castillo cuando escuchó que alguien la llamaba.

-¡Sev! ¿Qué ocurre?

-Es que habíamos quedado para hacer el trabajo de pociones hoy en la biblioteca.

-Oh, lo lamento Sev, lo había olvidado. Estaba buscando a James, cuando lo encuentre y hable con él te busco ¿vale?

-Te estaré esperando entonces. Adiós Bella.

◇◇◇

James había acabado de recolectar flores para el ramo que le entregaría a Lily, Sirius y Petter estaban tumbados cerca de él completamente aburridos. El chico Black pensaba en el comportamiento tan sospechoso que mostraba la hermana de su amigo en esos días, incluso los chicos a su alrededor. Por alguna extraña razón a Remus no lo afectaba, sin embargo a él le afectaba mucho más que a los demás chicos.

-Bien chicos podemos irnos.

-¿A dónde irán?

La dulce voz de Bella llegó a los oídos de Black y Pettegrew como música celestial.

-¡Ah! Hola hermanita. Estaba recogiendo algunas flores para tu cuñada.

-¿Otra vez con lo de Lily? Ay James, si en serio quieres conseguir que esa pelirtoja testaruda se enamore de ti, deberías comenzar a comportarte como un caballero.

-¿A qué te refieres?

-¡No le hagas casoJames, sólo quiere undirte!

-No seas idiota Pett, por qué haría eso. Lily es una buena chica y de verdad me haría feliz ver a mi hermano con alguien tan amable, buena e inteligente como Lily.

-¡Pensé que querías empatar a Lily con Que...digo Snape!

-No, nunca he querido eso, a Lily no le gusta Sev. Como iba diciendote, lo que mi amiga odia más de ti es que cuando le profesas tu amor y ella te rechaza, vas corriendo a refugiarte en los brazos de otras.

-¿Se pone celosa?

-No es problema de celos, porque no es así. Más bien ella no cree que en verdad te guste, piensa que sólo quieres ligártela y luego dejarla como trapo sucio. También odia que fastidies a Severus. Por eso no le gustas y no te hace caso. Comienza a comportarte como un caballero y verás que triunfarás con ella. Créeme soy tu hermana y amiga de ella.

-¡Gracias Bell, eres la mejor hermana que tengo!

-Y también la única James.  Por cierto debo de hablarte de un asunto muy importante.

-¿Qué ocurre?

-A solas.

Miró a los chicos frente a ella, ambos se encontraban en una nube, más Black que Pettegrew pero reaccionó inmediatamente cuando James le pisteó el pie.

-¡Maldita sea James eso ha dolido!

- ¡Te dije sufrirías si mirabas a mi hermana!

Sirius no dijo nada y se fue con Petter, no sin antes guiñarle un ojo coqueto a Bella y tirarle un beso. James hizo como que le iba a pegar y este se fue corriendo antes de que lo molieran a golpes.

-Ahora si, dime qué pasa.

-Necesito que me creas y tengas la mente abierta. ¿Vale?

-Vale.

Dijo extrañado.

-James... soy una sirena.