Capítulo 1. Extraña sensación hormigueante

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──¡Sunoo!

  Tal llamado le hizo quitarse un auricular de uno de sus oídos mientras alzaba la cabeza para buscar con la mirada a la persona que lo había proferido.

  Al otro lado de la pequeña calle, en la acera de enfrente, se encontraba el responsable: Park Sunghoon, sonriendo tan brillante como siempre lo hacía, saludándolo frenéticamente con su diestra, como si el grito no hubiese sido suficiente para llamar la atención de su mejor amigo y de las personas alrededor.

  Sunoo sonrió en su dirección sin despegar los labios, haciendo que sus ojos se achicaran con el gesto.

  El semáforo de peatones cambió a verde, indicando que podían avanzar. Sunoo, quieto quietos su lugar, vio cómo Sunghoon se abría camino entre la gente hasta llegar a su lado, abrazándole por los hombros y haciéndole apretar el paso.

  ──Podías haberme esperado aquí en lugar de haber hecho el camino dos veces, ¿sabías? ──Comentó Sunoo cuando llegaron al otro extremo, en donde antes había estado parado Sunghoon.

  El chico a su lado negó divertido.

  ──Caminas muy lento, Sunoo. Probablemente habrías provocado que lleguésemos tarde a clases ──Sunghoon revolvió su cabello con la mano que tenía libre.

  Sunoo, cerrando los ojos, se encogió de hombros, como si de esa forma lograra evitar la repentina caricia e ignorar la sensación que se avecinaba: desde hace algún tiempo un molesto hormigueo hacía presencia en distintas partes de su cuerpo.

  ──Querrás decir tú, yo siempre soy puntual ──carraspeando, Sunoo retiró el brazo de Sunghoon de sus hombros. En otro tiempo, lo haría porque no le gustaba que su amigo reafirmase su altura de esa forma; pero ahora, el hormigueo que se presentó en su tórax en el momento en que Sunghoon lo abrazó por los hombros, lo hizo sentir ligeramente diferente. Se alisó el cabello con una mano, continuando con su queja: ──Pero en días como este, en los que me interceptas a medio camino, siempre haces que vayamos más lento de lo que deberíamos... Incluso cuando me acompañan Jungwon o Niki voy más rápido. Así que eres tú el que hace que nos atrasemos.

  Sunghoon reviró los ojos con una sutil sonrisa en los labios tras exhalar fuertemente; no estaba enojado, era más como una manera divertida de mostrarse ante la queja de su amigo. Sunoo frunció el ceño ligeramente; el hormigueo desapareció.

  ──¿No me crees? Míralo por ti mismo ──Sunoo colocó su teléfono frente al rostro de Sunghoon: claramente se leía "7:57 am" ──Llegaremos tarde y es tu culpa. Otra vez.

  ──En ese caso... Debemos de correr.

  Y ni bien terminó de decir eso, el azabache tomó su mano y emprendió la carrera; tanto a contra reloj por el escaso tiempo con el que contaban, como a contra marea por los otros estudiantes que se atravesaban en su camino.

  En un primer momento, Sunoo no sabía si era irresponsabilidad de Sunghoon hacer que llegaran tarde o si acaso lo hacía apropósito; sólo sabía que ese era un aspecto de su amigo que le molestaba. Sin embargo, con el paso del tiempo, le llegó a parecer divertido; las peleas que tenían sobre la culpa de lentitud del uno o del otro rayaban en lo infantil, convirtiéndose en una simple manera de bromear entre ellos; además, ya habían adoptado esas actitudes y a ambos les resultaba divertido fingirlas.

  El hormigueo en su tórax regresó y se expandió por toda su extremidad superior izquierda, concentrándose con mayor persistencia en su mano sostenida por la de Sunghoon.

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──¡Sunghoon! Te he dicho mil veces que me avises si correrás.

𝓗.⠀𔘓⠀𝓥𝒐𝒎𝒊𝒕𝒂𝒏𝒅𝒐  𝓐𝒎𝒐𝒓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora